?Y si aplicamos las lecciones del tabaco al control de la obesidad?
Este 4 de marzo se celebra el d¨ªa mundial contra la obesidad, una oportunidad para abogar por pol¨ªticas p¨²blicas que aborden la prevenci¨®n y control de este problema de salud p¨²blica
La prevalencia de sobrepeso y obesidad, en poblaci¨®n adulta, es de un 53,6% en Espa?a. En poblaci¨®n infantil y adolescente, las cifras m¨¢s recientes estiman que un 33,4% presenta exceso de peso. Si el tabaco se consider¨® la principal epidemia del siglo XX, la OMS ha se?alado la obesidad (COVID-19 aparte) como ¡°la pandemia invisible del siglo XXI¡±.
Ambos factores de riesgo comparten mucho. Por ejemplo, una industria que produce y distribuye una amplia oferta de productos nada saludables, sean cigarrillos o ultraprocesados, a precios muy asequibles. En el caso de la alimentaci¨®n no se trata de toda la industria, pero s¨ª de casos como ciertos grupos empresariales, detr¨¢s de productos como Iqos, pero tambi¨¦n de las galletas Oreo o de las salchichas ?scar Mayer.
Las estrategias de publicidad tambi¨¦n son parecidas. Las campa?as se basan en aumentar el atractivo de estos productos, aumentar su aceptaci¨®n, e intentar posponer cualquier tipo de regulaci¨®n. Tampoco se olvidan de generar confusi¨®n sobre las repercusiones en salud de sus productos. De ah¨ª que muchas estrategias de marketing alimentario recuerden a aquellas dise?adas para vender m¨¢s y m¨¢s cigarrillos.
Si la historia se repite, aprendamos de ella
En 2005, Espa?a firm¨® y ratific¨® el convenio marco de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud para el control del tabaquismo. Este inclu¨ªa un plan de medidas que se present¨® bajo las siglas MPOWER: M de monitorizar (monitor) el consumo de tabaco; P de proteger (protect) del humo; O por ofrecer (offer) ayuda para dejar de fumar; W por advertir (warn) del da?o; E por hacer cumplir (enforce) las prohibiciones de publicidad; y R por aumentar (raise) los impuestos al tabaco. Bajo este marco se aprobaron dos leyes en nuestro pa¨ªs, en 2005 y en 2010, que han impulsado importantes avances en la protecci¨®n de la poblaci¨®n frente al tabaco.
Aunque la comunidad cient¨ªfica lleva a?os abogando por este tipo de pol¨ªticas, las intervenciones siguen poniendo el foco en la responsabilidad individual. As¨ª, se prefiere optar por medidas inefectivas, centradas en la educaci¨®n nutricional, o en acuerdos de autorregulaci¨®n voluntaria. En parte, como ocurri¨® con el tabaco, por la captura corporativa de algunos actores clave, de la que no se salvan ni profesionales ni investigadores del ¨¢mbito de la salud p¨²blica.
?Qu¨¦ se propone?
Los expertos abogan por intervenir en cinco ¨¢reas: 1) limitar la publicidad, 2) regular la oferta, 3) reducir la demanda, 4) mejorar el etiquetado frontal, y 5) reformular los acuerdos con la industria.
Los objetivos de limitar la publicidad son disminuir las ventas y la aceptaci¨®n social de los productos. Igual que con los cigarrillos electr¨®nicos, la mayor¨ªa de las campa?as de los ultraprocesados se dirigen a ni?os, ni?as y adolescentes. En nuestro pa¨ªs, la publicidad y la promoci¨®n del tabaco est¨¢n generalmente prohibidas, con algunas excepciones en los puntos de venta (p. ej. los estancos). El Real Decreto sobre regulaci¨®n de la publicidad de alimentos y bebidas dirigida a menores, presentado en octubre de 2021, a¨²n tiene que entrar en vigor. Y parece que tiene al Ministerio de Agricultura en contra.
Tambi¨¦n se puede regular el acceso y reducir as¨ª el consumo. Por ejemplo, prohibiendo la compra de ciertos productos a menores de edad, o limitando los puntos de venta. En este sentido, muchos pa¨ªses han prohibido ya las m¨¢quinas de vending dentro de los centros escolares. En Espa?a, el Documento de consenso sobre alimentaci¨®n en los centros educativos, de 2010, tiene car¨¢cter voluntario y una aplicaci¨®n muy escasa tirando a nula. Un ejemplo de la ineficacia de la autorregulaci¨®n que defiende el ministro Planas.
Declarar ciertos espacios libres de humo fue uno de los mayores hitos del control de tabaquismo. Del mismo modo, es hora de plantear que los centros educativos y sanitarios sean lugares donde se regule la oferta de los men¨²s, la boller¨ªa, o las bebidas azucaradas.
Otra de las intervenciones m¨¢s efectivas para reducir el consumo de tabaco fue subir el precio por medio de impuestos. Este tipo de pol¨ªticas fiscales tambi¨¦n pueden reducir la demanda de productos no saludables. En Catalu?a, pese a la resistencia por parte de la industria, se introdujo un impuesto a las bebidas azucaradas. Su reciente evaluaci¨®n ha demostrado que funciona. Por el contrario, no hay datos que demuestren un impacto negativo sobre la econom¨ªa o el mercado laboral.
Algunas de estas medidas se han incluido en el Plan Estrat¨¦gico Nacional para la Reducci¨®n de la Obesidad Infantil, presentado el pasado junio como una hoja de ruta a seguir en nuestro pa¨ªs hasta 2030. Ojal¨¢ no quede en papel mojado.
NUTRIR CON CIENCIA es una secci¨®n sobre alimentaci¨®n basada en evidencias cient¨ªficas y en el conocimiento contrastado por especialistas. Comer es mucho m¨¢s que un placer y una necesidad: la dieta y los h¨¢bitos alimenticios son ahora mismo el factor de salud p¨²blica que m¨¢s puede ayudarnos a prevenir numerosas enfermedades, desde muchos tipos de c¨¢ncer hasta la diabetes. Un equipo de dietistas-nutricionistas nos ayudar¨¢ a conocer mejor la importancia de la alimentaci¨®n y a derribar, gracias a la ciencia, los mitos que nos llevan a comer mal.
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