El nuevo presidente de la Audiencia de Barcelona pide recuperar el copago en la justicia
Pablo Llanera critica en su toma de posesi¨®n la falta de jueces y la escasez de medios
El presidente de la Audiencia de Barcelona, Pablo Llarena, ha defendido hoy recuperar la antigua figura de las tasas judiciales para que los ciudadanos que acudan a los tribunales y pierdan un pleito paguen una parte del servicio recibido.
En su discurso de toma de posesi¨®n como presidente de la Audiencia, Llarena ha considerado que "no resulta admisible" que la administraci¨®n de justicia opere sin tasas, por lo que se ha mostrado partidario de un "copago que revierta en la mejora del propio servicio".
Tras su discurso, en el que ha criticado con dureza la escasez de medios en la administraci¨®n de Justicia, el magistrado, miembro de la Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura (APM), ha precisado que su propuesta es recuperar las antiguas tasas judiciales, desaparecidas desde el a?o 1986, de manera que los ciudadanos que m¨¢s utilicen los tribunales sean los que m¨¢s paguen por ella.
Ciudadanos con derecho a la justicia gratuita
La propuesta de Llarena, que excluye del pago de las tasas a los ciudadanos con derecho a justicia gratuita y tambi¨¦n las causas penales, plantea que los litigantes que acudan a los tribunales y pierdan el pleito paguen parte del servicio judicial recibido.
Las tasas se sumar¨ªan a las costas judiciales que actualmente se fijan en sentencia y que corresponden a los gastos derivados del proceso judicial concreto, lo que incluye desde los honorarios de abogados o procuradores hasta el de algunas periciales o diligencias necesarias.
Llarena plantea que, de esa forma, la administraci¨®n de justicia no se financie solo a trav¨¦s de los impuestos, como cualquier servicio p¨²blico, sino tambi¨¦n mediante el copago directo del usuario, como sucede, por ejemplo, en el caso de algunas prestaciones que ofrecen los servicios de emergencia. El copago en la justicia ser¨ªa especialmente aplicable, seg¨²n el magistrado, en las jurisdicciones civil y contenciosa, mientras que la penal quedar¨ªa excluida por sus caracter¨ªsticas singulares.
En su discurso, el flamante presidente de la Audiencia ha lamentado la percepci¨®n social de que la administraci¨®n de la justicia es "una organizaci¨®n vetusta", y ha criticado que las ¨²ltimas nueve legislaturas democr¨¢ticas han estado m¨¢s centradas en "regular y controlar el poder del poder judicial" que en modernizar el sector.
Escasez de medios
"Despu¨¦s de 30 a?os buscando la modernidad p¨²blica", ha a?adido el magistrado, "(...) es inaceptable que nunca se haya contado con el n¨²mero de jueces preciso para cubrir siquiera la cicatera planta judicial definida por el legislador". Llarena no solo ha arremetido contra la falta de jueces y el "brutal aumento de la carga de trabajo", sino tambi¨¦n contra la escasez de medios materiales en la justicia, que en su opini¨®n los avances tecnol¨®gicos no han sabido compensar.
Por ese motivo, entre las propuestas que ha desgranado para mejorar la justicia figura la apuesta por los mecanismos que permitan desjudicializar algunos litigios que actualmente se solucionan en los tribunales as¨ª como favorecer la concentraci¨®n de decisiones judiciales que tanto colapsan actualmente los juzgados.
Llanera, nacido en Burgos en 1963 y que en 1989 ingres¨® en la carrera judicial como n¨²mero 1 de su promoci¨®n, ha dirigido los juzgados de primera instancia e instrucci¨®n de Torrelavega (Cantabria), el de primera instancia n¨²mero 8 de Burgos y, desde 1992, el de instrucci¨®n n¨²mero 31 de Barcelona. El a?o 1998 fue nombrado magistrado en la secci¨®n sexta de la Audiencia de Barcelona, donde ha permanecido hasta la actualidad, ¨²ltimamente como presidente del tribunal. Especializado en derecho penal, fue profesor de la Escuela Judicial entre 2000 y 2004 y de la Facultad de Derecho de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona (UAB).
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