Reino Unido castigar¨¢ con hasta dos a?os de c¨¢rcel tomar fotos bajo las faldas de una mujer
Los culpables ver¨¢n adem¨¢s sus nombres incluidos en las listas p¨²blicas de delincuentes sexuales en los casos m¨¢s graves
Aquellos que fotograf¨ªen con sus m¨®viles la parte de abajo de la falda de una mujer, sin el consentimiento de la v¨ªctima, se enfrentan a partir de este martes en Reino Unido a penas de hasta dos a?os de c¨¢rcel. En los casos m¨¢s graves, los culpables ver¨¢n adem¨¢s sus nombres incluidos en las listas p¨²blicas de delincuentes sexuales.
La pr¨¢ctica conocida como upskirting, que normalmente se realiza en espacios p¨²blicos como supermercados, autobuses, vagones de metro o clubes nocturnos,? no estaba tipificada penalmente. La nueva Ley de Voyeurismo de 2019 cubre las lagunas que la Ley del Esc¨¢ndalo contra la Decencia P¨²blica o la Ley de Delitos contra la Libertad Sexual provocaban con su redactado. Hasta hoy, cualquier acto de voyeurismo solo pod¨ªa ser denunciado por un testigo, algo que rara vez existe en los casos de upskirting en los que el actor de la agresi¨®n aprovecha la cobertura que le da la multitud.
"Los responsables de actos tan degradantes se enfrentar¨¢n a partir de hoy a penas de prisi¨®n, y las denuncias de las v¨ªctimas ser¨¢n tomadas muy en serio", ha dicho la secretaria de Estado de Justicia, Lucy Frazer, despu¨¦s de que la C¨¢mara de los Comunes aprobara el nuevo texto. La iniciativa fue impulsada por el Gobierno de Theresa May el pasado mes de junio, pero la campa?a para lograr la creaci¨®n de este nuevo delito arranc¨® hace 18 meses.
Fue el prop¨®sito de Gina Martin, una mujer que sufri¨® este tipo de pr¨¢cticas durante un festival musical. Al comprobar que dos hombres hab¨ªan fotografiado con sus m¨®viles el interior de su falda, Martin acudi¨® a la polic¨ªa. Los agentes le respondieron que los hechos denunciados no constitu¨ªan delito. Tras una campa?a en la red social Facebook que recab¨® m¨¢s de 50.000 firmas, y el respaldo de numerosos pol¨ªticos y famosos, el asunto lleg¨® al Parlamento por iniciativa de diputados individuales. El empe?o de un ¨²nico parlamentario conservador, Sir Christopher Chope, paraliz¨® todo el procedimiento, entre gritos de "verg¨¹enza" por parte de otros parlamentarios. Una activista an¨®nima lleg¨® a colgar cuatro bragas frente a la puerta del despacho de Chope.
La primera ministra, Theresa May, mostr¨® su "decepci¨®n" por el fracaso de la iniciativa legal y se comprometi¨® a poner el respaldo de su Gobierno detr¨¢s de un nuevo intento. May defini¨® el upskirting como "una horrorosa invasi¨®n de la intimidad que degrada y angustia a las v¨ªctimas".
El nuevo delito entrar¨¢ en vigor en Inglaterra y Gales, porque en Escocia ya est¨¢ tipificado penalmente desde hace a?os. Seg¨²n un informe de la Asociaci¨®n de la Prensa de Reino Unido, elaborado a partir de datos obtenidos por el Acta de Libertad de Informaci¨®n, de los 78 casos de upskirting?denunciados en 2018, solo 11 acabaron en condenas.?
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