Rostros y voces

Me ha escrito R., compa?era de evoluciones en la piscina del gimnasio municipal madrile?o al que sol¨ªa acudir en tiempos mejores, para mantener la espalda a punto. Una vaharada de vapor humano (literalmente) me ha devuelto a la sencillez de aquellos d¨ªas en que lo importante era ducharse bien antes de introducirse, no resbalar en el camino hacia la escalerilla y escuchar las instrucciones de la magn¨ªfica monitora. Mayores, preferentemente mujeres, un par de varones como mucho, pugnando contra nuestros cuerpos a lo largo de una calle, canal o como se llame. Ahora me parece el universo.

R., como la mayor¨ªa de nuestro grupo, y el de las que se iban cuando yo entraba al vestuario, y el de las que llegaban cuando nosotras march¨¢bamos, es una de esas mujeres-cimiento que aguantan lo que les echen. Sin entrar en detalles, para no delatarla: una mujer abierta, fuerte, que soporta lo propio y lo ajeno. Y que siempre duda de s¨ª misma. Con la sensibilidad que tiene. O por eso.

Esas conversaciones en el agua, que tambi¨¦n son terap¨¦uticas. Cloro, toallas, bastones. Gritos de monitores, ¨¢rboles al otro lado de la cristalera, susurros sobre la lucha de lo p¨²blico contra la avaricia de lo privado, corrillos de trabajadores.

Y frases sueltas en el vestuario: ¡°?C¨®mo va tu marido?¡±, ¡°Pues ya ves, menos mal que, con la resonancia, se lo han visto¡±, ¡±Yo de noche me quedo as¨ª, con los ojos abiertos, no puedo dormir¡±, ¡°Pues yo, si no despertara, no me importar¨ªa¡±.

Grupo de riesgo.

Informaci¨®n sobre el coronavirus

- Aqu¨ª puede seguir la ¨²ltima hora sobre la evoluci¨®n de la pandemia

- El mapa del coronavirus: as¨ª crecen los casos d¨ªa a d¨ªa y pa¨ªs por pa¨ªs

- Preguntas y respuestas sobre el coronavirus

- Gu¨ªa de actuaci¨®n ante la enfermedad

- En caso de tener s¨ªntomas, estos son los tel¨¦fonos que se han habilitado en cada comunidad