La ¡®ley Wert¡¯ prev¨¦ un 81% menos de inversi¨®n que la LOE

La reforma educativa que impulsa el ministro Jos¨¦ Ignacio Wert lleva la crisis ¡ªy, por lo tanto, la austeridad y las restricciones presupuestarias¡ª tatuada en el articulado. ¡°El eje sobre el que pivota no es el incremento de la inversi¨®n en educaci¨®n, sino la mejora de la eficacia y eficiencia de los recursos disponibles, modificando la estructura del sistema educativo en la ense?anza secundaria¡±. Estas palabras, extra¨ªdas de la memoria del an¨¢lisis de impacto de Ley Org¨¢nica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), resumen el esp¨ªritu econ¨®mico de la norma que acaba de ser aprobada en el Congreso de los Diputados solo con los votos del Partido Popular.

En esa memoria de impacto se contempla que la reforma de Wert tendr¨¢, como m¨¢ximo, un coste de implantaci¨®n de 1.335 millones de euros. Esta cifra no aguanta una comparaci¨®n con la norma que pretende sustituir: 7.033 millones reservaba la Ley Org¨¢nica de Educaci¨®n (LOE). Es decir, 5.698 millones menos, aunque se debe tener en cuenta que la LOE fue aprobada en 2006, cuando la situaci¨®n econ¨®mica era muy distinta de la de ahora.

La norma anterior dedic¨® el grueso a programas al exilio del alumnado

La coyuntura era otra y las prioridades que se marcaron tambi¨¦n eran diferentes. En la a¨²n vigente ley educativa el bloque con mayor financiaci¨®n era el denominado ¡°el ¨¦xito de todos los alumnos¡±, con 2.795 millones. Ah¨ª se inclu¨ªan las partidas destinadas a programas de refuerzo y desdobles. Tambi¨¦n, los programas de cualificaci¨®n profesional, el refuerzo de las lenguas extranjeras y la implantaci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas.

El horizonte de las inversiones de la LOE fue de cinco a?os, entre 2006 y 2010. ¡°La inversi¨®n se cumpli¨®¡±, recuerda Miguel Recio, el responsable del gabinete de estudios de Comisiones Obreras. Pero, a partir de 2011, muchas de esas partidas e inversiones, como las destinadas a las nuevas tecnolog¨ªas y al incremento de plazas de guarder¨ªa, han ido desapareciendo de los presupuestos auton¨®micos y, sobre todo, de los estatales, el principal financiador de estos programas.

En el caso de la LOMCE, el apartado para el que el ministerio compromete un mayor desembolso es el destinado al gasto que supondr¨¢ la anticipaci¨®n de la elecci¨®n de itinerario a tercero de ESO y los cambios en cuarto. El ministerio estima un coste de 229 millones de euros en los dos cursos de implantaci¨®n. Pero las centrales sindicales se han quejado de que, para llegar a esta cifra, el departamento de Wert consolida una de las medidas de recorte que m¨¢s impacto han tenido entre las plantillas docentes de los institutos: el incremento del horario lectivo de los profesores.

La financiaci¨®n de la reforma de Wert tambi¨¦n ha centrado parte del debate en su tramitaci¨®n. Varias comunidades, tambi¨¦n gobernadas por el PP, se quejaron de la escasa financiaci¨®n que el ministerio hab¨ªa previsto. En un primer borrador se contemplaba un gasto cinco veces menor, algo que se modific¨® a principios de a?o.

El Consejo de Estado juzg¨® escasa la dotaci¨®n de la LOMCE

El Consejo de Estado tambi¨¦n abord¨® este asunto en el cr¨ªtico an¨¢lisis que hizo de la reforma. En su dictamen sobre la norma se afirma que el proyecto padece de una ¡°insuficiencia¡± en ¡°la valoraci¨®n econ¨®mica que entra?ar¨¢ su aprobaci¨®n¡±. Este ¨®rgano consultivo ve ¡°muy limitado¡± el gasto previsto para los cambios estructurales que se contemplan, entre ellos, la creaci¨®n de una nueva Formaci¨®n Profesional B¨¢sica.

De los hasta 1.335 millones que la reforma Wert contempla, 408 son de inversi¨®n directa del Estado en los dos primeros cursos de implantaci¨®n, lo que se traduce en partidas durante tres ejercicios presupuestarios. Es decir, el Gobierno central asumir¨ªa el 30% de la inversi¨®n. El gasto al que se comprometi¨® el Estado con la LOE era de 4.279 millones, lo que supon¨ªa el 60,8%.

Pero en el caso de la inversi¨®n prevista en la LOMCE hay una inc¨®gnita importante. Invertir los otros 927 millones de la reforma ser¨¢ una decisi¨®n que deber¨¢n tomar y financiar las comunidades aut¨®nomas, que ven como a?o a a?o sus presupuestos van menguando. El Ministerio de Educaci¨®n aspira a conseguir aportaciones a trav¨¦s de los fondos europeos para poder desarrollar la norma.

La inversi¨®n prevista en la reforma de Wert es tambi¨¦n muy inferior a la que se dibujaba en la memoria econ¨®mica de la Ley Org¨¢nica General del Sistema Educativo (LOGSE). Esa norma, aprobada durante el Gobierno del PSOE, acarreaba un gasto de 1,3 billones de pesetas (7.916 millones de euros) para el periodo comprendido entre 1990 y 1997. El Estado se comprometi¨® a aportar el 41%, es decir, 3.298 millones de euros. Pero, seg¨²n detalla Miguel Recio, las previsiones de la LOGSE nunca llegaron a cumplirse.

Por un lado, la crisis de 1992 se comi¨® todas las promesas, tambi¨¦n las referidas a las mejoras en el sistema de ense?anza. Tambi¨¦n influy¨®, explica Recio, la llegada a La Moncloa del PP de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que se vio obligado a aplicar a rega?adientes una ley heredada de los socialistas con la que no estaban de acuerdo.

Los populares aprobaron su reforma de la ense?anza en 2002: la llamada Ley Org¨¢nica de Calidad de la Educaci¨®n (LOCE), una norma que no lleg¨® a desarrollarse al ser paralizada por el PSOE tras ganar las elecciones generales de 2004. La LOCE sali¨® adelante sin una memoria econ¨®mica y sin que se precisaran las inversiones.