?Es saludable para los perros comer cereales?
Aunque los canes pueden sobrevivir sin almid¨®n, es necesario en determinadas condiciones fisiol¨®gicas como la gestaci¨®n y la lactancia
Si hay un debate que se ha apoderado de las redes sociales, y de la comunidad de amantes de los perros desde hace algunos a?os, es el de los cereales en la alimentaci¨®n canina. En particular, las presencia de los cereales en las croquetas para perros.
Las acusaciones son numerosas: se dice que su presencia provoca hinchaz¨®n, gases, diarrea, diabetes, obesidad e intolerancia al gluten y que contienen micotoxinas (toxinas producidas por hongos microsc¨®picos). En pocos a?os, el mercado de los alimentos secos para perros se ha adaptado notablemente a este miedo a los cereales. Muchas marcas aseguran haberlos eliminado de sus f¨®rmulas y lo pregonan en las redes sociales. Pero ?son realmente malos los cereales para los perros?
Los presuntos culpables: ?los cereales!
Detr¨¢s de la noci¨®n de cereal se esconden varios conceptos que a menudo confunden a los consumidores, como hidratos de carbono, gluten y micotoxinas.
Un cereal es una planta herb¨¢cea cultivada principalmente por el valor nutritivo de sus granos. Son casi exclusivamente plantas de la familia Poaceae, m¨¢s com¨²nmente conocidas como gram¨ªneas. Los m¨¢s conocidos y cultivados en el mundo son el trigo, el ma¨ªz, el arroz y la cebada.
Por t¨¦rmino medio, un grano de trigo contiene un 70 % de almid¨®n (un hidrato de carbono complejo). El gluten es un conjunto de prote¨ªnas contenido en las semillas de los cereales del grupo Poaceae.
Acusaci¨®n 1: no respetar la dieta ¡°natural¡± del perro
La primera acusaci¨®n contra los alimentos que contienen cereales es que no respetan la dieta natural del perro. Para entender con mayor precisi¨®n cu¨¢l es la dieta ¡°natural¡± del perro, se pueden considerar dos enfoques: fijarse en los perros prehist¨®ricos o en los perros asilvestrados (individuos de especies domesticadas con poca o ninguna dependencia del ser humano).
El an¨¢lisis de restos caninos hallados en tumbas de varios yacimientos del noreste de la pen¨ªnsula ib¨¦rica datados en la Edad del Bronce Media temprana (finales del III al II milenio a. e. c.) ha revelado que la dieta de los perros era bastante similar a la de los humanos y conten¨ªa cereales en algunos casos.
La dieta de los perros asilvestrados tambi¨¦n se basa principalmente en los desechos de las personas, siendo los cereales y las heces humanas sus principales ingredientes.
Por lo tanto, podemos concluir que la dieta de los perros desde la prehistoria ha consistido en restos de comida humana (incluidas las heces) que contienen, en algunos casos, cereales, lo que difiere bastante de la imagen que tenemos de la dieta ¡°natural¡± del perro (a menudo representado como cazando, como un lobo en libertad).
Acusaci¨®n 2: los perros no pueden digerir el almid¨®n
Contrariamente a la creencia popular, los perros tienen una peque?a cantidad de alfa-amilasa salival (una enzima que inicia el proceso de descomposici¨®n del almid¨®n) y capacidad de digerir del almid¨®n.
Durante la domesticaci¨®n, se seleccionaron ciertos genes que desempe?an un papel esencial en la digesti¨®n del almid¨®n. Con el tiempo y mediante la selecci¨®n asociada a la creaci¨®n de razas, el n¨²mero de copias del gen que codifica la producci¨®n de enzimas que digieren el almid¨®n aument¨® en funci¨®n de los h¨¢bitos alimentarios de las razas. Por tanto, los perros son capaces de digerir el almid¨®n, aunque no todas las razas son necesariamente iguales.
Aunque los perros pueden sobrevivir sin almid¨®n, su presencia sigue siendo necesaria en determinadas condiciones fisiol¨®gicas como la gestaci¨®n y la lactancia.
Acusaci¨®n 3: el gluten enferma a los canes
El consumo de productos derivados del gluten puede provocar reacciones de las que pueden identificarse tres categor¨ªas: reacciones al¨¦rgicas, autoinmunes y de otro tipo.
