Espa?a es el pa¨ªs europeo con m¨¢s infecciones bacterianas en los centros sociosanitarios

Espa?a ocupa posiciones de cabeza en Europa en varios de los indicadores clave que miden el uso inadecuado de los antibi¨®ticos y el impacto de las infecciones entre la poblaci¨®n. Es el pa¨ªs donde m¨¢s residentes en centros sociosanitarios contrae una bacteria. Despu¨¦s de Chipre, es el segundo estado con mayor consumo de antibi¨®ticos. Y sus profesionales sanitarios son de los que m¨¢s tienden a usar estos f¨¢rmacos en sus presentaciones de amplio espectro (¨²tiles contra varios grupos de bacterias), cuando lo recomendado es afinar todo lo posible en los tratamientos.

Estos son algunos de los datos incluidos en tres estudios presentados ayer en Bruselas por el Centro Europeo para el Control y la Prevenci¨®n de Enfermedades (ECDC) con motivo del D¨ªa para el Uso Prudente de los Antibi¨®ticos. La jornada llega en un momento clave para las autoridades europeas, que consideran que ha llegado la hora de situar las resistencias a los antimicrobianos (AMR, en sus siglas en ingles) en los primeros puestos de la agenda.

"Crece el n¨²mero de europeos que enferma y muere por unas infecciones que en parte son evitables", alert¨® el comisario europeo de Salud, el lituano Vytenis Andriukaitis. "No podemos retrasarnos m¨¢s. Es necesario que todos los que tienen un papel en el tratamiento y la prevenci¨®n de estas infecciones redoblen los esfuerzos", dijo en un mensaje dirigido tambi¨¦n a los gobiernos.

La publicaci¨®n de estas investigaciones (que incluyen una treintena de pa¨ªses de la UE y otros vecinos como Serbia y Noruega) llega solo 10 d¨ªas despu¨¦s de que el ECDC divulgara otro trabajo que estima en 33.000 las muertes anuales causadas en el continente por las bacterias multirresistentes. Todos los estudios revelan grandes diferencias entre estados, lo que ilustra la necesidad de "aunar esfuerzos ante un problema global que requiere soluciones coordinadas a todos los niveles", seg¨²n Francesca Colombo, jefa del ¨¢rea de Salud de la OCDC.

Uno de los estudios ponen el foco en el uso de los antibi¨®ticos en los hospitales de agudos, donde un tercio de los pacientes toma antibi¨®ticos. De ellos, el 10% no son para tratar infecciones, sino para prevenirlas, como los administrados antes de una intervenci¨®n quir¨²rgica. El estudio revela que casi la mitad de estos tratamientos se prolonga durante varios d¨ªas en Europa, cuando "una sola dosis un d¨ªa es suficiente para la profil¨¢xis quir¨²rgica". "Alargar estos tratamientos es una pr¨¢ctica innecesaria que requiere ser reconducida", sostienen los autores.

Aunque a¨²n hay un amplio margen de mejora, Espa?a sale bien parada en este ¨ªndice, 10 puntos por debajo de la media europea. En cambio, presenta peores datos que la media en el n¨²mero de pacientes de los hospitales infectados durante su estancia, un 7,8%, solo por detr¨¢s de Chipre, Portugal, Italia, Finlandia y Grecia. El estudio ha sido hecho con una muestra de 310.000 pacientes de 1.275 hospitales, 95 de ellos en Espa?a.

El ECDC tambi¨¦n alerta contra la pr¨¢ctica de administrar antibi¨®ticos de forma preventiva a los residentes en centros sociosanitarios, en su mayor¨ªa personas mayores a las que se quiere evitar una infecci¨®n de orina. El 30% de los antibi¨®ticos prescritos en estos centros es por este motivo, lo que salvo en casos puntuales "no est¨¢ avalado por la evidencia y favorece el desarrollo de las resistencias", concluye el informe.

