Espa?a prepara los ¡®vacun¨®dromos¡¯ para la inmunizaci¨®n masiva

Esta semana han llegado a Espa?a m¨¢s vacunas que en todo el mes de enero: dos millones de dosis, casi una quinta parte de las que el pa¨ªs ha recibido desde el inicio de la campa?a. Y el ritmo, si se cumplen las previsiones, no parar¨¢ de crecer en las pr¨®ximas semanas. Para administrarlas seg¨²n arriban, la mayor¨ªa de comunidades aut¨®nomas que no hab¨ªan puesto en marcha recintos de vacunaci¨®n masiva est¨¢n ultimando su apertura. Se trata de desplegar todos los medios para cumplir el objetivo de inmunizar al 70% de la poblaci¨®n en verano y volver cuanto antes a una vida normal. La capacidad asistencial no deber¨ªa ser un obst¨¢culo para acelerar el ritmo de un proceso que la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) ha tachado de ¡°inaceptablemente lento¡± en Europa.

Madrid anunci¨® este s¨¢bado que pondr¨¢ en marcha el pabell¨®n Wizink Center para vacunar la pr¨®xima semana a poblaci¨®n general de entre 60 y 65 a?os. En la comunidad ya funciona el hospital Isabel Zendal y el estadio Wanda Metropolitano, donde estos d¨ªas hay personas que han tenido que esperar colas de horas para recibir su dosis de AstraZeneca. En el Pa¨ªs Vasco han comenzado a operar dos vacun¨®dromos este mismo fin de semana, que se suman a otros tantos que arrancaron a principios de semana y a la plaza de toros de San Sebasti¨¢n, donde se administran dosis desde principios de marzo a profesores y polic¨ªas; Galicia tiene preparados 14 centros, como recintos feriales, repartidos por la comunidad para la llegada masiva; en Canarias pondr¨¢n en marcha dos, uno en cada capital, en la segunda quincena del mes; Catalu?a est¨¢ esperando a que lleguen 200.000 dosis semanales para abrir seis grandes infraestructuras; Arag¨®n cuenta con cuatro, que tambi¨¦n usar¨¢ en cuanto la llegada sea ¡°masiva¡±; la Comunidad Valenciana esperar¨¢ a disponer de 57.000 diarias para multiplicar su capacidad con infraestructuras como la Ciudad de las Artes; en La Rioja instalar¨¢n desde la semana que entra infraestructuras de vacunaci¨®n m¨®vil para acelerar el proceso; Baleares instaur¨® lo que denomina puntos covid-expr¨¦s el 24 de marzo. Otras autonom¨ªas, como Andaluc¨ªa o Murcia, que empezaron casi desde el principio con pabellones deportivos, aseguran que ir¨¢n habilitando m¨¢s y m¨¢s grandes en funci¨®n de la llegada. Lo mismo explican portavoces de las consejer¨ªas de Sanidad de Castilla-La Mancha, Navarra y Asturias.

Estos vacun¨®dromos son un complemento a los centros de salud y una alternativa para no congestionarlos en una inmunizaci¨®n masiva. Seg¨²n las previsiones de la Uni¨®n Europea, Espa?a recibir¨¢ al menos 30 millones de dosis en el segundo trimestre que ahora empieza. Sumadas a las que ya se han administrado y a las que hay sin poner, ser¨ªan suficientes para completar la inmunizaci¨®n de casi 24 millones de personas a finales de junio, teniendo en cuenta que las 5,5 millones de Janssen incluidas en esa cifra son de una dosis y que los menores de 65 con un diagn¨®stico positivo en los seis meses previos reciben un solo pinchazo. 24 millones supone el 61,3% de la poblaci¨®n adulta. Con estas cuentas, se podr¨ªa alcanzar el objetivo del 70% con la pauta completa al principio del verano. El primer hito de esta hoja de ruta, sin embargo, no se logr¨®: inmunizar al 80% de los mayores de 80 a?os en marzo. De hecho, ning¨²n pa¨ªs de Europa lo consigui¨®. Espa?a, que se sit¨²a en la parte alta de la tabla en cuanto a porcentaje de poblaci¨®n inmunizada y de dosis inoculadas en proporci¨®n a las recibidas, llevaba este s¨¢bado el 44% de los ancianos con la pauta completa.

Para lograr la meta del 70% de la poblaci¨®n adulta han de ocurrir dos cosas: la primera, que se cumplan las previsiones de llegada de vacunas, algo que no sucedi¨® en el primer trimestre. La segunda, que haya capacidad asistencial suficiente para administrarlas. La opini¨®n de varios expertos consultados es que este no deber¨ªa ser un problema en Espa?a. Aunque la llegada de esas 30 millones de dosis no ser¨¢n uniformes en todo el trimestre, la media es de 330.000 al d¨ªa. Esta misma semana se han inoculado m¨¢s de 300.000 en una sola jornada, muchas de ellas ya en recintos no sanitarios. Y esto antes de la apertura de las infraestructuras ya preparadas.

