Un tribunal de India cierra una carretera al turismo para evitar el ¡®safari humano¡¯
Las visitas masivas amenazan la vida cotidiana de la tribu jarawa en las islas Andam¨¢n El juzgado orden¨® clausurar la v¨ªa en 2002, pero se mantuvo abierta
El principal atractivo tur¨ªstico de las islas Andam¨¢n (India) es su poblaci¨®n: los pocos centenares de individuos de la tribu jarawa que campan a sus anchas entre playas paradisiacas y bosques frondosos. M¨¢s de 200 veh¨ªculos cargados de visitantes curiosos de ver c¨®mo vive una de las tribus m¨¢s antiguas que quedan en el mundo cruzan la reserva tribal cada d¨ªa, pero el Tribunal Supremo de Calcuta, al noreste del pa¨ªs, orden¨® el pasado lunes cerrar la carretera al turismo.
En 2002, la misma corte dict¨® una orden similar, pero las autoridades locales la han incumplido a lo largo de los ¨²ltimos 10 a?os. El pasado julio, los jueces obligaron el cierre de una cueva de caliza y un "volc¨¢n de barro"?situados en el norte de la isla que, seg¨²n los activistas, las empresas tur¨ªsticas utilizan como pretexto para llevar a los turistas a trav¨¦s de los bosques de los jarawa, donde increpan a la poblaci¨®n aut¨®ctona. Adem¨¢s de esta tribu, las islas Andam¨¢s tienen una poblaci¨®n de unas 400.000 personas.
La ONG Survival International lleva a?os luchando para que se proh¨ªba lo que consideran un "safari humano". Los coches y autobuses pasan por la carretera lentamente, esperando a ver un miembro de la tribu para sacarle fotos. El a?o pasado, los jawara denunciaron que los turistas denigran de la poblaci¨®n hasta el punto de obligabar a las mujeres a bailar con ellos a cambio de comida. Lo m¨¢s peligroso es que los extranjeros dan de comer a los jarawa, que no est¨¢n acostumbrados a la comida de fuera ni inmunizados contra las enfermedades de los for¨¢neos, seg¨²n explica Sophie Grig, antrop¨®loga y responsable de Survival de proteger a la tribu. "Los jarawa llevan muy poca ropa, como es normal por la temperatura del lugar donde viven, algo que gusta mucho a los turistas u otros visitantes, que miran y acosan especialmente a las mujeres", testifica.
Los turistas est¨¢n obligados a cruzar la carretera, que empez¨® a construirse en los a?os setenta, en convoyes para intentar evitar molestar a los jarawa, que llevan 55.000 a?os viviendo en la isla y hablan su propio idioma. "Tienen un sistema de vida aboslutamente desarrollado, son felices y conocen su entorno a la perfecci¨®n", explica la antrop¨®loga, que denuncia que las visitas tur¨ªsticas violan su derecho a la tierra y que los extranjeros se adentran cada vez m¨¢s en el bosque para curiosear.
Los jarawa viven de lo que cazan, sobre todo jabal¨ªs, de la pesca y de frutas que recolectan en el bosque, aunque no plantan nada. Uno de los elementos fundamentales de su dieta es la miel y tienen un sistema para adormecer a las abejas y poder recolectarla, aclara Grig. "Muchas ma?anas se ven obligados a cruzar la carretera para ir a pescar o cazar, y es cuando se encuentran con los visitantes", cuenta la experta que lleva trabajando en la isla desde los a?os noventa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.