La UE prev¨¦ que a¨²n quedan meses de restricciones
El organismo ve inevitables las medidas por las nuevas variantes
Herida y cansada, contando a sus muertos por miles cada d¨ªa, Europa a¨²n tiene por delante un largo trecho para dejar atr¨¢s la pesadilla del coronavirus. As¨ª lo advierte el Centro Europeo para el Control y Prevenci¨®n de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en ingl¨¦s), que afirma que las variantes dibujan un horizonte en el que las restricciones deber¨¢n ¡°mantenerse¡± y ¡°reforzarse¡± por meses ¡ªprevisiblemente hasta verano¡ª, mientras cobra fuerza otra amenaza, la llamada fatiga pand¨¦mica, que ¡°es necesario abordar con urgencia si se quieren evitar nuevas olas de infecci¨®n¡±.
La reciente reducci¨®n de la incidencia de nuevos casos en la mayor¨ªa de los pa¨ªses y la extensi¨®n de las vacunas son pr¨¢cticamente las dos ¨²nicas buenas noticias que pueden encontrarse en las 29 p¨¢ginas de la ¨²ltima actualizaci¨®n del informe de riesgo sobre la pandemia, hecho p¨²blico este lunes por el ECDC. E incluso en estos casos hay matices. En el primero, porque ¡°la situaci¨®n epidemiol¨®gica sigue siendo muy preocupante¡±, con ¡°tasas de notificaci¨®n elevadas¡± y una ¡°alta mortalidad¡±. Y en relaci¨®n a las vacunas, ¡°es demasiado pronto para detectar un impacto en la mortalidad u hospitalizaciones¡±, apunta el informe.
El documento destaca que el continente ha registrado ¡°desde el 21 de enero un aumento sustancial en el n¨²mero y la proporci¨®n de casos de SARS-CoV-2 de la variante B.1.1.7¡±, detectada por primera vez en el Reino Unido. ¡°En Irlanda es la variante dominante y varios pa¨ªses estar¨¢n en una situaci¨®n similar en las pr¨®ximas semanas¡±, sostiene el ECDC. Esto ya ha causado ¡°un incremento de las hospitalizaciones, ha sobrecargado los sistemas de salud y provocado un exceso de mortalidad¡±.
Tambi¨¦n es creciente, aunque mucho menor por ahora, la detecci¨®n de casos de la variante B.1.351, descubierta en Sud¨¢frica, ¡°ya no solo asociada a viajes, sino tambi¨¦n con brotes¡±. En cambio, la variante P.1 ¡ªtambi¨¦n llamada brasile?a¡ª tiene los ¡°niveles m¨¢s bajos¡± de detecci¨®n.
La suma de factores relacionados con estas variantes m¨¢s contagiosas y los datos que apuntan a que pueden causar cuadros cl¨ªnicos ¡°m¨¢s graves¡± y restar efectividad a las vacunas llevan al ECDC a calificar de ¡°alto a muy alto para la poblaci¨®n general y muy alto para personas vulnerables¡± el riesgo asociado a su propagaci¨®n.
Los modelos manejados por el ECDC apuntan a que ser¨¢ necesario mantener las restricciones ¡ªmascarillas, movilidad e interacci¨®n social¡ª, e incluso ¡°fortalecerlas¡± durante ¡°los pr¨®ximos meses¡± si se quiere evitar ¡°un aumento significativo de casos y muertes¡±. ¡°Aunque la vacunaci¨®n mitigar¨¢ el efecto del reemplazo de las variantes m¨¢s transmisibles y la estacionalidad puede reducir la transmisi¨®n durante los meses de verano, flexibilizar prematuramente las medidas conducir¨¢ a un r¨¢pido aumento de la incidencia, detecci¨®n de casos graves y mortalidad¡±, indica el ECDC.
¡°Puede parecer un informe duro, pero dir¨ªa que se limita a plantear la realidad tal y como es¡±, afirma Daniel L¨®pez Acu?a, exdirector de Acci¨®n Sanitaria en Crisis de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. ¡°Estamos ante un escenario complicado y no hay atajos para salir de ¨¦l. Ya nos equivocamos antes y apresurarnos a relajar las restricciones ser¨ªa el primer paso hacia otra ola en marzo¡±, avisa.
Relajaci¨®n
El ECDC ve imprescindible que las restricciones ¡ªque denomina intervenciones no farmac¨¦uticas¡ª se fortalezcan y mantengan los pr¨®ximos meses para reducir la incidencia a los niveles m¨¢s bajos posible, ¡°minimizando as¨ª tambi¨¦n las oportunidades para que surjan nuevas variantes¡±, desgrana el informe.
Juan Carlos Gal¨¢n, jefe de virolog¨ªa del Hospital Ram¨®n y Cajal (Madrid) coincide en la necesidad de ¡°no dar oportunidades al virus¡±. ¡°Si su circulaci¨®n es m¨¢s alta, si hay m¨¢s contagios, son mayores las posibilidades de que acumule mutaciones. Esto aumenta el riesgo de que surjan variantes que pueden causar cuadros cl¨ªnicos m¨¢s graves y convertir las vacunas en menos efectivas. Y ese es un riesgo que no nos podemos permitir¡±, resume. El ECDC recomienda evitar ¡°los viajes no esenciales como parte de las medidas generales¡± y vaticina que ¡°es probable que sigan surgiendo variantes contra las cuales las vacunas con licencia actual podr¨ªan tener una eficacia reducida¡±, como ya se ha observado en algunos casos con la variante sudafricana.
Jos¨¦ Luis Alfonso, catedr¨¢tico de Medicina Preventiva y Salud P¨²blica de la Universidad de Valencia, ve la situaci¨®n europea atrapada entre dos fuerzas. ¡°Se ha frustrado la esperanza de una r¨¢pida vacunaci¨®n y es necesario mantener las restricciones. Mientras, aumenta el cansancio social y el impacto econ¨®mico de las medidas. Nos esperan unos meses en los que ser¨¢ imprescindible gestionar un entorno complicado¡±, valora. Alfonso ve margen en flexibilizar algunas medidas, all¨ª ¡°donde la evidencia muestra que el riesgo de aerosoles es muy bajo, como las terrazas¡±, pero insta a evitar ¡°una desescalada precipitada ante momentos como la Semana Santa o fiestas como las Fallas¡±.
El riesgo de la fatiga
El ECDC destaca los ¡°disturbios¡± registrados en varias ciudades contra las restricciones e insta a los pa¨ªses a ¡°gestionar con cuidado las expectativas sobre la probabilidad de flexibilizar¡± estas medidas. En juego est¨¢n unas intervenciones clave para ¡°evitar nuevas oleadas de infecciones¡±. El soci¨®logo Josep Lobera, profesor en la Universidad Aut¨®noma de Madrid (UAM), interpreta estos mensajes como ¡°un aviso a los pa¨ªses de que no es el momento de bajar la guardia¡±. Pero tambi¨¦n echa de menos ¡°una mirada m¨¢s amplia¡±. ¡°Si t¨² ves que sistem¨¢ticamente hay grupos de poblaci¨®n que se est¨¢n saltando las medidas, te quedan dos opciones. La primera es seguir imponiendo multas, pero hay otra que es plantearse nuevas alternativas¡±. Y pone como ejemplo el caso de los j¨®venes el pasado verano, conminados a quedarse en casa y sin apenas opciones de ocio en lugar de ¡°buscar f¨®rmulas para que pudieran socializar en espacios abiertos y seguros¡±.
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