¡°Mi padre no ten¨ªa fuerzas y se qued¨® sin comer un par de d¨ªas¡±, denuncian las hijas de un paciente del antiguo hospital La Fe

El padre de Maika y Ester Maeso, de 73 a?os y diab¨¦tico, se contagi¨® de covid en diciembre, ingres¨® el d¨ªa 5 de ese mes en el Hospital Cl¨ªnico de Valencia y el 23 lo trasladaron a la escuela de enfermer¨ªa del antiguo hospital de La Fe para su rehabilitaci¨®n, pues les dijeron que hab¨ªa perdido el tono muscular durante la enfermedad y ni pod¨ªa caminar. La Generalitat habilit¨® este centro para atender a enfermos de covid. Como las hijas no ten¨ªan informaci¨®n de su padre, se presentaron all¨ª el 24 por la tarde con una silla de ruedas alquilada para llev¨¢rselo a un centro privado pensando que se trababa solo de darle sesiones de fisioterapia, pero en el vest¨ªbulo del edificio, despu¨¦s de mucho insistir, una doctora baj¨® y les dijo que era una locura llev¨¢rselo porque el paciente llevaba ox¨ªgeno y m¨¢s medicaci¨®n de la que cre¨ªan las hijas. ¡°Mi padre nos lloraba por tel¨¦fono diciendo que lo hab¨ªan metido en una habitaci¨®n peque?a con otra persona. Adem¨¢s la cama era antigua, sin mando, y conforme los celadores lo dejaban en la cama, as¨ª se quedaba hasta que a la ma?ana siguiente lo mov¨ªan¡±, explica Maika. Adem¨¢s estaba ¡°destrozado psicol¨®gicamente¡±, tantos d¨ªas solo, sin visitas ni una televisi¨®n o radio de distracci¨®n. Su estado empeor¨® y fue trasladado de vuelta al Cl¨ªnico, donde falleci¨® el 10 de enero.

¡°Mi padre no ten¨ªa fuerzas ni para levantar la cuchara y se qued¨® sin comer un par de d¨ªas; uno le dejaron la comida sin ayudarle y otro, el celador fue a cambiar un cubierto roto y ya no volvi¨®¡±, aseguran sus hijas, que ten¨ªan contacto con ¨¦l por tel¨¦fono. ¡±No lo pod¨ªan levantar de la cama, nos dec¨ªa, porque los sillones eran viejos, as¨ª que le compramos uno y se lo acercamos al hospital, pero no nos dejaron subirlo. En siete d¨ªas dio una sesi¨®n de rehabilitaci¨®n, porque la segunda no lleg¨® a concluir. Otro d¨ªa fuimos a llevarle una radio para que se distrajese y cuando recogimos sus efectos personales [despu¨¦s de fallecido] nos devolvieron la caja sin abrir. Una aut¨¦ntica verg¨¹enza¡±, contin¨²an.

El 26 de diciembre, cuando la familia pensaba trasladarlo a un centro hospitalario privado, les lleg¨® un mensaje donde le indicaban que su padre hab¨ªa mejorado mucho y que igual en unos d¨ªas pod¨ªan llev¨¢rselo a casa. ¡°Y el 31 de diciembre nos avisan de que mi padre ha empeorado mucho y se lo llevan corriendo al Cl¨ªnico¡±. Estuvo dos d¨ªas en planta, luego una semana en la UCI y el 10 de enero muri¨®. A la una y media de la madrugada les dijeron por tel¨¦fono que hab¨ªa fallecido. ¡°No nos avisaron para poder despedirnos. Nos hemos sentido enga?adas y estafadas. Mi padre se ha muerto y yo sigo sin saber si muri¨® siendo positivo o negativo. Nunca nos lo dijeron¡±, lamenta la familia Maeso. A la Consejer¨ªa de Sanidad no le constan quejas formales ni denuncias del caso.

Maika encuentra similitudes entre algunas de las cosas que le sucedieron a su padre y el an¨®nimo que desde hace d¨ªas corre por las redes sociales, donde se describe una situaci¨®n descarnada en la antigua escuela de enfermer¨ªa de La Fe, un edificio que la Generalitat valenciana reacondicion¨® en un principio para pacientes covid leves, pero que finalmente tambi¨¦n ha acabado atendiendo casos graves. En la carta se explica que el centro hospitalario recibe ¡°pacientes derivados desde otros centros de Valencia para ¡®desahogar a los hospitales¡±. ¡°No tienen agua caliente para ducharse, los telefonillos no funcionan y suenan en el control de enfermer¨ªa, pero no puedes comunicarte con ellos, por lo que tienes que imaginarte lo que les pasa. La gran mayor¨ªa de habitaciones son min¨²sculas, pero dentro hay dos pacientes en camas de no se sabe qu¨¦ a?o¡±, prosigue el an¨®nimo que firma ¡°una enfermera con coraz¨®n¡± que ha trabajado en el hospital. La misiva hace hincapi¨¦ en la falta de personal para atender a todos los pacientes, adem¨¢s de que algunos son atados para evitar que se arranquen las v¨ªas. Fuentes internas del centro corroboran problemas en la atenci¨®n a los enfermos derivados de falta de personal.

