Un estudio prev¨¦ que el cambio clim¨¢tico tendr¨¢ un impacto sobre el 51% de los vertebrados
A finales del siglo XXI, la flora y la fauna espa?ola se enfrentar¨¢n a una alteraci¨®n en la distribuci¨®n de los ecosistemas
El cambio clim¨¢tico tendr¨¢ un gran impacto en la fauna y la flora de la pen¨ªnsula ib¨¦rica este siglo. M¨¢s de un 51% de las especies podr¨¢n requerir medidas especiales de conservaci¨®n y adaptaci¨®n para paliar sus efectos. Est¨¢ es la conclusi¨®n principal del estudio elaborado por el CSIC y el Ministerio de Medio Ambiente presentado por la secretaria de Estado, Teresa Rivera. El objetivo del estudio es alertar a la poblaci¨®n de las significativas contracciones que puede sufrir la distribuci¨®n de unas 300 especies por la influencia del clima. "Exactamente, lo que se prev¨¦ que ocurra es el que el suroeste de la pen¨ªnsula tienda a un clima m¨¢s africano, ¨¢rido, y el norte a uno m¨¢s mediterr¨¢neo. Para que se entienda, Benidorm estar¨¢ en el mar del norte", explica Ricardo G¨®mez Calmaestra, uno de los autores del proyecto. Esto significar¨ªa que tanto la flora como la fauna cambiar¨¢n su h¨¢bitat. De las medidas de adaptaci¨®n que se implanten depender¨¢ la supervivencia de estas especies.
El objetivo del estudio ha sido evaluar como afecta el cambio clim¨¢tico a la biodiversidad del pa¨ªs. "Espa?a acoge la mitad de la flora y fauna europea". En total se han evaluado 292 especies: 27 de anfibios, 33 de reptiles, 61 mam¨ªferos y 171 aves. La situaci¨®n clim¨¢tica de referencia fue caracterizada usando datos mensuales procedentes de estaciones meteorol¨®gicas, en concreto temperatura y precipitaci¨®n, facilitados por la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (AEMET) y del "Instituto de Meteorolog¨ªa" (IM) de Portugal, para el periodo comprendido entre 1961-1990. Se dispuso de informaci¨®n procedente de 2173 estaciones pluviom¨¦tricas y 973 termom¨¦tricas para toda Espa?a peninsular y 89 estaciones pluviom¨¦tricas y 51 termom¨¦tricas para Portugal.
Del informe se desprende que el n¨²mero de vertebrados ver¨¢ reducida su distribuci¨®n actual en m¨¢s de un 30%. Dos ejemplos de vertebrados son el oso pardo y el lince. Ambas son especies muy manejadas, controladas. Las dos poblaciones de oso pardo que actualmente sobreviven en la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica se ver¨¢n afectadas por la completa desaparici¨®n de las condiciones clim¨¢ticas id¨®neas para su supervivencia. "Ahora mismo contamos con pocos ejemplares del plant¨ªgrado por lo que es viable", recuerda G¨®mez. En la actualidad, el lince vive en Do?ana y en la sierra de Andujar, la previsi¨®n es que su h¨¢bitat se desplace hacia el norte para conseguir las condiciones clim¨¢ticas necesarias para sobrevivir. "Todo esto depende tambi¨¦n de otros factores fundamentales. Este animal depende de los conejos, y los conejos a su vez de hierbas y par¨¢sitos. Si no se desplazan todos de manera paralela, estas especies pueden llegar a desaparecer", explica.
Anfibios, aves y reptiles, los m¨¢s afectados
Estas especies ser¨¢n las m¨¢s afectadas por el cambio clim¨¢tico. "Entre los a?os 2070 y 2100, algunos modelos prev¨¦n contracciones superiores al 30% de la distribuci¨®n potencial actual en el 85% de las especies de anfibios, el 67% de los reptiles, el 63% de las aves y el 67% de los mam¨ªferos", indica uno de sus autores. Ning¨²n anfibio y apenas el 3% de los reptiles, el 7% de los mam¨ªferos y el 11% de las aves registrar¨ªan aumentos del ¨¢rea potencial en el marco de los escenarios clim¨¢ticos utilizados.
La flora
La flora es un tema fundamental. Alguno de los modelos aplicados muestra que una inmensa parte se puede perder, incluso, el ¨¢rea de distribuci¨®n potencial. "Tener buenas ¨¢reas de flora facilita el h¨¢bitat de muchas especies. Nos preocupa el alcornoque y El Pinsapo". Este ¨²ltimo es una especie aut¨®ctona de la sierra de C¨¢diz, "es una reliquia que solo se puede dar en condiciones especiales y propias del clima de la zona", se lamenta G¨®mez. La flora est¨¢ muy amenazada y sus ¨¢reas son muy restringidas, "por lo que la movilidad de distribuci¨®n es menor que para la fauna".
Medidas de adaptaci¨®n para evitar el desastre
Las medidas espec¨ªficas para mitigar el impacto negativo de las alteraciones clim¨¢ticas deber¨ªan empezar por incluir la revisi¨®n de las listas de especies amenazadas, entre otros instrumentos legales. "El 38% de las especies se beneficiar¨ªa de la creaci¨®n de corredores de dispersi¨®n entre ¨¢reas naturales importantes. Un porcentaje m¨¢s reducido de especies, el 2%, podr¨ªa requerir de medidas m¨¢s extremas de conservaci¨®n, como son la reproducci¨®n en cautividad o los bancos de germoplasma", se?ala el compa?ero de G¨®mez. "Lo que hay que hacer es dar protecci¨®n jur¨ªdica a una especie y a su h¨¢bitat, incluy¨¦ndolo en el cat¨¢logo de especies amenazadas. No solo incluirlo sino que sea obligatorio actuar sobre el problema", argumenta G¨®mez. Adem¨¢s de la conservaci¨®n in situ, "del territorio en el que vive la especie". Red Natura 2000 es una ley europea que protege los ecosistemas, un 27% de los espa?oles ya est¨¢n incluidos". Sin olvidar que es "muy importante la reconstrucci¨®n de los ecosistemas" y la conservaci¨®n ex situ, "crianza en cautividad por ejemplo".
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