J.K. Rowling revela que fue v¨ªctima de violencia de g¨¦nero
La escritora entra de lleno en el debate que enfrenta a un sector del feminismo con el movimiento trans
La escritora brit¨¢nica J.K. Rowling (54 a?os) ha utilizado su blog personal para revelar, en un largo art¨ªculo, los abusos y violencia que sufri¨® durante su primer matrimonio. La raz¨®n para contarlo ahora, ha explicado, reside en la avalancha de cr¨ªticas y comentarios hirientes que ha recibido en las redes sociales por haber entrado en uno de los debates pol¨ªticos m¨¢s agrios, y a la vez m¨¢s lleno de matices, que vive el Reino Unido: el enfrentamiento entre una parte del feminismo y el movimiento trans en torno a la identidad de g¨¦nero y la idea de ¡°mujer¡± como realidad biol¨®gica con consecuencias jur¨ªdicas. ¡°Me niego a bajar la cabeza ante un movimiento que, seg¨²n creo, est¨¢ haciendo un da?o demostrable a la hora de erosionar [el concepto] de ¡®mujer¡¯ como clase pol¨ªtica y biol¨®gica, y ofreciendo como nunca de este modo cobertura a depredadores¡±, asegura la autora en un texto complejo y muy reflexionado que ha avivado la pol¨¦mica.
Es al final del art¨ªculo cuando Rowling cuenta la raz¨®n, no ¨²nica pero s¨ª seg¨²n ella definitiva, que le ha empujado a entrar de lleno en el debate: ¡°Llevo 20 a?os bajo la mirada p¨²blica y nunca hab¨ªa hablado abiertamente sobre el hecho de que soy una superviviente de la violencia sexual y dom¨¦stica. No es porque me averg¨¹ence de lo que me ocurri¨®, sino porque es algo muy traum¨¢tico de recordar y revivir. Quer¨ªa proteger adem¨¢s a mi hija, fruto de ese primer matrimonio. No quer¨ªa reclamar la propiedad ¨²nica de una historia que tambi¨¦n le pertenece a ella. Hace poco, sin embargo, le pregunt¨¦ c¨®mo se sentir¨ªa si contara esa parte de mi vida y me anim¨® a hacerlo¡±, explica.
La escritora llega a esta decisi¨®n, cuenta, despu¨¦s de haber sufrido durante meses acusaciones de transf¨®bica, que le llevaron durante un tiempo a abandonar las redes sociales, pero que resurgieron el pasado fin de semana cuando volvi¨® a publicar comentarios en Twitter. La plataforma de medios volcados en la ayuda al desarrollo Devex public¨® un art¨ªculo de opini¨®n en su p¨¢gina web titulado C¨®mo crear un mundo m¨¢s igualitario post covid-19 para las personas que menstr¨²an. Rowling respondi¨® con un tuit que pretend¨ªa ser ir¨®nico, pero revelaba el fondo de su cr¨ªtica principal: ¡°Gente que menstr¨²a. Estoy segura de que hay una palabra para definir a esa gente. Que alguien me eche una mano. ?Mojur? ?Majer? ?Mijar? (Wumben, wimpund, woomund?, en el original en ingl¨¦s)". No tardaron en llegar las respuestas, en muchos casos de un tono agresivo. Y gran parte de ellas inclu¨ªan un t¨¦rmino poco conocido para todos aquellos ajenos a esta pol¨¦mica, a pesar de estar viva desde hace ya a?os: TERF, las siglas para Feminista Radical Trans-Excluyente.
¡®People who menstruate.¡¯ I¡¯m sure there used to be a word for those people. Someone help me out. Wumben? Wimpund? Woomud?
— J.K. Rowling (@jk_rowling) June 6, 2020
Opinion: Creating a more equal post-COVID-19 world for people who menstruate https://t.co/cVpZxG7gaA
¡°Ejemplos de las llamadas TERF incluyen desde la madre de un menor gay que teme que su hijo quiera ¡®transicionar¡¯ (como se denomina a la decisi¨®n de cambiar de identidad de g¨¦nero) para escapar de los acosos homof¨®bicos a la se?ora mayor completamente antifeminista que promete no volver a poner un pie en los almacenes Marks & Spencer porque van a permitir que cualquier hombre que se defina a s¨ª mismo como mujer pueda entrar en los probadores femeninos¡±, dice Rowling en su texto.
No es, sin embargo, la an¨¦cdota de los probadores la principal preocupaci¨®n de la autora, aunque recurra a ella en varias ocasiones en su texto. Rowling se pone del lado de aquellas feministas que muestran respeto y solidaridad con el movimiento trans pero se niegan a que desaparezca la realidad biol¨®gica del hecho de ser mujer. ¡°He le¨ªdo todos los argumentos que defienden que la feminidad no reside en un cuerpo con sexo, y los que afirman que no todas las mujeres biol¨®gicas comparten las mismas experiencias, y los encuentro profundamente mis¨®ginos y regresivos. Es evidente que uno de los objetivos que se pretende al negar la importancia de la condici¨®n sexual es borrar lo que algunos ven como la idea cruelmente segregacionista de que las mujeres tengan su propia realidad biol¨®gica, o ¡ªigual de amenazante¡ª de que tengan una realidad unificadora que les convierte en una clase pol¨ªtica coherente¡±, afirma.
La notoriedad p¨²blica de la autora de la saga de Harry Potter, que se ha demostrado en sus cr¨ªticas a Donald Trump o en su lucha contra el Brexit, conlleva tambi¨¦n el riesgo de que las reacciones a sus palabras sean m¨¢s destacadas por la an¨¦cdota de los protagonistas que por los argumentos en discusi¨®n. La prensa brit¨¢nica reflej¨® enseguida que las primeras respuestas a los comentarios de la escritora procedieron del actor Daniel Radcliffe o de Emma Watson, dos de los principales protagonistas de las pel¨ªculas del aprendiz de mago. ¡°Rowling ha sido claramente responsable del curso que ha tomado mi vida...y como ser humano me veo obligado a reconocerlo en este momento (...) Pero las mujeres transg¨¦nero son mujeres. Cualquier afirmaci¨®n contraria elimina la identidad y dignidad de las personas transg¨¦nero y va en contra de la opini¨®n de muchas asociaciones de profesionales de la salud que cuentan con mucha m¨¢s experiencia en la materia de la que podamos tener Jo [Rowling] o yo¡±, ha dicho Radcliffe en un comunicado p¨²blico. ¡°Las personas trans son lo que dicen que son y merecen vivir su vida sin ser permanentemente cuestionadas o sin que se les diga que no son lo que dicen ser¡±, ha publicado Watson.
Las reflexiones de la escritora revelan la complejidad y las trampas de un debate en el que, mientras una de las partes atribuye a la otra la culpa moral de dar la espalda a una realidad (el sufrimiento de muchas personas trans), la otra se resiste a dar cabida en su causa a una visi¨®n que considera ficticia y distorsionadora. ¡°Quiero seguridad para las mujeres trans¡±, afirma Rowling, ¡°pero no quiero que la pierdan las que han nacido ni?as o mujeres. Cuando abres las puertas de los ba?os o de los probadores a cualquier hombre que se siente o se cree mujer ¡ªy, como ya he dicho, los certificados de confirmaci¨®n de g¨¦nero ya no requieren de un tratamiento hormonal previo o de cirug¨ªa¡ª, abres la puerta a cualquier hombre que desee entrar. Es la simple verdad¡±, afirma. Las respuestas provocadas por su texto sugieren que no es tan simple.
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