Los obispos alemanes aprueban seguir adelante con el debate reformista pese a las reticencias de Roma

El c¨®nclave de oto?o de la Conferencia Episcopal alemana ha emitido un claro veredicto tras cuatro d¨ªas de encuentro: los obispos alemanes han aprobado por amplia mayor¨ªa seguir adelante con el llamado ¡°camino sinodal¡±. Es decir, los obispos han dado el visto bueno a los estatutos del proceso con el que debatir¨¢n con las comunidades cat¨®licas temas como el celibato, las estructuras de poder de la Iglesia o el acceso de la mujer al sacerdocio en un proceso no vinculante, pero que ha despertado fuertes resistencias en Roma.

Con este proceso, la Iglesia alemana quiere dar respuesta a la presi¨®n reformista de las bases y contribuir al debate de las reformas pendientes en una Iglesia que pierde miembros e ingresos a marchas forzadas. Los cat¨®licos alemanes han evitado conscientemente llamarlo s¨ªnodo para sortear cualquier colisi¨®n con el derecho can¨®nico a un proceso, nacido al calor de la investigaci¨®n sobre los abusos sexuales en el seno de la Iglesia, publicado hace un a?o.

La iniciativa se ha topado con el rechazo del Vaticano, que teme que los alemanes se alejen de la Iglesia universal. La Conferencia Episcopal trat¨® sin embargo de enviar una se?al tranquilizadora a Roma, asegurando que en ning¨²n modo Alemania pretende alejarse de la Iglesia universal. ¡°No habr¨¢ un camino especial alem¨¢n sin Roma en las cuestiones relevantes de la Iglesia universal¡±, dijo Marx. El presidente de la Conferencia Episcopal alemana, el cardenal Reinhard Marx, asegur¨® en la reuni¨®n de Fulda que no hay ¡°se?ales de prohibici¨®n¡± por parte del Vaticano para lanzar el camino sinodal ¡°y por lo tanto vamos a seguir adelante¡±, seg¨²n indic¨® el ¨®rgano de los obispos en una nota.

Los estatutos y el pre¨¢mbulo aprobados incluyen adem¨¢s ligeras modificaciones, con las que destacan la unidad de la Iglesia universal y con las que los obispos han querido responder a las inquietudes que el papa Francisco expres¨® en una carta enviada a la Iglesia alemana el pasado junio. En septiembre, el prefecto para la Congregaci¨®n de los Obispos, Marc Ouellet, envi¨® tambi¨¦n una misiva a Marx que advert¨ªa de contradicciones del proceso alem¨¢n en relaci¨®n con el derecho can¨®nico.

El respaldo mayoritario del proceso cont¨® sin embargo con la expl¨ªcita y minoritaria oposici¨®n de los representantes m¨¢s inmovilistas del obispado. El obispo de Ratisbona, Rudolph Voderholzer, hizo p¨²blico su voto en contra, porque a su juicio, los temas que se abordar¨¢n no corresponden con las causas de la crisis de la Iglesia. Tras el visto bueno de los obispos falta ahora la luz verde del Comit¨¦ Central de los Cat¨®licos Alemanes (ZdK, por sus siglas en alem¨¢n), la organizaci¨®n paraguas donde est¨¢n representadas asociaciones y personalidades de todo el pa¨ªs y que tambi¨¦n participar¨¢n en el camino sinodal. La aprobaci¨®n de la ZdK se da por sentada y el arranque del programa de debates se prev¨¦ para principios de diciembre.

Cuatro grupos de trabajo

El debate sobre los grandes temas a los que la Iglesia cat¨®lica alemana quiere dar respuesta se dividir¨¢n en cuatro grandes grupos de trabajo que abordar¨¢n las estructuras de poder en la Iglesia, el estilo de vida de los curas, la moral sexual y el papel de las mujeres en la instituci¨®n.

Durante el encuentro de Fulda, los obispos mantuvieron tambi¨¦n ¡°intensas conversaciones sobre las necesarias consecuencias¡± tras la publicaci¨®n de la investigaci¨®n sobre los abusos sexuales cometidos por parte de miembros de la Iglesia, seg¨²n indica la nota de la Conferencia Episcopal publicada el jueves. Una investigaci¨®n encargada por la Conferencia Episcopal Alemana document¨® hace un a?o 3.677 casos de abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia a menores.