El escritor acusado de un crimen machista de 1981 niega los hechos ante el juez

Manuel Macarro, vecino de Madrid y escritor, ha comparecido este martes ante el juez en una declaraci¨®n indagatoria acusado de matar hace 38 a?os a su pareja embarazada. El homicidio se destap¨® en 1999, cuando se localiz¨® el cad¨¢ver de la v¨ªctima en el jard¨ªn de la casa que ambos alquilaron en Sant Salvador de Guardiola (Barcelona).

Marraco ha reiterado su inocencia: ha dicho que no mat¨® a la mujer y ha asegurado que ignoraba que estuviera embarazada. El escritor, que ha declarado por videoconferencia desde Castell¨®n, ha reconocido que conoc¨ªa a la mujer, Carmen Fraile, y que hab¨ªa mantenido relaciones sexuales con ella. El acusado incluso ha admitido que viajaron juntos de Madrid y Barcelona y que pasaron unos d¨ªas en la casa de Sant Salvador de Guardiola. El hombre, sin embargo, ha dicho que la dej¨® all¨ª con vida y que ella le manifest¨® su intenci¨®n de irse a vivir a Australia, seg¨²n fuentes conocedoras de la declaraci¨®n.

"Ha dicho que no sab¨ªa que estaba embarazada, y menos de ¨¦l", ha explicado a la salida de la vista el abogado de la familia, Xavier Alsina. El juez ha le¨ªdo el auto de procesamiento a Marraco, que no ha aceptado los hechos. Su defensa, que ejerce la abogada Maribel Jord¨¤, ha pedido el archivo por prescripci¨®n del delito. La petici¨®n est¨¢ pendiente de que resuelva? la Audiencia de Barcelona. La Fiscal¨ªa, que no ha formulado preguntas al acusado, se ha adherido a la petici¨®n de la abogada al considerar tambi¨¦n que los hechos han prescrito.

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Las hermanas Fraile, una promesa y un crimen espeluznante a punto de resolverse 38 a?os despu¨¦s

El titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 4 de Manresa (Barcelona) ha citado al acusado para interrogarlo y notificarle su procesamiento por un delito de homicidio y aborto, cometido en 1981 y resuelto el pasado a?o tras una laboriosa investigaci¨®n de la Guardia Civil, iniciada en 1999, cuando el propietario de la parcela hall¨® el cad¨¢ver mientras excavaba el suelo para plantar un ¨¢rbol.

El juez sostiene que Macarro, de 74 a?os y que fue detenido a finales del pasado a?o en Castell¨®n y permanece desde entonces en libertad con cargos, cometi¨® el crimen cuando estaba "sometido a la tensi¨®n" provocada por el embarazo de seis meses de su pareja, que hab¨ªa ocultado a su esposa, que resid¨ªa en Madrid con sus hijos.

El acusado se hab¨ªa trasladado en octubre de 1981 a Sant Salvador de Guardiola junto a la v¨ªctima, Carmen Fraile Mu?oz, para pasar varios d¨ªas juntos en una casa alquilada. Seg¨²n el juez, tras matar a la v¨ªctima de un tiro en la cabeza con un arma de fuego, Manuel Macarro enterr¨® el cad¨¢ver de su pareja embarazada en el jard¨ªn de la finca que hab¨ªa alquilado en la urbanizaci¨®n Ca l'Esteve de Sant Salvador de Guardiola.

Unas semanas despu¨¦s del crimen, cuando la vegetaci¨®n hab¨ªa ocultado las huellas de la zona, el escritor empez¨® a vivir en la finca de Sant Salvador con su esposa y con sus hijos, que se trasladaron desde Madrid. Pasados unos ocho meses, la familia cambi¨® de residencia a instancias del acusado, que argument¨® que no pod¨ªa pagar una vivienda tan cara, por lo que iniciaron una vida n¨®mada con la que el juez entiende que pretend¨ªa evitar su localizaci¨®n si finalmente se le relacionaba con la desaparici¨®n de la v¨ªctima. Sin embargo, esta vinculaci¨®n con el crimen a¨²n tardar¨ªa 38 a?os en llegar.

