Un robot submarino cruza el Atl¨¢ntico

Como un torpedo pac¨ªfico, el primer robot submarino que ha cruzado el Atl¨¢ntico est¨¢ ya a s¨®lo unos 300 kil¨®metros de las costas gallegas y ser¨¢ recibido oficialmente en Baiona el 9 de diciembre tras recorrer 7.500 kil¨®metros, sin motor y alimentado ¨²nicamente por sus bater¨ªas. En los ¨²ltimos d¨ªas los controladores de este aparato no tripulado teledirigido han tenido que luchar con las complicadas corrientes de esa zona y las altas olas para orientar el robot hacia la costa y mantenerlo al mismo tiempo fuera del alcance del abundante tr¨¢fico mar¨ªtimo de la zona. La pr¨®xima semana, un barco de Puertos del Estado, que colabora desde el principio en este proyecto de la Universidad Rutgers y la agencia NOAA , de Estados Unidos, saldr¨¢ para recogerlo.

El glider (planeador submarino) entr¨® en aguas espa?olas el pasado 13 de noviembre tras 201 d¨ªas de navegaci¨®n, ya que sali¨® el 27 de abril de la costa del Estado de Nueva Jersey. Es un aparato cient¨ªfico, que tiene como misi¨®n recoger datos del oc¨¦ano como la densidad del agua, la salinidad, la profundidad y la temperatura. Cada ocho horas aproximadamente emerge y transmite por sat¨¦lite los datos recogidos, al tiempo que recibe las ¨®rdenes para modificar el rumbo en caso necesario.

"Es un acontecimiento hist¨®rico que haya conseguido cruzar el Atl¨¢ntico, significa que ha empezado una nueva era en la exploraci¨®n de los oc¨¦anos", comenta Enrique ?lvarez Fanjul, de Puertos del Estado. "En el futuro veremos flotas de estos minisubmarinos por todas partes, que recoger¨¢n continuamente datos de forma c¨®moda y precisa". Estos datos ayudar¨¢n, entre otras cosas, a conocer mejor el papel de los oc¨¦anos en el cambio clim¨¢tico. Vigilar¨¢n el calentamiento del agua, que est¨¢ relacionado con el nivel de mar, algo muy importante para diversos sectores socioecon¨®micos, y especialmente para las infraestructuras portuarias. Hay quien avanza que estos robots ser¨¢n tambi¨¦n un nuevo modo de transporte, ya que son veh¨ªculos no contaminantes, de los que se recupera todo. Este es el segundo intento de que un planeador cruce el Atl¨¢ntico. En el primer intento, justo hace un a?o, el glider se perdi¨® por las islas Azores, seguramente porque le entr¨® agua.

El robot se llama RU27, conocido tambi¨¦n como El caballero escarlata, mide 2,4 metros y pesa 60 kilos. Se alimenta de sus bater¨ªas, y sus aletas le permiten planear y aprovechar las corrientes del oc¨¦ano. De hecho, la velocidad media del planeador ha sido de 15 cent¨ªmetros por segundo y cuando lleg¨® a aguas espa?olas hab¨ªa consumido apenas el 60% de la carga de las bater¨ªas, informan fuentes del proyecto. Tambi¨¦n dispone de sensores para evitar el choque con barcos.

Para emerger y sumergirse, hasta 200 metros de profundidad, el planeador se basa en los cambios de flotabilidad, que se generan por un mecanismo de pist¨®n, informa la universidad. As¨ª cambia el volumen del planeador y por tanto su densidad, que se hace mayor o menor que la del agua circundante. Cuando inicia el descenso la c¨¢mara reduce su capacidad y la densidad aumenta, por lo que se hunde. Las alas le proporcionan sustentaci¨®n para controlar el descenso y las bater¨ªas se pueden desplazar en el interior para cambiar la posici¨®n del centro de masa. Entonces recoge datos a trav¨¦s de sus sensores, como la salinidad, la profundidad, el ox¨ªgeno disuelto o direcci¨®n de las corrientes.

Al llegar a la profundidad programada, la c¨¢mara vuelve a su capacidad m¨¢xima. El volumen aumenta, la densidad disminuye y comienza el ascenso.

En la actualidad se han fabricado ya un centenar de unidades de estos planeadores, que construyen tres empresas de Estados Unidos, entre ellas Webb Research. Los cient¨ªficos e ingenieros las adaptan para sus objetivos. En Espa?a, el Instituto Mediterr¨¢neo de Estudios Avanzados, utiliza cuatro de estos veh¨ªculos para sus investigaciones en el Mediterr¨¢neo. Una nueva generaci¨®n experimental se est¨¢ desarrollando para ahorrar bater¨ªa aprovechando las diferencias t¨¦rmicas en el agua.

Los responsables del proyecto escogieron Baiona para la ceremonia de recogida de esta nueva carabela porque fue el primer lugar, con la llegada de La Pinta en 1493, en el que se conoci¨® el Descubrimiento de Am¨¦rica. Ir¨¢n a recibirlo cerca de 40 cient¨ªficos norteamericanos y se espera poder retransmitir el acto en directo. All¨ª estar¨¢n, entre otros, Jerry Miller, responsable de la Oficina de Ciencia y Tecnolog¨ªa de la Casa Blanca, Richard Spinrad y Jane Lubchenco, responsables de la NOAA, y Dean Goodman, de la Universidad Rutgers. Seguramente El Caballero Escarlata terminar¨¢ sus d¨ªas expuesto en el Museo Smithsonian de Estados Unidos junto a otros veh¨ªculos pioneros. En el proyecto han participado tambi¨¦n organizaciones de Irlanda, Canad¨¢, Reino Unido y Noruega. En Espa?a tienen el apoyo del Ministerio de Fomento a trav¨¦s de Puertos del Estado y de la Direcci¨®n General de la Marina Mercante, as¨ª como de la Universidad de Las Palmas.

El inter¨¦s de esta tecnolog¨ªa emergente es evidente, explican en Puertos del Estado, ya que es de aplicaci¨®n directa en diversos sectores socioecon¨®micos y, muy particularmente, ser¨¢ de utilidad a las autoridades portuarias. El conocimiento de la evoluci¨®n del nivel del mar es un dato imprescindible para el dise?o de infraestructuras portuarias, y ¨¦ste depende, en gran medida, del contenido cal¨®rico del oc¨¦ano, pues el agua se dilata al aumentar su temperatura. Estos robots servir¨¢n para tener datos m¨¢s precisos de este fen¨®meno. Por otro lado, los resultados obtenidos servir¨¢n para verificar y mejorar los modelos de circulaci¨®n marina desarrollados por este organismo p¨²blico.