¡°Hay pa¨ªses donde el ¡®MeToo¡¯ se ha quedado en el nivel de las famosas¡±
La responsable de la organizaci¨®n internacional de mujeres alerta de que en algunas partes del mundo te detienen si denuncias acoso sexual
La sueca ?sa Charlotte Regn¨¦r (Malmberget, 1964) sali¨® en marzo del primer Gobierno feminista de la historia, el de Suecia, para ejercer como directora ejecutiva adjunta de ONU Mujeres. Como ministra vivi¨® el MeToo sueco que estall¨® en la academia del Nobel, que suspendi¨® la entrega del galard¨®n de Literatura. El dramaturgo franc¨¦s Jean-Claude Arnault fue condenado por violaci¨®n. Ahora su perspectiva desde Naciones Unidas es m¨¢s amplia: No solo se ocupa de los efectos del movimiento que denuncia el acoso sexual en la Europa acomodada sino en lugares donde las mujeres se jugan la vida o la c¨¢rcel. El puesto es tambi¨¦n un mirador mucho m¨¢s prudente. En espa?ol fluido y al tel¨¦fono, la alta mandataria internacional evita terrenos complicados, como la legislaci¨®n de la prostituci¨®n de la que su pa¨ªs es el gran modelo mundial abolicionista o el riesgo para las mujeres del avance de la ultraderecha. La conversaci¨®n tuvo lugar este 11 de diciembre.
Pregunta. ?Qu¨¦ representa la ¨²ltima campa?a de ONU Mujeres Esc¨²chame tambi¨¦n?
Respuesta. Es para prestar atenci¨®n a mujeres valientes que dan testimonio p¨²blicamente sin saber si van a ser castigadas o no. En varios pa¨ªses del mundo existen otras versiones del MeToo. Muchas no pueden hablar f¨¢cilmente por la dependencia con su empleador, o viven en ¨¢reas remotas con dificultad para moverse. Esta campa?a es para intentar llegar a quienes est¨¢n en ¨¢reas de conflicto o de opresi¨®n.?
P.?? ?El MeToo solo ha dado relevancia a algunas mujeres?
R. En algunos pa¨ªses se ha quedado solo en el nivel de las famosas que ya ten¨ªan una plataforma medi¨¢tica. En mi pa¨ªs, Suecia, fui ministra de Igualdad en los meses m¨¢s intensos del MeToo, que all¨ª toc¨® casi todas las ¨¢reas del mercado de trabajo: desde abogados a ch¨®feres de autobuses. Era un movimiento enorme y pod¨ªa haber castigos. Hay pa¨ªses donde te detienen si denuncias acoso sexual o donde pagan con su vida. Hablo de diferentes regiones de ?frica, Oriente Medio o Asia. Queremos que esas mujeres tambi¨¦n lleguen al p¨²blico.?
P. ?Considera que los casos que ni siquiera llegan a juicio por falta de pruebas o por sospechas de que se inventaron, como el de Morgan Freeman, desautorizan este movimiento?
R. No puedo comentar casos individuales. Pero es muy imoprtante que haya justicia institucional y correcta. El problema ha sido que muchas veces las mujeres no han sido escuchadas en estas instituciones. En el caso del Nobel en Suecia, hab¨ªa cartas con nombres y apellidos a las que nadie hab¨ªa pretado atenci¨®n. Los juicios p¨²blicos no son buenos, pero tambi¨¦n creo que el MeToo nos ha explicado por qu¨¦ debemos tener juceces, abogados e instituciones que respeten las vidas de las mujeres y den prioridad a este tipo de cr¨ªmenes.??
P. En Espa?a, el Gobierno maneja un borrador de una futura ley sobre la trata de seres humanos en la que incluye la prostituci¨®n. ?Considera usted que la prostituci¨®n es violencia de g¨¦nero?
R. Desde ONU Mujeres no tenemos una postura en relaci¨®n a ese asunto, no hay un mandato ni acuerdos internacionales. He sido ministra en Suecia y he defendido el sistema sueco [que persigue al cliente, nunca a la mujer que ejerce la prostituci¨®n], he hablado p¨²blicamente sobre eso. Pero en el rol que tengo ahora, le dir¨¦ que no hay mandato de las Naciones Unidas.?
P. ?Cu¨¢les son las claves para legislar contra la trata?
R. Es una pregunta complicada. Hay que prohibir la trata de personas por diferenttes fines, aunque no puedo decir cu¨¢les han sido los m¨¦todos m¨¢s exitosa en el mundo. La experiencia sueca muestra? que la combinaci¨®n de las leyes ha hecho m¨¢s dif¨ªcil establecer negocio con mujeres traficadas. Y si los pol¨ªticos quieren cambiar a un mundo m¨¢s igual en t¨¦rminos de g¨¦nero, es muy importante escuchar las organizaciones de mujeres, el movimiento feminista y trabajar juntos.
P. La situacion actual respecto a la violencia sobre las mujeres, ?es mejor o peor que hace una d¨¦cada?
R. Es dif¨ªcil de decir. En Am¨¦rica Central los homocidios est¨¢n bajando pero los feminicidios se est¨¢n incrementando, por ejemplo. Hay pa¨ªses enlos que vemos m¨¢s denuncias de violencia pero no sabemos si refleja un incremento de la violencia o de la concieciaci¨®n. La atenci¨®n que se da a este asunto ayuda a que las mujeres puedan denunciar m¨¢s y a que los gobiernos se esfuercen m¨¢s. La concienciaci¨®n ha subido gracias a campa?as como el MeToo junto con el hecho de que hay m¨¢s mujeres en los parlamentos. Es un desarrollo muy lento, pero cuando ellas participan m¨¢s en la pol¨ªtica se presta m¨¢s atenci¨®n a este tipo de cosas.?
P. ?Le preocupa el auge de partidos de ultraderecha que reniegan de las listas paritarias o defienden pol¨ªticas contra el feminismo? En Espa?a acaban de entrar en un parlamento regional.
R.?El fen¨®meno de la ultraderecha ha llegado a casi todos los pa¨ªses europeos, muchas veces con una agenda nacionalista y con un rol muy conservador para mujeres, con limitaciones al derecho de aborto o propuestas similares. Fomentar la representaci¨®n de las mujeres en polit¨ªca tiene efectos positivos. La historia nos muestra que si un pa¨ªs o una organizaci¨®n quiere llevar la igualdad de g¨¦nero debe tomar medidas concretas, nunca se soluciona autom¨¢ticamente. Se trata del poder, hay que visibilizar a las mujeres en las estructuras de poder y hacer algo para que haya cambios.
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