El Gobierno exigir¨¢ los bienes p¨²blicos que la Iglesia ha puesto a su nombre

El Gobierno reclamar¨¢ los bienes de dominio p¨²blico que la Iglesia cat¨®lica espa?ola haya puesto a su nombre en las ¨²ltimas d¨¦cadas. A ello se compromete en una respuesta dada en el Congreso de los Diputados al diputado socialista Antonio Hurtado, que se interesaba por el destino de tantos templos, plazas p¨²blicas, fuentes que los obispos han inscrito en los registros de la propiedad al amparo de una ley franquista de 1946 que los equiparaba con funcionarios p¨²blicos, es decir, no ten¨ªan que demostrar la propiedad para inscribir a su nombre. ?Qu¨¦ va a pasar ahora con todo ello? En su respuesta a Hurtado, adelantada por la cadena SER, el Gobierno recalca la "inalienabilidad, imprescriptibilidad e inembargabilidad de los bienes de dominio p¨²blico". "De este modo", prosigue la nota, "queda prohibida la apropiaci¨®n de los bienes de dominio p¨²blico por parte de las personas jur¨ªdicas privadas, entre las que se encuentra la Iglesia cat¨®lica".

Reconocidas estas consideraciones legales, el Gobierno proceder¨¢ a hacerse con todo aquello considerado de dominio p¨²blico que la Iglesia se haya apropiado indebidamente una vez disponga del listado completo de las inmatriculaciones. "Si a pesar del control por parte del registrador [de la propiedad] hubieran accedido al registro como bienes de propiedad privada bienes que efectivamente son de dominio p¨²blico deber¨¢ procederse a la depuraci¨®n f¨ªsica y jur¨ªdica conforme al derecho sustantivo material".

El diputado Antonio Hurtado espera que "todo se solucione en los registros, que la Iglesia no plantee batalla jur¨ªdica y aquellas inscripciones ilegales pasen a ser de nuevo de dominio p¨²blico". Y recuerda que una inmatriculaci¨®n s¨ª indica tener propiedad sobre el bien. La Iglesia suele negar este extremo. Defienden que es posesi¨®n, no propiedad.

Justicia ultima estos d¨ªas el listado de los bienes inscritos por la Iglesia para ser entregado al Congreso, donde se espera que afloren, para conocimiento de todos, miles de propiedades inmatriculadas. Eso abre la v¨ªa a la reclamaci¨®n de los bienes p¨²blicos, pero tambi¨¦n a que ciudadanos e instituciones privadas puedan pleitear por lo que consideran que es suyo y no de la Iglesia. En algunos casos, la jerarqu¨ªa cat¨®lica ha inmatriculado bienes que ya estaban registrados, lo que parece indicar un escaso control por parte de algunos registradores. "No ha habido el mismo celo por parte de algunos registros y de otros, ni tampoco la misma voracidad por parte de unos obispados que de otros, y eso se ver¨¢ con claridad cuando se tenga el listado completo", dice Hurtado. En Zaragoza, por ejemplo, la iglesia de San Juan de los Panetes se puso a nombre de la Iglesia cuando estaba registrada como bien p¨²blico desde 1933.Y parecido ha ocurrido en Palencia con otra iglesia enclavada en una finca privada, por la que el Gobierno espa?ol recibi¨® el varapalo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.?

La respuesta al Congreso explica tambi¨¦n que a la hora de reclamar edificios, templos, plazas, fuentes, etc¨¦tera, ser¨¢ la Direcci¨®n General de Patrimonio la que tendr¨¢ que establecer cu¨¢les de esos bienes son reclamables por parte de la Administraci¨®n.

La Iglesia ha reconocido "errores" en algunas de las 30.000 o 40.000 inscripciones que calcula que ha registrado. ¡°Errores habr¨¢ habido¡±, ha reconocido recientemente a EL PA?S el vicesecretario para Asuntos Econ¨®micos de la Conferencia Episcopal, Fernando Gim¨¦nez Barriocanal,? ¡°y tambi¨¦n diferencias de interpretaci¨®n¡±, pero ¡°si algo se ha hecho incorrecto, hay mecanismos para solventarlo¡±.

Esa es ahora la clave. ?Bastar¨¢ con que el Gobierno vaya al registro a reclamar como bien de todos los ciudadanos aquellos que la ley considera de dominio p¨²blico o tendr¨¢n que utilizar, la Administraci¨®n y los ciudadanos otros "mecanismos para solventarlo"?

La Iglesia, por boca del portavoz de la Conferencia Episcopal, Jos¨¦ Mar¨ªa Gil, ha dicho esta ma?ana que se defender¨¢n. "Defenderemos nuestros derechos porque la buena administraci¨®n de los bienes eclesi¨¢sticos supone utilizarlos para los fines para los que se crearon y procurar mantenerlos". "Estamos muy tranquilos, la Iglesia no ha hecho otra cosa que cumplir la legalidad vigente y lo que ha hecho, y posibilitado por la legislaci¨®n es inscribir los bienes que de manera secular ha pose¨ªdo".? "Tenemos una confianza infinita en la justicia espa?ola".

"Nuestro ordenamiento ofrece oportunidades de defensa y tambi¨¦n el marco europeo", ha dicho en referencia a la respuesta del Gobierno de que reclamar¨¢ los bienes de dominio p¨²blico. ?Qu¨¦ es dominio p¨²blico? Aclar¨¦moslo. Hay un derecho de propiedad de quien puede ser sujeto una persona individual o sociedades, en este caso la Iglesia". "As¨ª que, inmensa tranquilidad y confianza en nuestro Estado de derecho", ha a?adido.?

El portavoz de los obispos ha se?alado que "los bienes de la Iglesia aportan a la econom¨ªa espa?ola m¨¢s de 22.000 millones de uros al a?o, un 2% del PIB y son de enorme inter¨¦s social. Una de las consecuencias de desamortizar ser¨ªa el detrimento de la acci¨®n social", ha dicho esta ma?ana.