La poblaci¨®n adulta que estudia aumenta dos millones desde 2007

Que los j¨®venes est¨¢n mirando a la educaci¨®n en estos tiempos de desempleo masivo ya lo dec¨ªa el rapid¨ªsimo descenso del abandono escolar temprano en Espa?a: del 31,2% en 2009 al 26,5% en 2011. Pero la Encuesta de Actividades de Aprendizaje de la Poblaci¨®n Adulta que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) dice que el resto de la poblaci¨®n tambi¨¦n lo est¨¢ haciendo, al menos, mucho m¨¢s que antes de la crisis. Casi 10 millones de personas de 25 a 64 a?os (el 37,7%) participaron el a?o pasado en actividades de formaci¨®n, tanto formal (las que conducen a un t¨ªtulo oficial) como no formal (reciclaje, preparaci¨®n laboral). Esa cifra supone dos millones de personas m¨¢s que en 2007, cuando el INE hizo una encuesta similar: entonces era el 30,9%.

Desde luego no son unos porcentajes muy altos si se comparan con los de pa¨ªses n¨®rdicos como Suecia, Finlandia o Noruega, y con Reino Unido o Suiza, donde al menos la mitad de los adultos participa cada a?o en alg¨²n tipo de actividad formativa. Sin embargo, el crecimiento acerca a Espa?a a la media de la Uni¨®n Europea, al menos, a la de antes de la crisis: 34,9% en 2007. Entonces, Espa?a estaba en el furg¨®n de cola, pero aun por debajo estaban Portugal (26,4%), Italia (22,2%), Polonia (21,8%) o Grecia (14,5%).

Es m¨¢s que previsible que estas cifras hayan aumentado durante el periodo de crisis en muchos otros pa¨ªses, como ha ocurrido en Espa?a, donde el porcentaje de adultos que no estudia ni tiene ninguna intenci¨®n de hacerlo ha ca¨ªdo del 61% en 2007 al 52% en 2011. Entre los que efectivamente se est¨¢n formando, los mayores aumentos se han dado en los tramos de edad de 45 a 54 a?os (hay estudiando 794.000 personas m¨¢s, pues han pasado de 27% al 36,1%), y de 25 a 34 a?os (del 39,6% al 47,9%).

La mayor¨ªa se decanta por la ense?anza no formal

La profesora de Econom¨ªa y vicerrectora de la Universidad de Castilla-La Mancha F¨¢tima Guadamillas explica que la ¡°oferta de ense?anza no formal ha mejorado mucho¡± en los ¨²ltimos a?os. Adem¨¢s, se?ala que la crisis influye de forma directa, pero tambi¨¦n indirecta, es decir, por la presi¨®n de seguir form¨¢ndose que pesa tambi¨¦n sobre los que conservan el empleo; hay mucha competencia y qui¨¦n sabe qu¨¦ puede pasar. El 44% de los adultos con trabajo est¨¢ estudiando alg¨²n t¨ªtulo o curso, mientras que hace lo mismo el 34% de los parados.

Asimismo, los mayores crecimientos registrados en la educaci¨®n no formal y, por encima de los dem¨¢s, se han dado en estudios relacionados con ciencias sociales, ense?anzas comerciales y derecho, seguidos de los que tienen que ver con la salud y los servicios sociales. El gasto medio de los adultos de 25 a 64 a?os en estos cursos ha sido de 1.089 euros (en 2007 eran 781). En la parte de la educaci¨®n formal, hay cerca de 150.000 alumnos m¨¢s de 35 a 44 a?os que en 2007. Estudian carreras universitarias y equivalentes, seguidas de t¨ªtulos de formaci¨®n profesional de grado medio.

Las cifras a¨²n est¨¢n lejos del 50% de los n¨®rdicos o del Reino Unido

Las cifras de la encuesta del INE tambi¨¦n apuntan a que los espa?oles cada vez prefieren m¨¢s un aprendizaje dirigido (bien sea presencial o por Internet) antes que ser autodidactas. Esta categor¨ªa se mide como aprendizaje informal, y la cifra de adultos que lo practican ha pasado de 7,1 millones en 2007 a 4,7 millones en 2011. La encuesta los define como aquellos conocimientos que se adquieren ¡°de forma menos organizada y estructurada que la educaci¨®n no formal y sin acudir a ninguna instituci¨®n educativa¡±. ¡°Las lenguas extranjeras han sido la principal materia de estudio, seguida de la inform¨¢tica a nivel de usuario y las artes y humanidades¡±, a?ade la nota de prensa.

En la edici¨®n de 2011 de la encuesta, el INE ha a?adido, a diferencia de la de 2007, el grupo de edad que va de los 18 a los 24 a?os, un segmento cuyos usos y costumbres educativos est¨¢ mucho m¨¢s controlado, pues corresponde al abandono escolar temprano. Este se fija en el porcentaje de j¨®venes de esa edad que han dejado de estudiar antes de conseguir, al menos, el t¨ªtulo de bachillerato o el de FP. Sin embargo, la encuesta s¨ª da algunas pinceladas para completar ese mapa. Por ejemplo, que la inmensa mayor¨ªa de los j¨®venes de esa edad que no estudian (el 29,9%) son precisamente esos que abandonaron prematuramente las aulas (el 26,5%). Adem¨¢s, si cruzamos todas esas cifras con la de ninis ¡ªel 23,1% de los espa?oles de 18 a 24 a?os que ni estudian ni trabajan¡ª, podremos decir que la mayor¨ªa de los j¨®venes que no se est¨¢ formando tampoco tiene empleo y que la mayor parte de ellos abandonaron los libros de forma prematura.

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