El Supremo de Brasil tipifica la homofobia como delito

Brasil ha dado un paso importante para la comunidad LGTB despu¨¦s de que el Tribunal Supremo del pa¨ªs decidiera el jueves que los actos de homofobia y transfobia ser¨¢n considerados delitos y tendr¨¢n el mismo trato penal que el racismo -con penas de hasta cinco a?os de prisi¨®n- hasta que el Congreso legisle sobre ese asunto. La decisi¨®n, tomada en pleno mes del orgullo mundial LGTB, cont¨® con ocho de los 11 magistrados votando a favor, en una decisi¨®n esperada desde que los jueces empezaron a debatir el tema en febrero. La tesis fijada por el Supremo es v¨¢lida hasta que el Congreso apruebe una ley espec¨ªfica. En un momento en que el conservadurismo hace fuerza para ganar espacio en Brasil en el Legislativo y en el Ejecutivo, la decisi¨®n de la Corte refuerza el pulso que se hizo evidente desde la elecci¨®n del presidente Jair Bolsonaro, que ya se declar¨®, en el pasado, un "hom¨®fobo orgulloso".

Este viernes, Bolsonaro dijo que la decisi¨®n del Supremo perjudica a la propia comunidad LGBT y genera un conflicto en la esfera penal. "La decisi¨®n del Supremo fue equivocada", afirm¨® el presidente durante un desayuno con periodistas que cubren el Palacio del Planalto. Bolsonaro argument¨® que ahora una persona LGBT puede tener m¨¢s dificultad en encontrar trabajo, pues el jefe se asustar¨¢ con la posibilidad de ser falsamente acusado de discriminaci¨®n si el futuro empleado es despedido un d¨ªa. El presidente lleg¨® a decir que el Supremo ha creado "una escisi¨®n de lucha de clases".

El presidente encuentra eco entre diputados conservadores que ven en los avances de leyes de protecci¨®n a los homosexuales un sesgo ideol¨®gico. Quien tambi¨¦n se ha mostrado contrario a la decisi¨®n ha sido el diputado estatal Carlos Jordy (PSL-RJ). "Lamentablemente la decisi¨®n del Supremo, el activismo judicial lleg¨® a su punto ¨¢lgido, y ya comenz¨® la cacer¨ªa ideol¨®gica de la patrulla del activismo LGBT, pronto habr¨¢ activistas en iglesias buscando criminalizar la fe cristiana", escribi¨® en Twitter.

"La homofobia es un crimen", dijo la diputada federal Mar¨ªa del Rosario (PT-RS) sobre la sentencia del Supremo: "Durante a?os luchamos para que este d¨ªa llegara¡±. Rosario tuvo otra raz¨®n para celebrar este jueves. Poco antes de la decisi¨®n del Supremo, Bolsonaro public¨® en su twitter una petici¨®n de disculpas, siguiendo determinaci¨®n judicial, por las palabras dirigidas a la diputada en 2014, cuando afirm¨® que Mar¨ªa del Rosario "no merec¨ªa ser violada" por ser "muy fea" y porque ella "no es¡± su "tipo". Bolsonaro fue condenado por el Tribunal de Justicia del Distrito Federal en 2015 a pagar una indemnizaci¨®n de 10.000 reales por da?os morales a Rosario y a pedir disculpas p¨²blicamente. ?l recurri¨® de la decisi¨®n en el Tribunal Superior de Justicia, pero no tuvo ¨¦xito. Fue luego al Supremo, que confirm¨® la misma decisi¨®n.

Las diferencias con la Corte, por cierto, ya hicieron a Bolsonaro afirmar que era hora de que el Supremo tuviera un ministro evang¨¦lico. El presidente podr¨¢ proponer un nuevo ministro de la Corte el a?o que viene cuando el magistrado Celso de Mello se jubila.

Peligro constante

La decisi¨®n del Supremo de criminalizar la homofobia se produce tres semanas despu¨¦s de que el Ejecutivo eliminara las responsabilidades relacionadas con la comunidad LGTB del Ministerio de Derechos Humanos y poco despu¨¦s que Bolsonaro dijo que Brasil no debe convertirse en un "para¨ªso del turismo gay". En un pa¨ªs profundamente religioso, donde tanto la Iglesia cat¨®lica como los movimientos populares evang¨¦licos son muy cr¨ªticos con los derechos LGTB, la sentencia del Supremo aclara que permitir¨¢ a los practicantes de todas las religiones manifestar su oposici¨®n a las relaciones homosexuales, siempre que sea "de acuerdo con sus libros y c¨®digos sagrados " y no se incurra en la discriminaci¨®n.

Al menos 320 personas LGBT murieron por homofobia en el pa¨ªs en 2018 y 126 asesinatos ya se registraron hasta junio de 2019, de acuerdo con el Grupo Gay de Bah¨ªa (GGB), la m¨¢s antigua asociaci¨®n brasile?a en pro de los derechos de la comunidad. Entre el 2011 y el 2018, el pa¨ªs registr¨® una muerte por homofobia cada 16 horas, de acuerdo con un informe solicitado por la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos, que reuni¨® denuncias de asesinatos contabilizados por el Disque 100 (un canal que recibe denuncias de violaciones de derechos humanos), por el GGB y por la asociaci¨®n internacional Transgender Europe.

Brasil tambi¨¦n es el pa¨ªs m¨¢s peligroso del mundo para ser transg¨¦nero, seg¨²n el proyecto Trans Murder Monitoring, con al menos 167 personas asesinadas en los 12 meses anteriores a septiembre de 2018. Hoy, la expectativa de vida de una persona trans o travesti es de 35 a?os. S¨®lo en 2019, el n¨²mero de asesinatos como consecuencia de la transfobia (odio o aversi¨®n a la identidad de g¨¦nero) ya ha llegado a 123, siendo 65 asesinatos de travestis y 53 de mujeres transexuales, seg¨²n un informe del GGB.

Por eso, la sentencia dictada por el Supremo ha sido muy esperada por los colectivos LGTB, que la consideraron "hist¨®rica". "La orientaci¨®n sexual y la identidad de g¨¦nero son esenciales para los seres humanos, para la autodeterminaci¨®n de decidir su propia vida y buscar la felicidad", afirm¨® el juez Gilmar Mendes, durante la votaci¨®n en el Supremo. El juicio comenz¨® a pedido del Partido Socialista Brasile?o, que denunci¨® la "omisi¨®n del Congreso" para legislar durante 30 a?os sobre un tema vinculado a los derechos humanos. Los diversos proyectos de ley presentados hasta el momento fueron bloqueados por las presiones de los sectores m¨¢s conservadores de la sociedad. Tambi¨¦n fue el Supremo que legaliz¨® el matrimonio homoafectivo el 2013.

La magistrada Carmen Lucia Antunes dijo, en un emocionado discurso, que "todos los seres humanos nacen libres e iguales y deben ser tratados con el mismo esp¨ªritu de fraternidad", a?adiendo que "lo que se busca es dotar de una protecci¨®n inmediata a aquellos que son discriminados y marginados¡± por las leyes. "Todo prejuicio es violencia, toda discriminaci¨®n es violencia, toda discriminaci¨®n es una forma de sufrimiento, pero algunos de esos prejuicios causan m¨¢s sufrimiento, porque castigan desde el hogar y por la simple circunstancia de intentar ser lo que se es", dijo.