Estrasburgo estudiar¨¢ los derechos de la ¡°madre de intenci¨®n¡± en la gestaci¨®n de alquiler

Aunque hace cuatro a?os que Estrasburgo conden¨® a Francia por no reconocer la paternidad de parejas con ni?os nacidos de un vientre de alquiler en pa¨ªses donde s¨ª es legal, como Estados Unidos, Sylvie y Dominique Mennesson siguen esperando a que su pa¨ªs inscriba a sus hijas, que acaban de cumplir 18 a?os ¡ªlos mismos que llevan batallando su caso sus padres¡ª en su libro de familia. El principal problema reside en que en la partida de nacimiento estadounidense los Mennesson figuran como ¨²nicos padres de las ni?as, Dominique como ¡°padre gen¨¦tico¡± y Sylvie como ¡°madre legal¡±. Pero la noci¨®n de ¡°madre legal¡± no existe como tal en el derecho franc¨¦s, que solo reconoce como madre biol¨®gica a la mujer que da a luz al beb¨¦.

En 2014, Estrasburgo estim¨® que la negativa de las autoridades francesas a registrar a las hijas de los Mennesson, Fiorella y Valentina, infring¨ªa el derecho a la vida privada de las menores, garantizadas por el art¨ªculo 8 del Convenio Europeo, ya que las dejaba ¡°en una situaci¨®n de incertidumbre jur¨ªdica¡± que ¡°atenta contra su identidad en el seno de la sociedad francesa¡±. Adem¨¢s, los jueces ¡ªque no entraron en ning¨²n momento a analizar la cuesti¨®n de la legalidad o no de prohibir la gestaci¨®n subrogada¡ª consideraron que las j¨®venes, pese a que su padre biol¨®gico es franc¨¦s, no ten¨ªan la certeza de poder obtener la nacionalidad francesa. Algo que, nuevamente, pod¨ªa afectar a la ¡°definici¨®n de su propia identidad¡±.

Un vuelco en la legislaci¨®n francesa

Un a?o despu¨¦s de la condena del TEDH, la Corte de Casaci¨®n francesa dio un vuelco a su jurisdicci¨®n, que hasta entonces rechazaba autom¨¢ticamente la inscripci¨®n en el registro franc¨¦s de ni?os nacidos por gestaci¨®n subrogada, al fallar, en el caso de dos ni?os nacidos en Rusia de un vientre de alquiler, que ¡°una gestaci¨®n subrogada no justifica, por s¨ª sola, el rechazo a registrar en el estado civil franc¨¦s el acta de nacimiento extranjera de un ni?o que tenga un padre franc¨¦s¡±. Pero solo el padre biol¨®gico es reconocido, en principio, en el derecho franc¨¦s. Y solo la mujer que da a luz es reconocida como madre biol¨®gica, incluso aunque los ¨®vulos en estos casos sean de la madre que alquila el vientre, la madre de intenci¨®n. Dos a?os m¨¢s tarde, el 5 de julio de 2017, la Corte de Casaci¨®n estipul¨® que ¡°en caso de una gestaci¨®n subrogada realizada en el extranjero, el acta de nacimiento puede ser transcrita en los registros civiles franceses designando al padre, pero no a la madre de intenci¨®n, que no ha parido¡± al ni?o. Ello no impide, agreg¨® el alto tribunal, ¡°la adopci¨®n del ni?o por la esposa (u esposo, en caso de parejas homosexuales), de su padre¡±.

Desde el fallo del TEDH sobre los Mennesson, las hijas de estos han podido obtener, entre otros, el pasaporte franc¨¦s. Pero sus padres argumentan que el hecho de que no se les reconozca a ambos como los padres legales de las hoy adolescentes puede traerles problemas en cuestiones como herencias o derechos de sucesi¨®n. En entrevista con el diario Le Parisien en septiembre, las j¨®venes Mennesson calificaron de "cruel y humillante¡± el hecho de que se plantee que no pueden ser reconocidas plenamente como hijas de sus padres.

La Corte de Casaci¨®n deb¨ªa pronunciarse de forma definitiva el pasado octubre, pero decidi¨®, andes de dar su opini¨®n final, consultar a Estrasburgo.

Lo que los jueces franceses quieren saber, b¨¢sicamente, es si el tribunal europeo considera que est¨¢n ¡°excedi¨¦ndose¡± en el margen que se les reconoce para aplicar leyes y derechos fundamentales si se niegan, como hasta ahora, a inscribir en el registro civil franc¨¦s el certificado de nacimiento original de un ni?o nacido en el extranjero de un vientre de alquiler en el que la madre de intenci¨®n figura como ¡°madre legal¡±, tal como es el caso de Sylvie Menneson. Sobre todo si, como en este mismo caso tambi¨¦n, se acepta la inscripci¨®n? cuando ¡°designa al padre de intenci¨®n, que es tambi¨¦n el padre biol¨®gico¡±. A ello agregan una segunda pregunta: ¡°?Se deber¨ªa hacer distinci¨®n si el beb¨¦ fue concebido usando o no los ¨®vulos de la madre de intenci¨®n?¡±.

En caso de respuesta afirmativa a una de las dos cuestiones anteriores, contin¨²a la Corte de Casaci¨®n, ¡°la posibilidad de que la ¡°madre de intenci¨®n¡± adoptara al hijo de su pareja, el padre biol¨®gico, como una manera de establecer la relaci¨®n legal entre madre e hijo, ?estar¨ªa cumpliendo esto los requisitos del art¨ªculo 8 del Convenio?¡±

Una consulta in¨¦dita

Un colegio de cinco jueces de la Gran Sala se reuni¨® el lunes para analizar el caso y decidi¨® aceptarlo, seg¨²n inform¨® este martes el TEDH. Es la primera petici¨®n de este tipo que recibe el tribunal desde la entrada en vigor, el 1 de agosto pasado, del Protocolo 16 del Convenio Europeo de Derechos Humanos. Dicho protocolo permite que un ¨®rgano jurisdiccional de un pa¨ªs miembro del Consejo de Europa pueda solicitar al TEDH ¡°opiniones consultivas sobre cuestiones de principio relativas a la interpretacio?n o a la aplicacio?n de los derechos y libertades de nidos en el Convenio o sus protocolos¡±. Las partes tienen hasta enero para presentar sus argumentos.