La fortuna retorna a Eibar

Eran las 11:14 de la ma?ana y Edurne y Antonio se encontraban en la Administraci¨®n n?3 de Eibar (Guip¨²zcoa), donde trabajan. Los ni?os de San Ildefonso cantaban el 79.250, n¨²mero premiado, pero Edurne y Antonio a¨²n no sab¨ªan que la suerte se hab¨ªa desplazado a Eibar con el Gordo en su equipaje.

Minutos m¨¢s tarde, sonaba el tel¨¦fono de Edurne. "Zorionak" (felicidades), dec¨ªa una voz al otro lado. "?Por qu¨¦?", contestaba la eibarresa. "El Gordo ha ca¨ªdo en vuestra Administraci¨®n", les explicaba quien llamaba, un periodista. Acto seguido, comenzaban a llegar las unidades m¨®viles de los medios de comunicaci¨®n a la calle Ferm¨ªn Calbet¨®n, curiosos del pueblo que se arremolinaban alrededor del establecimiento. Sonaban las bocinas de los coches. "?Antonio, Antonio, Antonio!", gritaban los lugare?os, orgullosos de encontrarse en el primer plano de la actualidad nacional.

No se hab¨ªa vendido m¨¢s que una serie (10 boletos), por lo que se repartir¨¢n 3 millones de euros. En los aleda?os del establecimiento comenzaban las conjeturas y empezaban a sonar nombres de posibles agraciados. Sin embargo, ninguno de los premiados apareci¨®. La celebraci¨®n, si es que sab¨ªan que de un minuto a otro sus arcas hab¨ªan aumentado, era privada. Antonio y Edurne, por su parte, se mostraban satisfechos, aunque ellos no hab¨ªan adquirido ning¨²n boleto. En casa del herrero, cuchillo de palo, dice el refranero.

A¨²n no hab¨ªa pasado una hora desde conocer la buena nueva y ya se hab¨ªan descorchado tres botellas de champ¨¢n. No es para menos. Y es que la Administraci¨®n va recuperando poco a poco una suerte que les dio la espalda en 1988. Entonces, un d¨ªa 8 de agosto, tuvieron que devolver los d¨¦cimos de la Loter¨ªa por las inundaciones que asolaron el pueblo y dejaron su establecimiento anegado. La mala fortuna se ceb¨® con ellos y esos boletos fueron los premiados. Sin ning¨²n comprador. En el a?o 2000, no obstante, comenzaron a recuperar poco a poco la fortuna y repartieron 2.404 millones de pesetas y hoy, un d¨ªa 22 de diciembre, 22 a?os despu¨¦s de aquel fat¨ªdico 88, 10 boletos hacen olvidar aquellas inundaciones.