Aunque los residentes en estos equipamientos en Espa?a toman m¨¢s antibi¨®ticos que la media europea (el 10,5% frente al 4,9% en un d¨ªa cualquiera), el ECDC no ha detectado un peor uso de estos f¨¢rmacos en nuestro pa¨ªs por este motivo. Esto parece explicarse un hecho llamativo: Espa?a es de largo el pa¨ªs donde m¨¢s pacientes de sociosanitarios adquieren una infecci¨®n: un 8,5%. El segundo pa¨ªs es Grecia (un 6,3%) y la media europea se reduice a 3,6%.Este estudio est¨¢ hecho con una muestra de 102.000 residentes de 1.788 centros de toda Europa, 46 de ellos en Espa?a.

Espa?a tambi¨¦n se sit¨²a en las posiciones de cabeza en el estudio que analiza los antibi¨®ticos consumidos por la poblaci¨®n general. En un d¨ªa cualquiera, los espa?oles toman 32 DDD (dosis definidas diarias, el indicador m¨¢s utilizado para medir el consumo), muy por encima de la media europea (21,8) y solo por detr¨¢s de Chipre (33,6). Holanda (10,1), Estonia (11,5) y Suecia (10,6) son los pa¨ªses con menor consumo.

Los expertos consultados coinciden en mostrar su notable "preocupaci¨®n" por los datos del ECDC, aunque coinciden en destacar las mejoras obtenidas en algunas variables y las ponen como ejemplo a seguir. "Estos avances nos deben permitir encarar el problema, con toda su gravedad, pero con optimismo", afirma Joaqu¨ªn L¨®pez-Contreras, director del Programa de Infecciones Nosocomiales y Antibi¨®ticos del Hospital Sant Pau de Barcelona. "Ocho pa¨ªses han logrado reducir el consumo de antibi¨®ticos y los que han aplicado pol¨ªticas coordinadas han logrado bajar la incidencia de bacterias multirresistentes como el Staphyloccus aureus. Esto nos ense?a que, con las decisiones adecuadas, hay un camino a seguir", afirma L¨®pez-Contreras.

Para Bruno Gonz¨¢lez Zorn, catedr¨¢tico de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense, "es bueno que el ECDC tambi¨¦n haga especial hincapi¨¦ en centros sociosanitarios, lo que era muy necesario". Estos centros, seg¨²n L¨®pez-Contreras, deber¨ªan "implementar las mismas medidas de control que los hospitales de agudos", algo que no ve por ahora "viable en las residencias de mayores" Jos¨¦ Antonio L¨®pez Trillo, presidente de la Sociedad Espa?ola de Geriatr¨ªa y Gerontolog¨ªa. "No pueden disponer de los laboratorios y medios de un hospital. Lo deseable ser¨ªa la creaci¨®n de canales r¨¢pidos para que las muestras tomadas en ellos fueran llevadas y analizadas en los hospitales de agudos con la misma prioridad que dan a sus pacientes", sostiene.

Sobre las medidas a adoptar, es un¨¢nime el mensaje de "m¨¢s medios y m¨¢s coordinaci¨®n". "El antibi¨®tico, a diferencia del resto de medicamentos, tiene un efecto que va m¨¢s all¨¢ del paciente concreto. Esto requiere la implicaci¨®n de todos los prescriptores, de los m¨¦dicos a los veterinarios en el caso del ganado, y tambi¨¦n de la poblaci¨®n. Hay que avanzar m¨¢s en las l¨ªneas ya marcadas por el Plan nacional de Lucha contra la Resistencia a los Antibi¨®ticos, que ya ha dado algunos frutos", considera Gonz¨¢lez Zorn.

Jordi Vila, l¨ªder de la Iniciativa de Resistencia a los Antibi¨®ticos del instituto barcelon¨¦s ISGlobal llama a la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) a liderar la lucha contra el problema. "Las medidas deber¨ªan adoptarse a nivel global y la OMS deber¨ªa coordinar esa estrategia", defiende. "En Espa?a podemos hacer todo lo que est¨¦ a nuestro alcance, pero si en otro pa¨ªs como India el problema no se controla, no tendremos ¨¦xito. Cualquier viajero podr¨¢ adquirir una bacteria multirresistente all¨ª e incorporarla al ecosistema bacteriano espa?ol a su retorno", concluye.