Josefa, la hermana menor de la v¨ªctima, hoy con 61 a?os, la busc¨® pero no volvi¨® a saber de ella hasta 36 a?os despu¨¦s, en 2017. El Juzgado de Primera Instancia 81 de Madrid ¡ªen el marco de una declaraci¨®n de fallecimiento de Carmen necesaria para que el padre de ambas, que a¨²n vive, pudiera hacer testamento¡ª, envi¨® a todas las comisar¨ªas de Espa?a el ADN de Josefa para que se cotejase con los ficheros policiales.

La alarma salt¨® en la comisar¨ªa de Manresa (Barcelona). El ADN de Josefa coincid¨ªa con el del cad¨¢ver de una mujer encinta que llevaba 20 a?os sin identificar, extra¨ªdo casualmente por una m¨¢quina en 1999 de las entra?as de la tierra durante las obras en el jard¨ªn de un chal¨¦ del municipio barcelon¨¦s de Sant Salvador de Guardiola, en la urbanizaci¨®n Cal Esteve. Entonces, la polic¨ªa de Manresa no pudo identificar el cad¨¢ver, pero guard¨® la huella gen¨¦tica. Casi dos d¨¦cadas despu¨¦s los agentes pudieron por fin resolver aquel crimen archivado y sin autor conocido.

En 2017 ocurrieron dos cosas clave para la investigaci¨®n: la primera, Josefa denunci¨® formalmente ante la polic¨ªa la desaparici¨®n de su hermana y los agentes se quedaron con su ADN y el de su padre. Y segunda, el Juzgado de Primera Instancia 81 de Madrid abri¨® un expediente testamentario para el reparto de los bienes del padre de ambas. Josefa declar¨® en este juzgado que la ¨²ltima vez que vio a su hermana fue en 1981. Fue entonces cuando dio el nombre de Manuel Macarro como la persona que en aquella ¨¦poca hab¨ªa tenido una relaci¨®n con su hermana pero al que no hab¨ªa vuelto a ver despu¨¦s de aquella noche. Ni siquiera sab¨ªa si Carmen segu¨ªa con ¨¦l cuando meses despu¨¦s de aquel primer encuentro amoroso ella fue a buscarla llorando a su empresa.

El juzgado localiz¨® a Macarro en Barcelona y le pregunt¨® por Mar¨ªa del Carmen Fraile Mu?oz. Por escrito, Macarro respondi¨® que "nunca hab¨ªa o¨ªdo hablar de ella". No dijo la verdad, seg¨²n el auto de procesamiento. Meses despu¨¦s, el ADN descubr¨ªa que el cad¨¢ver desenterrado era de Carmen y que la ¨²ltima persona con la que fue vista era el escritor. El Juzgado N¨²mero 4 de Manresa abri¨® diligencias por homicidio y mand¨® detener a Macarro en diciembre de 2018. Esta vez, delante del juez, el hombre s¨ª admiti¨® que a finales de 1981 viaj¨® con ella a Barcelona, y que pasaron varios d¨ªas en la casa de campo que hab¨ªa alquilado. Despu¨¦s, dijo, volvi¨® a Madrid para recoger a su familia y llevarla al chal¨¦ de Barcelona. Antes, acord¨® con Carmen que se pod¨ªa quedar all¨ª varios d¨ªas m¨¢s y luego se marchar¨ªa. Asegur¨® que ignoraba que estuviera embarazada y que quedaron "como amigos". No obstante, el juez no le da credibilidad a esta versi¨®n porque estaba encinta de seis meses, "de forma que su embarazo deb¨ªa ser notorio", y adem¨¢s ¨¦l era el padre, seg¨²n confirm¨® el ADN.

Una vez detenido, a finales del pasado a?o, el responsable de la Guardia Civil recuerda que el sospechoso se mostr¨® "muy fr¨ªo y muy calculador", como si llevara tiempo pensando que alg¨²n d¨ªa acabar¨ªa llegando la polic¨ªa.