La vida de ellas
El estudio de la OMS y el Instituto Guttmacher coloca en una disyuntiva a los antiabortistas
El estudio de la OMS y el Instituto Guttmacher coloca en una compleja disyuntiva a los militantes antiabortistas. Sus resultados demuestran que para defender verdaderamente la vida ¡ªpor utilizar su propia terminolog¨ªa¡ª y frenar el aborto, lejos de prohibirlo hay que despenalizarlo. La paradoja es meramente aparente, pues es sabido que all¨¢ donde se legisla a favor del aborto no se busca incrementar el n¨²mero de interrupciones del embarazo, sino garantizar las condiciones sanitarias en las que se realizan. No es casualidad que sea justamente en tales pa¨ªses donde ello se acompa?e de una s¨®lida red de planificaci¨®n familiar que evite embarazos indeseados y, por tanto, el aborto, una experiencia traum¨¢tica para la mayor¨ªa de las que lo sufren. Es el caso de Espa?a y de casi toda Europa, donde, adem¨¢s, la ley consagra el derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo y su maternidad.
Los antiabortistas, muy arropados por las clases dirigentes y la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica cat¨®lica en Am¨¦rica Latina, deber¨ªan reflexionar sobre este asunto. Con las leyes m¨¢s restrictivas del mundo han logrado en el subcontinente la mayor tasa de abortos y un r¨¦cord solo superado por ?frica en porcentaje de intervenciones clandestinas que ponen en riesgo la salud y la vida de la madre. Si se tiene en cuenta que las latinoamericanas sufren un alt¨ªsimo nivel de violencia ¡ªincluyendo violaciones que en caso de embarazo no pueden interrumpir en algunos pa¨ªses¡ª, cabr¨ªa preguntarse entonces sobre el concepto que de la vida tienen esos jerarcas tan rectos y estrictos que, sin embargo, no suelen alzar la voz contra tanta ignominia.
El problema de los estudios cient¨ªficos ¡ªy lo son los basados en estad¨ªsticas fiables como este¡ª es que a veces destapan incoherencias que se alimentan de cierta hipocres¨ªa. Porque no puede ser casualidad que all¨¢ donde se niega a las mujeres su derecho a decidir en nombre de la vida se d¨¦ cita tambi¨¦n la mayor despreocupaci¨®n sobre la discriminaci¨®n que las humilla.
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