El juez del 'caso Outreau' sobre pederastia en Francia defiende la honestidad de su trabajo
Su comparecencia ante la comisi¨®n parlamentaria que estudia este fiasco judicial ha sido retransmitida en directo por varias cadenas
El juez Fabrice Burgaud, instructor del mayor fiasco judicial franc¨¦s desde la II Guerra Mundial, el caso Outreau sobre pederastia, ha declarado esta tarde que hizo su trabajo con honestidad y que pod¨ªa "sentir el sufrimiento" de los 13 absueltos, a quienes no ha pedido disculpas. "Estimo haber hecho honestamente mi trabajo, sin ning¨²n partidismo de ning¨²n tipo", ha subrayado el juez Burgaud, de 34 a?os, en su esperada comparecencia ante la comisi¨®n parlamentaria que estudia desde el 14 de diciembre de 2005 "las causas de las disfunciones de la justicia" en este sonado proceso.
Extremadamente p¨¢lido y con ojeras, Burgaud, cuya comparecencia ha sido difundida en directo por radios y televisiones, incluidas las generalistas de mayor audiencia -algo in¨¦dito en Francia-, ha comenzado su intervenci¨®n destacando su "emoci¨®n" por estar ante gran parte de los absueltos, presentes en la sala.
"Hoy puedo sentir sus sufrimientos"
"Hoy, quiz¨¢ m¨¢s que otros d¨ªas, puedo sentir sus sufrimientos, imaginar lo que han vivido, su encierro, su separaci¨®n de sus seres queridos", ha afirmado, sin llegar a pedirles perd¨®n. Igualmente, Burgaud, que comenz¨® a instruir el caso Outreau apenas terminados sus estudios como magistrado, ha manifestado su "tristeza" al recordar que en este asunto hab¨ªa "ni?os violados por adultos, que les pegaban y les sometieron a cosas horribles". "Descubr¨ª testimonios abominables, el horror que hab¨ªan vivido, el dolor y el sufrimiento de esos ni?os", ha se?alado, sin perder en ning¨²n momento un tono monocorde y pausado.
Temeroso de que la comparecencia se pudiese transformar en una especie de linchamiento del juez, el presidente de la comisi¨®n parlamentaria, el socialista Andr¨¦ Vallini, ha hecho hincapi¨¦ en que no se trata de "una instancia jurisdiccional ni disciplinaria" y mucho menos de "un tribunal". Vallini ha recordado que "el dossier de Outreau pas¨® por las manos de 154 magistrados" y conmin¨® a los 30 miembros de la comisi¨®n y a la prensa a "trabajar con seriedad, serenidad e imparcialidad".
El asunto arranc¨® el 20 de febrero de 2001 en el barrio popular de La Torre del Zorro, en Outreau (norte de Francia): Myriam y Thierry Delay son detenidos tras ser denunciados por sus cuatro hijos de haberles sometidos a abusos sexuales durante cinco a?os. En primavera de ese mismo a?o, siete vecinos del mismo inmueble fueron encarcelados, entre ellos una pareja que viv¨ªa en el mismo rellano que los Delay y que, junto al matrimonio, est¨¢ actualmente en la c¨¢rcel por haberse comprobado que abusaron de los peque?os, que llegaron a acusar sin fundamento a una veintena de personas. A partir de noviembre de 2001, el caso se dispar¨® al engrosarse con las denuncias de hasta 17 ni?os que acusaron a 80 adultos.
Una enorme bola de nieve
La enorme bola de nieve comenz¨® a desinflarse en el juicio en primera instancia en Saint-Omer, cuando siete de los 17 acusados fueron absueltos, y perdi¨® toda su consistencia el pasado 1 de diciembre al ser absueltos otros seis en apelaci¨®n en Par¨ªs. Un fiasco judicial que se ha saldado con las vidas rotas de 13 acusados sin fundamento, que pasaron meses o a?os en prisi¨®n preventiva, y con el suicidio en la c¨¢rcel de otro imputado. La inmensa emoci¨®n suscitada por las declaraciones de los 13 absueltos en su comparecencia del 18 de enero pasado -algunos diputados lloraron- dio un vuelco a la investigaci¨®n parlamentaria.
Francia entera supo aquel d¨ªa, sin intermediarios, el terrible calvario vivido por 13 inocentes, cuyos relatos escuch¨® en primera persona, aunque fragmentados en los informativos, pues entonces s¨®lo tres cadenas tem¨¢ticas difundieron en directo la totalidad de sus comparecencias. El fiasco de Outreau ha contribuido al aumento de la desconfianza de los franceses en la Justicia, seg¨²n los sondeos, y llevar¨¢ a una reforma del sistema judicial, probablemente antes de fin de a?o, aunque por el momento no se sabe si ser¨¢ radical o s¨®lo parcial.
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