¡°Es una pena que los recortes amenacen la calidad de la universidad p¨²blica¡±

La mayor¨ªa de los profesores asociados, con dedicaci¨®n parcial en las universidades, ni siquiera llegan a mileuristas. No sumaban 1.000 euros a fin de mes antes de la crisis y los recortes han mermado a¨²n m¨¢s sus n¨®minas. En esencia, se trata de la figura de un profesional de reconocido prestigio que dedica parte de su jornada a la docencia. En la pr¨¢ctica ocupan puestos estructurales en muchos casos y dedican mucho m¨¢s tiempo al asunto del que reflejan sus tablones horarios.

La profesora Mar¨ªa Jos¨¦ Pizarro, de 43 a?os, imparte seis horas de clase semanales como profesora asociada de Proyectos Arquitect¨®nicos en la Escuela T¨¦cnica Superior de Arquitectura de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid (UPM), un centro donde un tercio de la plantilla trabaja con sus mismas condiciones. ¡°Suponemos menos coste a la universidad p¨²blica pero queremos dar una ense?anza de calidad¡±, asegura. Su relaci¨®n contractual con la facultad recoge otras seis horas de preparaci¨®n que, en realidad, ¡°no se pueden cuantificar¡±, explica la docente, que lleva 12 a?os en las aulas. Pasa semanas enteras corrigiendo, dedica horas a las tutor¨ªas y los fines de carrera y tambi¨¦n le consume mucho tiempo la preparaci¨®n de las clases. Los recortes que ha aplicado la Comunidad de Madrid a las universidades p¨²blicas de la regi¨®n supusieron 301 despidos entre el Personal de Administraci¨®n y Servicios (PAS) de su campus y han a?adido ajustes en los sueldos que en su caso equivalen a pasar de 725 a 590 euros, un 18,6% menos. A los asociados les aplicar¨¢n, adem¨¢s, contratos de 11 meses o cuatrimestrales en lugar de anuales.

Tras doctorarse, Pizarro est¨¢ preparada para la acreditaci¨®n y podr¨ªa presentarse a unas oposiciones, pero cada vez hay menos plazas por la tasa de reposici¨®n aprobada por el Gobierno, que obliga a sustituir solo al 10% de los funcionarios salientes. ¡°Si seguimos as¨ª, las universidades se quedar¨¢n sin titulares ni catedr¨¢ticos, y eso pone en peligro tanto la investigaci¨®n como la docencia¡±, a?ade. ¡°ES una pena que los recortes puedan acabar con la calidad de la universidad p¨²blica¡±