Un portavoz de la Consejer¨ªa de Sanidad ha asegurado, respecto al caso descrito, que no le constan quejas formales ni denuncias al respecto. No obstante, ¡°nuestro inter¨¦s es ponernos a disposici¨®n de la familia para conocer de primera mano los hechos y facilitarle toda la informaci¨®n que necesite. Obviamente, lamentamos el fallecimiento de su familiar¡±. Esta fuente a?ade que la consejer¨ªa est¨¢ habilitando espacios donde se puede y como se puede, ¡°y la ¨²nica prioridad es salvar vidas¡±. ¡°Es verdad que la cuesti¨®n de la comodidad no es la que nos gustar¨ªa a todos pero la prioridad es la atenci¨®n m¨¦dica de la gente que entra¡±, apunta.

Sanidad emiti¨® el s¨¢bado un comunicado a prop¨®sito de la informaci¨®n que public¨® el diario El Espa?ol en torno al an¨®nimo, que la consejer¨ªa tild¨® de ¡°relato enga?oso¡±, reserv¨¢ndose la posibilidad de ejercer acciones legales ¡°contra todos aquellos que han dado p¨¢bulo a un escrito an¨®nimo que queremos calificar de poco o nada ¨¦tico y profundamente inmoral¡±. Seg¨²n Sanidad, la antigua Escuela de Enfermer¨ªa de La Fe cuenta con 166 camas y empez¨® a recibir pacientes el 2 de diciembre para descongestionar la presi¨®n asistencial de otros departamentos de salud. Se ha ingresado desde entonces a 250 pacientes covid, de los que finalmente solo un tercio son leves. ¡±La inmensa mayor¨ªa son personas con m¨¢s de 80 a?os que padecen muchas enfermedades asociadas y cuando se adopta una medida de contenci¨®n f¨ªsica [las ataduras] es para evitar una posible ca¨ªda, que se quite una v¨ªa o una sonda¡±, ha asegurado la directora de Enfermer¨ªa del departamento de salud Valencia-La Fe, Ana Regueira. Los profesionales est¨¢n haciendo todo lo posible ¡°y lo imposible para atenderles de la manera m¨¢s adecuada¡±. Fuentes de la Consejer¨ªa de Sanidad a?aden que la gravedad de la crisis sanitaria, con los hospitales valencianos saturados, puede provocar situaciones puntuales de falta de atenci¨®n, pero insisten en que la antigua Fe re¨²ne todas las condiciones.

El PP valenciano se ha hecho eco del an¨®nimo y el diputado auton¨®mico Jos¨¦ Juan Zaplana traslad¨® la carta al juzgado porque asegur¨® que pod¨ªa otorgarle veracidad ¡°tras las consultas con distintas fuentes del ¨¢mbito sanitario¡±. Seg¨²n consta en su escrito al juzgado, ¡°en la carta se denuncian graves situaciones de desatenci¨®n de los pacientes, se advierte de situaciones que podr¨ªan implicar denuncias por maltrato de ser conocidas por los familiares y, en general, que las condiciones del centro son inhumanas¡±.

Desde el comit¨¦ de ?tica y Deontolog¨ªa del Consejo de Colegios de Enfermer¨ªa de la Comunidad Valenciana se insiste en que hay que investigar la situaci¨®n y que haya una confirmaci¨®n de los hechos. ¡°Vamos a preguntar a los profesionales que est¨¢n all¨ª porque los an¨®nimos son an¨®nimos¡±, asegura Maribel Castell¨®, miembro del citado comit¨¦. ¡°Teniendo conocimiento del hecho, vamos a contrastar con los profesionales porque su obligaci¨®n, si es as¨ª, es denunciarlo en el colegio donde se les puede garantizar confidencialidad y anonimato¡±, concluye Castell¨®. ¡°Si es verdad y no lo quieren denunciar incurrir¨ªan en complicidad¡±, advierte.

En la Federaci¨®n de Sanidad de UGT-PV, su secretario general, Luis Lozano, considera que es un an¨®nimo que, desde su punto de vista, tiene incongruencias. ¡°Cualquier sindicato que tuviera conocimiento de esa situaci¨®n, desde luego lo hubiera denunciado¡±, afirma. En su hom¨®loga de CC OO-PV no quieren valorar el an¨®nimo hasta que no contrasten y se investigue lo que la misiva cuenta.

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