La lucha contra el virus es ahora tambi¨¦n una lucha contra el reloj. Cada inyecci¨®n puede convertirse en una vida salvada cuando la cuarta ola va tomando forma. La incidencia acumulada comenz¨® a subir el 17 de marzo. Este s¨¢bado estaba en 151 casos por 100.000 habitantes en 14 d¨ªas, un leve descenso probablemente provocado por la infranotificaci¨®n de los festivos. Con la movilidad de la Semana Santa es previsible que siga subiendo de forma m¨¢s pronunciada, con una situaci¨®n hospitalaria que est¨¢ lejos de ser buena. El porcentaje de pacientes de covid en las UCI era seg¨²n el ¨²ltimo informe del 19,1%, lo que supone un riesgo ¡°alto¡±, seg¨²n el sem¨¢foro de Sanidad. Pero esta nueva onda pand¨¦mica cuenta con una diferencia con respecto a las anteriores: por primera vez habr¨¢ un porcentaje significativo de la poblaci¨®n vulnerable inmunizada. Esto, seg¨²n ha manifestado en m¨¢s de una ocasi¨®n Fernando Sim¨®n, portavoz de Sanidad en la pandemia, puede significar una ola menos letal.

En sendas entrevistas a EL PA?S, tanto la ministra de Sanidad, Carolina Darias, como el presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Vacunolog¨ªa, Am¨®s Garc¨ªa Rojas, eran tajantes al afirmar que la capacidad asistencial no va a lastrar el proceso. ¡°El sistema est¨¢ totalmente preparado. No tengo ninguna duda. El m¨²sculo del sistema son los profesionales, pero para que funcione necesitamos las vacunas¡±, aseguraba Garc¨ªa Rojas. Lo mismo piensa Jos¨¦ Mart¨ªnez Olmos, que fue director de Sanidad: ¡°Si ahora vamos con retraso es porque la Uni¨®n Europea y los gobiernos pecaron de cierta ingenuidad y pensaron que ser¨ªa f¨¢cil disponer de los millones de dosis necesarias. Pero una cosa es la investigaci¨®n y otra la producci¨®n. Ahora se empiezan a producir m¨¢s y las previsiones que plantean no parecen tan descabelladas. De no tener ninguna sorpresa, somos capaces de aplicarlas, ya se est¨¢ viendo¡±.

¡°Vamos justos de tiempo¡±

Alberto Infante, profesor de Salud Internacional de la Escuela Nacional de Sanidad, duda de si habr¨¢ personal suficiente para este reto, ya que la llegada no ser¨¢ uniforme, por lo que en mayo, y sobre todo junio, habr¨¢ que poner m¨¢s inyecciones que en abril. ¡°Vamos justos de tiempo porque, adem¨¢s en julio empiezan las vacaciones y hay menos sanitarios disponibles, as¨ª que este segundo trimestre es clave¡±, sintetiza.

La mayor¨ªa de comunidades, seg¨²n explica la Federaci¨®n de Asociaciones de Enfermer¨ªa Comunitaria y de Atenci¨®n Primaria (FAECAP), est¨¢n usando sobre todo enfermeras de hospitales y de atenci¨®n primaria para los centros de vacunaci¨®n que se est¨¢n poniendo en marcha. Algunas suman al personal estructural el que contrataron durante la primera ola y, en ocasiones, se est¨¢n ampliando turnos con remuneraci¨®n extra para esta labor. Todav¨ªa queda margen de maniobra. El sindicato Satse insiste en que hay unas 2.000 enfermeras en paro, a lo que se podr¨ªa sumar el refuerzo de las mutuas, la enfermer¨ªa militar y personal jubilado, algo a lo que por el momento se est¨¢ recurriendo espor¨¢dicamente, seg¨²n FAECAP.

M¨¢s all¨¢ del personal extra y de las infraestructuras habilitadas para la campa?a, varios expertos consultados inciden en que los centros de salud tienen que seguir siendo el eje de la vacunaci¨®n, aunque la apertura de vacun¨®dromos pueda ser ¨²til. ¡°Creo que la pertinencia del uso de grandes recintos radica, principalmente, en tres aspectos: log¨ªsticos, capacidad de la poblaci¨®n de transportarse con facilidad y baja reticencia a la vacunaci¨®n¡±, enumera Javier Padilla, m¨¦dico de primaria y autor de varios libros sobre el sistema sanitario. ¡°Creo que pueden ser ¨²tiles en contextos de poblaciones m¨®viles y que pueden llegar bien a cualquier lado y en un contexto de baja o nula reticencia. Genial para vacunar a personas j¨®venes, pero con gran capacidad para dejar fuera a quienes tengan alguna dificultad¡±, a?ade. A Padilla le genera dudas la poblaci¨®n en riesgo de exclusi¨®n, m¨¢s dif¨ªcil de localizar y para los que la atenci¨®n primaria deber¨¢ tener un papel ¡°central¡±.

Con informaci¨®n de Margot Molina, Isabel Vald¨¦s, Luc¨ªa Boh¨®rquez, Elisa Tasca, Pedro Gorospe, Silvia R. Pontevedra, Sonia Vizoso, Bernat Coll, Juan Navarro y Guillermo Vega.