La Iglesia de Salamanca pide perd¨®n por los abusos: ¡°Reconocemos que es un esc¨¢ndalo¡±
¡°Es doloroso ver c¨®mo se intenta defender lo indefendible¡±, replican las v¨ªctimas ante la ausencia de autocr¨ªtica ni explicaciones sobre los casos denunciados
El consejo presbiteral de Salamanca, que representa a los sacerdotes y religiosos de la di¨®cesis, ha divulgado un comunicado en el que pide perd¨®n por los casos de abusos sexuales en esta provincia revelados por EL PA?S en las ¨²ltimas dos semanas. ¡°La?men?ta?mos pro?fun?da?men?te los abu?sos se?xua?les a me?no?res que al?gu?nos her?ma?nos sa?cer?do?tes ha?yan co?me?ti?do a lo lar?go de es?tos a?os. Pe?di?mos per?d¨®n por ello es?pe?cial?men?te a las v¨ªc?ti?mas que han su?fri?do en pri?me?ra per?so?na los abu?sos y han vis?to rota su vida. Tam?bi¨¦n a sus fa?mi?lias y a la so?cie?dad en?tera. Re?co?no?ce?mos que es un es?c¨¢n?da?lo y asu?mi?mos como pro?pio el do?lor cau?sa?do y sin?ce?ra?men?te pe?di?mos per?d¨®n¡±, mantiene el documento.
No obstante, en el comunicado no hay ninguna autocr¨ªtica sobre la gesti¨®n de los casos denunciados y las acusaciones ignoradas durante d¨¦cadas. El obispado de Salamanca sigue dar explicaciones ni responder a las preguntas de este peri¨®dico para aclarar lo que supo realmente de cada caso ni detallar cu¨¢ntas denuncias ha recibido en los ¨²ltimos a?os. Dos v¨ªctimas de Salamanca consultadas por este diario han reaccionado con disgusto. "Siguen con un discurso de silencio y de no ponerse a disposici¨®n de la justicia, es una verg¨¹enza que act¨²en tarde, mal y con tanto cinismo", acusa Javier Paz, que denunci¨® al cura Isidro L¨®pez ante el obispado en 2011 e hizo p¨²blico el caso en 2014. ¡°Es doloroso ver c¨®mo se intenta defender lo indefendible¡±, reflexiona otra v¨ªctima de este sacerdote, que prefiere mantenerse en el anonimato.
EL PA?S ha revelado que en el caso del cura Isidro L¨®pez, condenado can¨®nicamente en 2014, hubo dos v¨ªctimas m¨¢s, adem¨¢s de la conocida p¨²blicamente, aunque la di¨®cesis lo ocult¨® e hizo que pareciera un caso aislado. Tambi¨¦n ha publicado grabaciones de conversaciones del obispo, Carlos L¨®pez, con Javier Paz en las que achacaba a las v¨ªctimas la culpa de la impunidad de los acusados, por tardar tantos a?os en denunciar. Tambi¨¦n le desanimaba de acudir a la justicia civil en 2013 porque el caso de abusos ¡°est¨¢ superprescrito¡±. La di¨®cesis ten¨ªa ya ten¨ªa conocimiento en ese momento de denuncias contra el sacerdote acusado incluso en torno a 2000, y estos delitos prescriben hasta 15 a?os despu¨¦s de la mayor¨ªa de edad. Del mismo modo, le invit¨® a hacer una petici¨®n por escrito de indemnizaci¨®n, con una cl¨¢usula de silencio, para luego acusarle de buscar solamente el dinero, seg¨²n el relato de Javier Paz.
La sentencia del Vaticano de este caso, tambi¨¦n ocultada y desvelada por este peri¨®dico, destap¨® que la di¨®cesis hab¨ªa ignorado denuncias contra este cura durante d¨¦cadas por no juzgarlas ¡°veros¨ªmiles¡±. Y que incluso cuando en 2011 el obispo recibi¨® la denuncia de Javier Paz no inform¨® al acusado ¡°considerando su buena fama¡±. Este cura fue apartado finalmente en 2012, aunque recibi¨® un homenaje, y aun as¨ª continu¨® ayudando en una parroquia mientras dur¨® el proceso can¨®nico.
Tres obispos han pasado por la ciudad en el periodo de denuncias deso¨ªdas: Mauro Rubio, ya fallecido; Braulio Rodr¨ªguez, ahora arzobispo de Toledo, y el actual, Carlos L¨®pez. Ni uno ni otro han querido aclarar su gesti¨®n de este caso. En el mismo periodo, de 1981 a 2004, el sacerdote Francisco Carreras ha sido acusado de abusos por al menos tres v¨ªctimas localizadas por este peri¨®dico. Fue expulsado de Estados Unidos en 1981 tras una denuncia por esta cuesti¨®n y la archidi¨®cesis de Miami inform¨® al obispado de Salamanca, di¨®cesis a la que fue enviado. No obstante, fue colocado de p¨¢rroco en Sequeros en 1981 y, en 1983, en Calzada de Valdunciel. Est¨¢ acusado de abusos de ni?os en ambas localidades. Luego pas¨® por una decena de municipios hasta acabar de capell¨¢n de un convento en la ciudad en 2004 y, en 2011, en el santuario de Valdejimena, donde a¨²n reside.
