El Gobierno recomendar¨¢ que las playas abran este verano con control de aforo y separaci¨®n entre hamacas
Industria propone normas para evitar contagios en los arenales, pero la regulaci¨®n final depender¨¢ de los municipios
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El Gobierno recomendar¨¢ que las playas abran este verano con medidas poco habituales para evitar contagios, entre ellas el control de aforo y la separaci¨®n entre hamacas, e incluso la delimitaci¨®n del espacio para cada persona. Lo principal ser¨¢ garantizar la separaci¨®n f¨ªsica entre ba?istas, por lo que la imagen de playas atestadas que se repite cada a?o cambiar¨¢ mucho en esta ocasi¨®n. El Ministerio de Industria encarg¨® al Instituto para la Calidad Tur¨ªstica Espa?ola (ICTE) un protocolo general, que el organismo ha consensuado con comunidades aut¨®nomas y ayuntamientos. Este documento se encuentra a¨²n en fase de borrador y en cualquier caso la regulaci¨®n final de los arenales depender¨¢ de los consistorios, que son en su mayor parte responsables de estos espacios.
¡°Se trata de un borrador que todav¨ªa tiene que ser autorizado por el Ministerio de Sanidad, por lo que la redacci¨®n final puede variar. No son normas de obligado cumplimiento, pero s¨ª se han elaborado con las aportaciones de comunidades y entidades locales, por lo que pensamos que en su mayor¨ªa lo seguir¨¢n¡±, explica una portavoz del ICTE. Antes de conocerse este documento, algunos ayuntamientos ya hab¨ªan puesto sobre la mesa ideas para la reapertura de los arenales: apps para controlar el aforo, cierre con la marea alta ¡ªcomo ya hace San Sebasti¨¢n¡ª, arenales con parcelas, distancia entre toallas, sin duchas, vestuarios ni colchonetas...
El documento, realizado a instancias de Industria, pide a los consistorios a estimar la capacidad de cada playa, teniendo en cuenta tanto las caracter¨ªsticas de la misma (por ejemplo, cu¨¢nto litoral hay con las diferentes mareas) como el uso de sus espacios, que incluye concesiones por hamacas y sombrillas. Con estos datos, las entidades locales deber¨¢n determinar si es necesario instalar un control de accesos y un sistema para informar a los usuarios de que la capacidad m¨¢xima de la playa se ha alcanzado, con lo que no se podr¨¢ acceder a ella. En este sentido, advierte de que para lograr estos objetivos puede ser necesario reorganizar el personal de las playas e incluso usar drones si fuera necesario.
Seg¨²n el borrador, se recomienda se?alizar los espacios que pueden ser ocupados por los ba?istas mediante hitos, sombrillas u otro tipo de indicaciones. ¡°Se se?alizar¨¢n adecuadamente los espacios de movilidad de los usuarios, por ejemplo la entrada y salida de la zona h¨²meda, itinerarios de paso a las concesiones desde los accesos, etc¨¦tera¡±. Adem¨¢s, debe considerarse c¨®mo asegurar que los usuarios en primera l¨ªnea de playa guardan la distancia de seguridad respecto a los usuarios en la orilla.
Mientras, la zona de hamacas y sombrillas deber¨¢ delimitarse a trav¨¦s de balizas, cintas, indicaciones u otro sistema, ¡°estableci¨¦ndose un control en la asignaci¨®n de las mismas, de forma que se pueda asegurar, previo a su uso, que el equipamiento ha sido debidamente limpiado y desinfectado¡±. La propuesta del ICTE contempla distribuir las hamacas y sombrillas dentro de la zona delimitada para asegurar la distancia de seguridad entre los usuarios de este servicio. El material de las hamacas que entra en contacto con el usuario debe poder desinfectarse o desecharse tras su uso y al inicio de la jornada. Se instar¨¢ al usuario en cualquier caso a utilizar su propia toalla en el uso de estos equipamientos.
Las recomendaciones incluyen que cada Ayuntamiento eval¨²e si se deben abrir los aseos, pero para ello habr¨¢ de asegurarse su limpieza y desinfecci¨®n varias veces al d¨ªa. Estas instalaciones tendr¨¢n que tener agua y jab¨®n para el lavado de manos, papel de secado o secador de manos y papelera de accionamiento no manual con bolsa interior. No se deben utilizar ba?os qu¨ªmicos. En cualquier caso, habr¨¢ que aumentar las frecuencias de limpieza en los arenales y garantizar que los trabajadores reciben la informaci¨®n suficiente sobre las normas de higiene.
Algunas comunidades, como Andaluc¨ªa, ya realizaron sus propias recomendaciones para cuando abran las playas al ba?o: estancias de cuatro horas con los arenales marcados para garantizar la distancia, horarios de apertura y cierre, desinfecci¨®n diaria de la playa y veto a las duchas o vestuarios. Entre las sugerencias tambi¨¦n recoge que los aseos se usen ¡°en caso estrictamente necesario¡±, que las toallas est¨¦n a dos metros y que se prescinda de colchonetas.
La ¨²ltima palabra la tendr¨¢n los ayuntamientos, pero siempre respetando las obligaciones generales que impone el Ministerio de Sanidad. La norma que permitir¨¢ reabrir las playas en fase 2 ¡ªhasta ahora, solo han abierto algunas para pasear¡ª deja claro que habr¨¢ que guardar dos metros de distancia con otros ba?istas, mantener una higiene de manos adecuada y no formar grupos de m¨¢s de 15 personas. La normativa de Sanidad vigente se?ala que las playas deben instalar carteler¨ªa y mensajes de megafon¨ªa sobre las normas de higiene y prevenci¨®n y recordar a cualquier usuario con s¨ªntomas que debe abandonar la zona. Adem¨¢s, recuerda que no se podr¨¢ hacer uso de las duchas de los vestuarios ni de las fuentes de agua.
El problema de las piscinas comunitarias
El BOE permite que las piscinas ¡ªtanto p¨²blicas como de urbanizaciones¡ª de zonas en fase 2 abran con un aforo del 30%, cita previa y estrictas medidas de limpieza que incluyen desinfecci¨®n diaria (varias veces al d¨ªa en elementos como barandillas), lo que le pone las cosas dif¨ªciles a las piscinas comunitarias. ¡°Los requisitos sanitarios son tan exigentes que es imposible cumplirlos. ?C¨®mo organizas los turnos en un espacio peque?o?¡±, dice Noelia Mochales, del Colegio de Administradores de Fincas de Madrid. Mochales calcula que dedicar una persona a controlar el aforo puede suponer un gasto de 9.000 euros en tres meses, que se suman a los 12.000 anuales que cuesta esta instalaci¨®n (con socorrista). ¡°Es imposible aprobar ese gasto si no se pueden celebrar juntas de vecinos¡±, a?ade. Por eso, cree que ser¨¢ casi imposible que estos recintos abran. Falta un mes para la temporada de piscinas p¨²blicas, por lo que a¨²n no est¨¢ claro c¨®mo les afectar¨¢ la norma, aunque el Ayuntamiento de Madrid, por ejemplo, ya ha avisado de que no reabrir¨¢ las piscinas p¨²blicas al menos hasta julio.
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