Italia, en estado de ¡®shock¡¯ por las restricciones para frenar el coronavirus
Algunas personas han aprovechado para salir de las ciudades aisladas antes de que se aplique completamente la cuarentena
Italia se acost¨® el s¨¢bado con el anuncio de una cuarentena forzosa para 16 millones de personas en la zona norte del pa¨ªs y sin ninguna certeza de c¨®mo iba a afectar a la vida cotidiana semejante disposici¨®n, a la que se suman severas restricciones para el resto del territorio nacional. As¨ª que el pa¨ªs ha amanecido este domingo en estado de shock, con una sensaci¨®n generalizada de caos y confusi¨®n y con muchas dudas ante una noticia todav¨ªa sin digerir. La medida m¨¢s radical de cuantas se han tomado fuera de China para contener el coronavirus es ya una realidad que cambiar¨¢ completamente, al menos durante casi un mes, la rutina de las personas. De hecho, en la mayor parte del pa¨ªs nadie sab¨ªa claramente qu¨¦ pod¨ªa hacer y qu¨¦ no estaba permitido. El decreto que el Gobierno italiano aprob¨® de madrugada ha suscitado una mezcla de clamor y sorpresa en las calles. Algunas personas han aprovechado para salir de las ciudades antes de que se aplique completamente la cuarentena.
En Roma, al mediod¨ªa, dos turistas n¨®rdicos caminan en c¨ªrculos en la puerta del Coliseo sin dejar de mirar sus m¨®viles. Buscan informaci¨®n en Internet que les aclare qu¨¦ est¨¢ ocurriendo. La entrada est¨¢ cerrada a cal y canto. Tan solo hay un peque?o cartel que advierte de que desde el 8 de marzo los museos y centros culturales est¨¢n cerrados en todo el pa¨ªs por orden del Gobierno para frenar la transmisi¨®n del coronavirus. Otros turistas se acercan y, al leer el cartel, se dan la vuelta y se preparan para tomar fotos al imponente monumento desde afuera.
Nadie sabe qu¨¦ sucede exactamente y por qu¨¦ no se puede entrar, pero hay un n¨²mero inusualmente escaso de gente en los alrededores de una de las principales atracciones tur¨ªsticas de Italia. ¡°No entiendo nada, es un espacio abierto, circula el aire, la gente se puede congregar aqu¨ª afuera igual que dentro¡±, protesta Estebina, una turista argentina reci¨¦n llegada a la capital italiana. ¡°Estoy muy decepcionado, es la primera vez que he tomado un avi¨®n, hab¨ªamos reservado este viaje hace un a?o, ten¨ªamos las entradas de todo compradas y ahora nadie nos da soluciones, entiendo el cierre de museos, pero no esto¡±, replica Alfonso, su hijo, de 30 a?os. ¡°?Podremos ir a los restaurantes o no? ?D¨®nde podemos informarnos?¡±, pregunta.
El Gobierno ha implantado una serie de medidas draconianas como la restricci¨®n de entradas y salidas las nuevas zonas aisladas ¡ªtoda la regi¨®n de Lombard¨ªa, motor econ¨®mico del pa¨ªs cuya capital es Mil¨¢n y 14 provincias norte?as¡ª o el cierre de museos y discotecas en todo el pa¨ªs, sin establecer c¨®mo ejecutarlas. A lo largo del domingo, de norte a sur, todas las autoridades involucradas, ministerios, prefectos, Protecci¨®n Civil, cuerpos de seguridad, han estado reunidos durante toda la jornada para tratar de dar con el modo de implementar las normas extraordinarias en un territorio tan grande. Lo ¨²nico que ha aclarado el Ejecutivo es que de las zonas aisladas, ¡ªLombard¨ªa y las provincias de M¨®dena, Parma, Piacenza, Reggio Emilia, Rimini, Pesaro y Urbino, Venecia, Padua, Treviso, Asti, Vercelli, Novara, Verbano-Cusio-Ossola y Alessandria¡ª se podr¨¢ salir y entrar solo con autorizaci¨®n previa por motivos laborales, de salud o en situaciones de necesidad. La circulaci¨®n dentro de los territorios queda limitada tambi¨¦n de la misma forma.
Marco Triolo vive en Mil¨¢n, pero el anuncio de la cuarentena forzada le pill¨® de viaje de trabajo en Dubl¨ªn. En cuanto escuch¨® los primeros rumores de aislamiento pag¨® 400 euros para comprar un billete de avi¨®n para las 6.00 del domingo y a las 9.00 ya estaba en Mil¨¢n. En cuanto lleg¨®, cogi¨® su coche, a sus dos mascotas y emprendi¨® rumbo al sur.
¡°En el aeropuerto nos han tomado la temperatura, pero no ha habido cancelaciones de vuelos, tampoco ning¨²n control de la polic¨ªa en ning¨²n punto de la ciudad, ni a la salida¡±, dice al tel¨¦fono mientras conduce hacia el sur. ¡°Por el camino he encontrado algunas grandes colas de gente en los accesos a grandes supermercados y un amigo que ha salido m¨¢s tarde que yo de la ciudad me ha contado que se ha encontrado con alg¨²n control, pero ha podido salir con tranquilidad¡±, a?ade.
Por la ma?ana han llegado a Roma y a otros puntos del sur trenes y autobuses procedentes de Mil¨¢n y otras ciudades del sur con relativa normalidad. Algunas regiones sure?as han comenzado a organizarse de forma aut¨®noma para controlar la entrada de gente que proceda de las zonas de riesgo del norte. En Salerno, por ejemplo, han detenido a los autobuses procedentes de Lombard¨ªa y han tomado la temperatura a los pasajeros. Ninguno hasta el momento, seg¨²n han informado las autoridades, ten¨ªa fiebre, por lo que se ha permitido a los pasajeros continuar su camino y se les ha recomendado aislarse de forma voluntaria durante 14 d¨ªas.
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