En los perros, la relaci¨®n entre el gluten y las enfermedades intestinales se ha estudiado en el Setter Irland¨¦s durante unos 20 a?os, pero en la actualidad la relaci¨®n entre el gluten y los problemas digestivos en esta raza no est¨¢ claramente establecida.
En los Border Terrier, se ha observado una asociaci¨®n entre el gluten y la discinesia parox¨ªstica (temblores involuntarios epis¨®dicos). Por el momento, estos son los dos ¨²nicos informes de patolog¨ªas que podr¨ªan asociarse a la presencia de gluten.
En este contexto, podr¨ªa considerarse una dieta de evitaci¨®n para comprobar la sensibilidad del perro.
Acusaci¨®n 4: las micotoxinas envenenan a los perros
Las micotoxinas son toxinas producidas por hongos microsc¨®picos durante el crecimiento, almacenamiento, transporte o procesamiento de las plantas. Pueden estar presentes en diversos ¨®rganos vegetales, incluidos los cereales, las frutas y los tub¨¦rculos.
La m¨¢s com¨²n en la alimentaci¨®n animal es la alfatoxina B1, que se encuentra sobre todo en los granos de trigo. Tanto en humanos como en animales, las micotoxinas pueden causar diversos problemas de salud (toxicidad hep¨¢tica, toxicidad renal, etc.). No obstante, se aplican m¨¦todos de control en la cosecha y la industria alimentaria tambi¨¦n utiliza m¨¦todos de desintoxicaci¨®n. En general, los mohos no crecen en los alimentos secados y conservados correctamente, por lo que un secado eficaz y un almacenamiento correcto son medidas eficaces contra los mohos y la producci¨®n de micotoxinas.
El contenido total de aflatoxinas suele ser mayor en los alimentos econ¨®micos para perros en comparaci¨®n con los alimentos premium. Esta diferencia puede explicarse en parte por el uso de productos de menor coste con condiciones de almacenamiento menos controladas. La fuente de nutrientes de origen animal tambi¨¦n es un factor a tener en cuenta.
?Son m¨¢s sanos los alimentos sin cereales?
Los alimentos sin cereales no siempre est¨¢n exentos de almid¨®n, pero las plantas ricas en prote¨ªnas como los guisantes, las habas y las lentejas tienen niveles de carbohidratos m¨¢s bajos que los cereales. Por eso interesan a la industria de la alimentaci¨®n animal. Por ejemplo, las semillas de guisante, contienen un 21 % de prote¨ªnas, pero tambi¨¦n un 45 % de almid¨®n.
En los alimentos para perros bajos en carbohidratos, el almid¨®n suele sustituirse por grasa. Esto puede no ser adecuado para algunos canes, sobre todo si tienen sobrepeso o padecen insuficiencia renal. Adem¨¢s, un alimento sin cereales no es necesariamente menos rico en carbohidratos si se comparan las composiciones.
Por ¨²ltimo, estudios recientes han informado de casos de cardiopat¨ªa (cardiomiopat¨ªa dilatada) en perros que consumen alimentos sin cereales ricos en leguminosas, sin que ello se relacione con razas con riesgo de padecer esta patolog¨ªa. Aunque la asociaci¨®n entre los alimentos sin cereales y la cardiomiopat¨ªa dilatada a¨²n no est¨¢ clara, se impone la precauci¨®n, sobre todo en el caso de los alimentos a base de guisantes, como sugiere un estudio muy reciente.
Veredicto: los cereales son inocentes
Las acusaciones sobre los cereales no son tan evidentes como podr¨ªa parecer: los perros comen cereales desde que fueron domesticados, han desarrollado las enzimas para digerir el almid¨®n, el gluten solo es un problema para algunos individuos de razas poco comunes y las micotoxinas se encuentran en todos los alimentos, pero su cantidad est¨¢ muy regulada.
Por lo tanto, en la actualidad no existe ninguna justificaci¨®n cient¨ªfica para elegir un alimento sin cereales para perros sanos sin ninguna afecci¨®n m¨¦dica.
Sara Hoummady es profesora asociada de etolog¨ªa y nutrici¨®n animal en el Instituto Polit¨¦cnico UniLaSalle.
Guillemette Garry es doctora en biolog¨ªa y profesora e investigadora en el Instituto Polit¨¦cnico UniLaSalle.
Este art¨ªculo fue publicado originalmente en The Conversation.
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