¡°Si no recibimos m¨¢s fondos, no podremos mantener la respuesta a la epidemia¡±
Tarik Jasarevic, portavoz de la OMS, alerta de que la violencia preexistente en Congo complica la respuesta m¨¦dica
Tarik Jasarevic, portavoz de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), asegura que este organismo ya hab¨ªa advertido del alto riesgo de contagio de la epidemia de ¨¦bola de la?Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo (RDC)?a los pa¨ªses vecinos, lo que ha permitido que Uganda est¨¦ preparada para hacer frente a la enfermedad. Pese a ello, alerta de que la respuesta de la comunidad internacional no llega a cubrir todas las necesidades para responder a las necesidades. La violencia preexistente en la zona complica la respuesta m¨¦dica y es, a su juicio, el principal factor que ha provocado que el brote siga fuera de control.
Pregunta. La epidemia de ¨¦bola ha llegado a Uganda, ?qu¨¦ escenarios se abren a partir de ahora?
Respuesta. Dada la naturaleza de este brote y el movimiento de personas en la zona, la OMS ven¨ªa advirtiendo desde agosto del alto riesgo en que se encontraban los pa¨ªses vecinos y est¨¢bamos trabajando con ellos para que estuvieran preparados. Uganda tiene una amplia experiencia en el manejo de esta enfermedad, ya lo ha hecho en cinco ocasiones, se ha preparado en los ¨²ltimos meses y el Ministerio de Sanidad ha respondido con rapidez. La preparaci¨®n y la reacci¨®n r¨¢pida son vitales para contener el brote. La vacunaci¨®n comenz¨® all¨ª el 7 de noviembre de 2018 y se llev¨® a cabo en 165 centros de salud, alcanzando a 4.699 trabajadores, incluidas las dos estructuras donde se atendi¨® al ni?o. Los trabajadores sanitarios est¨¢n preparados.
?P. Ahora que la epidemia ha saltado a otro pa¨ªs, ?tiene previsto la OMS replantearse una declaraci¨®n de emergencia global?
R. Se ha convocado una comisi¨®n de emergencia para este viernes, pero eso no implica de manera autom¨¢tica que hagamos tal declaraci¨®n que s¨®lo se produce si la situaci¨®n es ¡°grave, repentina, inusual o inesperada, si conlleva implicaciones para la salud p¨²blica m¨¢s all¨¢ de las fronteras nacionales del Estado afectado y si puede requerir una acci¨®n internacional inmediata¡±.
P. ?La reacci¨®n y apoyo financiero de la comunidad internacional est¨¢ siendo suficiente para atajar el brote?
R. La OMS y sus socios requieren financiaci¨®n inmediata y sostenible para responder a esta epidemia. Las necesidades actuales, entre febrero y julio, se elevan a 98,4 millones de d¨®lares y s¨®lo hemos recibido 39,2 millones, necesitamos 58,8 millones m¨¢s. Este d¨¦ficit de fondos es inmediato y cr¨ªtico, si no se reciben los fondos, la OMS no podr¨¢ sostener la respuesta en la escala actual.
P. En diez meses no se ha podido controlar la epidemia, ?cu¨¢les son las razones?, ?cu¨¢l es la situaci¨®n actual del brote?
R. El deterioro de la seguridad en las ¨²ltimas semanas es un freno a la respuesta. Hay que tener en cuenta que el brote se produce en uno de los entornos m¨¢s complejos y con m¨¢s desaf¨ªos de los que hemos operado nunca. Tenemos incidentes cada semana, a veces grandes y a veces peque?os. Cada vez que se produce un incidente importante se retrasa la respuesta de una a tres semanas. Si no podemos acceder a las comunidades no podemos vacunar, no podemos tratar a los enfermos y no podemos rastrear los contactos, lo que significa que el virus contin¨²a propag¨¢ndose. Tenemos las estrategias, los recursos y las herramientas para frenar el brote, incluida una vacuna que est¨¢ funcionando muy bien. La ONU ha fortalecido su respuesta, ahora necesitamos el compromiso pol¨ªtico sostenido de todas las partes en la RDC para que podamos tener un acceso seguro a las comunidades y vencer al virus antes de que cause m¨¢s p¨¦rdidas de vidas y sufrimiento. Pese a todo, una disminuci¨®n reciente en los casos semanales muestra posibles signos de desaceleraci¨®n, una tendencia positiva y alentadora que debe interpretarse con cautela porque a¨²n es pronto para sacar conclusiones.
P. En esta epidemia, por primera vez, exist¨ªa un tratamiento y una vacuna en fase experimental, ?c¨®mo han contribuido a combatir la enfermedad?
R. Los datos iniciales muestran que la vacuna no solo previene sino que tambi¨¦n protege a quienes enfermaron tras ser vacunados. Est¨¢ funcionando. Respecto a las terapias, sabemos que hay ¨¦xitos y que conseguimos que sobrevivan m¨¢s personas, pero no podemos compartir ning¨²n detalle de los resultados porque estamos a¨²n en pleno ensayo. Esperemos a los resultados finales.
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