Premio a la inteligencia artificial que imita a la humana

"Siendo ingeniero, siempre tuve la convicci¨®n de que en las matem¨¢ticas estaban las respuestas a casi todos los problemas, pero me di cuenta de que ten¨ªa limitaciones porque no sab¨ªa c¨®mo abordar la imprecisi¨®n". Ante esta encrucijada, Lotfi Zadeh (Azerbaiy¨¢n, 1921) ide¨® en 1956 el concepto de conjuntos difusos que, por las aplicaciones pr¨¢cticas que ha tenido a lo largo del ¨²ltimo medio siglo, le ha llevado a ganar el premio BBVA Fronteras del Conocimiento de este a?o en la categor¨ªa Tecnolog¨ªas de la Informaci¨®n y la Comunicaci¨®n.

La teor¨ªa de los conjuntos difusos permite dotar a las m¨¢quinas de sensores capaces de percibir la realidad con matices similares al modo en que los humanos interaccionan con el entorno, en muchos casos, de manera imprecisa y aproximada. "Cuando aparcas el coche, no mides con exactitud los movimientos que tienes que hacer, sino que haces apreciaciones y sabes m¨¢s o menos si tienes que girar mucho o poco en funci¨®n del espacio que tienes", explica el investigador Luis Magdalena, que ha promovido la candidatura de Zadeh a este premios. La ventaja m¨¢s importante de esta concepci¨®n de la tecnolog¨ªa es que permite usar sensores menos precisos y, por lo tanto, m¨¢s econ¨®micos para la industria, que los ha trasladado a la electr¨®nica de consumo de masas.

Las aplicaciones de los conjuntos difusos han inundado el mercado tecnol¨®gico. Se encuentran en lavadoras, metros, coches, c¨¢maras de v¨ªdeo y otros muchos instrumentos de la vida cotidiana. En cincuenta a?os, ha generado m¨¢s de 50.000 patentes solo en Jap¨®n y EE UU. Una de las empresas que m¨¢s rentabilidad ha sacado a la invenci¨®n de Zadeh es Omron, que ha vendido m¨¢s de 120 millones de tensi¨®metros inteligentes que utilizan la l¨®gica difusa. La automovil¨ªstica Ford ha desarrollado m¨¢s de 200 aplicaciones y est¨¢ trabajando en los sistemas de comunicaci¨®n entre el veh¨ªculo y el conductor, como la conducci¨®n autom¨¢tica personalizada.

El jurado del premio, formado por seis investigadores con s¨®lida reputaci¨®n a escala interancional, aplaude que el empe?o de Zadeh por ampliar los horizontes de la l¨®gica matem¨¢tica tradicional le haya llevado a hacer una aportaci¨®n "revolucionaria" en el campo de las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y la comunicaci¨®n con "una gran utilidad en numerosas ¨¢reas de aplicaci¨®n".

"Las brusquedades de la teor¨ªa de conjuntos tradicional producen comportamientos bruscos",? aclara Magdalena, director general del Centro Europeo para Soft Computing. Pone el ejemplo de una de las aplicaciones m¨¢s celebradas de la l¨®gica difusa: el metro sin conductor, como el de Sendai (Jap¨®n). "No se puede establecer que al llegar a un cierto punto, el tren frene en seco, porque los viajeros no lo soportar¨ªan. Lo que se ha conseguido es que cuando la m¨¢quina concibe que est¨¢ cada vez m¨¢s cerca de la estaci¨®n, empieza a reducir la velicidad de manera paulatina", a?ade. Este metro sin conductor replica el comportamiento del humano, es decir, traslada la gradualidad a las aplicaciones.

Zadeh suele referirse a ideas como "mujeres guapas", "hombres altos" o "coches r¨¢pidos", categor¨ªas que, desde el punto de vista conceptual, no tienen una definici¨®n ¨²nica. Pese a ser un defensor ac¨¦rrimo de las matem¨¢ticas, el ingeniero electr¨®nico, que asegura seguir activo a sus 91 a?os, bebe de disciplinas tan diversas como la ling¨¹¨ªstica y la sociolog¨ªa para continuar desarrollando su l¨®gica difusa. "A¨²n estamos muy lejos de comprender c¨®mo funciona el lenguaje de nuestra vida cotidiana", declara en una entrevista proyectada esta ma?ana en la presentaci¨®n de su premio. Todas esas inc¨®gnitas de la "perfecta imprecisi¨®n" del lenguaje humano est¨¢n a¨²n por trasladar a la inteligencia artificial.