Una semana despu¨¦s de esta informaci¨®n, el obispado sigue sin decir una palabra de este caso, ni asumir ninguna responsabilidad, ni comunicar si ha tomado alguna medida. ¡°El obispado lo sab¨ªa. Lo podr¨ªa haber evitado, pero nos dej¨® en sus manos. Fuimos entregados en bandeja a un pervertido. No puede haber perd¨®n para eso¡±, ha acusado una de las v¨ªctimas. La di¨®cesis tampoco se ha manifestado sobre un tercer caso denunciado, el del religioso trinitario Domingo Ciordia, acusado de abusos por Teresa Conde en los ochenta.
La nota de la di¨®cesis expresa su apoyo al obispo porque ¡°ha ini?cia?do al?guno de es?tos pro?ce?sos cuan?do ha ha?bi?do de?nun?cias pre?sen?ta?das y ha ac?tua?do con ab?so?lu?ta co?rrec?ci¨®n, con?for?me a de?re?cho, con ho?nes?ti?dad e in?te?gri?dad, con pa?ter?nal aco?gi?da a las v¨ªc?ti?mas y con la ac?ti?tud de dis?cre?ci¨®n y res?pe?to que es?tas cues?tio?nes exi?gen¡±. ¡°Como pres?bi?te?rio, res?pal?da?mos su ac?tua?ci¨®n y ex?pre?sa?mos nues?tra co?mu?ni¨®n con ¨¦l¡±, resume.
Buscar la verdad
En contraste con el total hermetismo de la di¨®cesis a la hora de aclarar con transparencia los casos denunciados, la nota pide a las v¨ªctimas ¡°que de?nun?cien abier?ta y cla?ra?men?te los he?chos, que apor?ten las prue?bas co?rres?pon?dien?tes ante el juz?ga?do, ci?vil o ecle?si¨¢s?ti?co, y que no ca?llen ni guar?den si?len?cio¡±. La di¨®cesis admite que ¡°las pu?bli?ca?cio?nes de ca?sos de abu?sos se?xua?les a me?no?res por par?te de sa?cer?do?tes han ge?ne?ra?do in?quie?tud y des?con?cier?to en la co?mu?ni?dad dio?ce?sa?na¡±, pero invita a hacer ¡°una lec?tu?ra lo m¨¢s ob?je?ti?va po?si?ble de los he?chos, bus?can?do la ver?dad¡±.
Por todo ello algunas de esas v¨ªctimas a las que se dirige el escrito lo han recibido con malestar y escepticismo. Recuerdan que ni siquiera recibieron copia de la sentencia can¨®nica ni del expediente, que a¨²n reclaman. Javier Paz cree que ¡°la imagen corporativista que da la Iglesia de Salamanca, apoyando al obispo, con un comunicado tard¨ªo, diciendo todo lo contrario a lo que ha hecho, genera una desconfianza m¨¢s grande todav¨ªa hacia la di¨®cesis". "Todos eran conocedores del caso de Isidro L¨®pez y de Francisco Carreras. Esta actitud refleja el miedo ante una situaci¨®n que se les escapa de las manos e intentan dar palos de ciego para subsanar los errores que nunca han querido afrontar. La sensaci¨®n de las v¨ªctimas supervivientes es de dolor, de insolente ataque a nuestra dignidad por la falta de respeto que supone que ofrezcan una ayuda que han negado y que proponen unos procesos can¨®nicos en los que ellos son juez y parte y que pueden manipular totalmente¡±.
La otra v¨ªctima del mismo sacerdote espera que "muchas de las personas que sufrieron abusos sexuales muestren su testimonio, para que el obispo Carlos sea plenamente consciente de lo que durante a?os silenci¨® la di¨®cesis de Salamanca y, por consiguiente, el obispo". Es muy cr¨ªtico con la gesti¨®n del responsable de la di¨®cesis. "No creo que la actuaci¨®n del obispo haya sido ni sea correcta. Me gustar¨ªa que diera la cara ante la di¨®cesis y responda de sus actuaciones, ya que el silencio, ante un delito de pederastia, no es una actuaci¨®n correcta. En cuanto a la misericordia y compasi¨®n a que invitan, entiendo que es hacia las v¨ªctimas, porque hacia un pederasta no es posible aplicar ni misericordia ni compasi¨®n, como no lo tuvieron en sus actos ante nosotros".
Si conoce alg¨²n caso de abusos sexuales que no haya visto la luz, escr¨ªbanos con su denuncia a abusos@elpais.es
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