El sindicato de prostitutas: ¡°Estamos constituidas y trabajando¡±
El Gobierno busca f¨®rmulas para frenar la actividad de la asociaci¨®n Otras
Sindicato busca afiliados y afiliadas. La Organizaci¨®n de Trabajadoras Sexuales Otras ha hecho este viernes en Madrid su presentaci¨®n en sociedad. ¡°Estamos constituidas y estamos trabajando¡±, ha dicho Conxa Borrell, secretaria general del primer sindicato estatal de prostitutas, que tambi¨¦n acoge a actores porno, telefonistas de l¨ªneas er¨®ticas y masajistas t¨¢ntricas, entre otros. Es un colectivo que trae de cabeza al Gobierno y que le cost¨® el puesto a la directora general de Trabajo Concepci¨®n Pascual por permitir la publicaci¨®n de su registro en el Bolet¨ªn Oficial del Estado (BOE), algo que ahora no es f¨¢cil revertir.?
Tras un par de semanas de silencio por el revuelo que? produjo esta inscripci¨®n, sus integrantes han alzado la voz frente a un Gobierno que se ha proclamado abiertamente abolicionista (la prostituci¨®n se considera un atentado contra la dignidad de la mujer) y que quiere poner en marcha una Ley contra la Trata y la Explotaci¨®n Sexual, para la que no hay fecha prevista. En Espa?a, el ejercicio de la prostituci¨®n es alegal, pero la Ley de Seguridad Ciudadana, la llamada ley mordaza, y distintas ordenanzas municipales suponen la persecuci¨®n tanto de los clientes como de las prostitutas.
¡°No somos unas mu?ecas de trapo que se pueden usar y tirar a su antojo¡±, se?ala Borrell, que ha ofrecido una rueda de prensa en Madrid este viernes junto con otros representantes. Una portavoz del Ministerio de Trabajo confirma que el ¡°error¡± de haber permitido el registro de los estatutos y su publicaci¨®n en el BOE permite que Otras figure como central sindical, el reconocimiento de su actividad laboral y el amparo del Estatuto de los Trabajadores.
El asunto est¨¢ en manos de los abogados del Estado que buscan la f¨®rmula ¡°m¨¢s eficaz¡± para deshacer el camino que llev¨® a la ministra de trabajo a pronunciar aquella famosa frase: "Me han colado un gol por la escuadra". Desde el todav¨ªa sindicato Otras defienden que ejercen la prostituci¨®n por propia voluntad y que son mayor¨ªa. Este asunto es, sin embargo, bien pol¨¦mico. No existen datos oficiales, pero la Polic¨ªa Nacional calcula que el 80% de quienes ejercen la prostituci¨®n son v¨ªctimas de la trata.?Seg¨²n informes del Parlamento Europeo, los c¨¢lculos m¨¢s conservadores hablan de "una de cada siete" personas, pero hay fuentes que lo cifran entre el 70% y el 90% de prostitutas forzadas por grupos criminales.
"Somos un sindicato no peque?o, enano, pero grande en colaboraciones", ha explicado Borrell. Asegura que a¨²n no hay afiliados, pero que la lista de espera es "considerable". Desde Otras, critican que el "moralismo imperante de una supuesta izquierda" les "deniega" derechos. Arremeten contra el PSOE y contra parte del movimiento de mujeres, que ha denunciado la creaci¨®n del sindicato, cuyas representantes tendr¨¢n que comparecer el 14 de noviembre en la Audiencia Nacional. "No entendemos el rancio feminismo abolicionista", a?ade Borrell.
Suecia es el gran modelo abolicionista de Europa desde hace m¨¢s de 20 a?os. Los pa¨ªses qeu siguen este modelo ven la prostituci¨®n incompatible con la igualdad de g¨¦nero y los derechos humanos y centran su persecuci¨®n en el cliente. Seg¨²n las autoridades suecas, la intervenci¨®n en estos a?os ha reducido a la mitad la prostituci¨®n callejera, aunque sigue existiendo, y ha ocasionado que parte de la actividad se traslade a pisos o el negocio se cierre por Internet, donde las partidarias de regular la prostituci¨®n denuncian que est¨¢n m¨¢s desprotegidas.
¡°El modelo abolicionista de Suecia, copiado en Francia, solo ha arrojado situaciones de violencia y precarizaci¨®n para nosotras¡±, se?alaba este viernes Juan, colombiano afincado en Par¨ªs que tambi¨¦n ha participado en la rueda de prensa celebrada en la sede de Cogam (Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid). Asegura que Francia ya tiene en marcha un sindicato similar al que acaba de inscribirse en Espa?a que cuenta con unos 200 afiliados.?
El modelo opuesto, el regulacionista, impera en pa¨ªses como Alemania o Dinamarca. Contemplan la venta de sexo como una actividad econ¨®mica m¨¢s, como reclaman los integrantes de Otras. Pero el modelo, seg¨²n el relator especial de Naciones Unidas sobre Trata de Seres Humanos y el Parlamento Europeo, no ha funcionado: hay mayores entradas de tr¨¢fico en el mercado sexual. En Alemania, como hay m¨¢s oferta, se han reducido las tarifas que cobran las prostitutas algo m¨¢s del 20% y solo entre un 1% y un 5% de mujeres se ha inscrito en el registro obligatorio.
¡°Es verdad que Alemania es el infierno en la tierra, cuando se legisla mal es lo que pasa¡±, admite Sabrina S¨¢nchez, secretaria de organizaci¨®n de Otras. ¡°Ese modelo no ha tenido en cuenta a las trabajadoras del sexo. Pero encontrar proxenetas a sus anchas y sueldos bajos ya pasa en Espa?a, por eso intentamos organizarnos¡±, a?ade. "Quiero derechos laborales por estar ejerciendo mi trabajo,? me guste o no".
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