La ¡®ley Wert¡¯ no est¨¢ a la altura
La pr¨¢ctica educativa debe adecuarse a los cambios sociales y a los avances de la ciencia, pero de eso no se ocupa la Lomce
Legislar en educaci¨®n (y van ya demasiadas leyes) siempre genera debate y controversia, y ese deber¨ªa ser el camino hacia el consenso. Con la Lomce no ha sido as¨ª, es la ley que ha generado m¨¢s rechazo desde la transici¨®n. Ha provocado un revulsivo social desde que se conocieron los primeros borradores y se ha incrementado con las enmiendas aprobadas en su proceso de tramitaci¨®n.
En el sector educativo, donde se trabaja con y para las personas, se exige rigor en la argumentaci¨®n de una idea. Todav¨ªa m¨¢s en un texto legislativo. As¨ª, se citan investigaciones internacionales o se dice que ¡°se apoya en evidencias y recogen las mejores pr¨¢cticas comparadas¡± sin concretar a cu¨¢les se refiere; y cuando lo hace recoge resultados sin base cient¨ªfica o se resaltan los aspectos que convienen a una determinada ideolog¨ªa. Y despreciando las aportaciones pedag¨®gicas que son fruto de a?os de experiencia e investigaci¨®n (laicidad, equidad, educaci¨®n por la ciudadan¨ªa, cohesi¨®n social¡). Y sin un debate riguroso sobre el tema necesario en una ley que regula la educaci¨®n de un pa¨ªs.
La pr¨¢ctica educativa debe adecuarse a los cambios sociales y a los avances de la ciencia, pero de eso no se ocupa esta ley. En el siglo XXI no es de recibo plantear un debate del XIX: la centralizaci¨®n, la letra con sangre entra, la lengua ¨²nica, el desprecio de las humanidades, la cultura del esfuerzo medido por evaluaciones uniformes, la separaci¨®n de ni?os y ni?as, la marginaci¨®n a una edad cada vez m¨¢s temprana. No se entiende c¨®mo el Gobierno que tiene la responsabilidad de la calidad de la educaci¨®n p¨²blica le otorga un papel subsidiario e incluso, en la tramitaci¨®n, introduce m¨¢s enmiendas en beneficio de la ense?anza privada concertada como la cesi¨®n de suelo p¨²blico, la correcci¨®n de pruebas, aumento de las subvenciones, etc¨¦tera, y lo hace, parad¨®jicamente, en nombre de la cohesi¨®n educativa, equidad y bienestar social.
La Ley Org¨¢nica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) se aprobar¨¢ ma?ana en el Pleno del Congreso con el voto en contra de casi todos los grupos pol¨ªticos (excepto el de UPyD) y con el rechazo de la comunidad educativa. La LOMCE no est¨¢ a la altura de la ciudadan¨ªa de este pa¨ªs.
Francisco Imbern¨®n es catedr¨¢tico de Pedagog¨ªa de la Universidad de Barcelona y director del Observatorio Internacional de la Profesi¨®n Docente.
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