Las muertes semanales por covid en Espa?a caen un 90% desde que empez¨® la vacunaci¨®n
El efecto de la inmunizaci¨®n y la ca¨ªda de la transmisi¨®n por las restricciones aceleran el descenso del n¨²mero de fallecidos, que baja a una media de 52 diarios
La vida empieza a ganar terreno al coronavirus. Los contagios siguen en niveles muy altos ¡ª173 casos por 100.000 habitantes¡ª, pero el avance de la vacunaci¨®n y las restricciones para frenar la circulaci¨®n del virus han amortiguado los efectos de la covid en el peor par¨¢metro de la pandemia: la cifra de fallecidos. Desde que empez¨® a surtir efecto la vacunaci¨®n a principios de a?o, coincidiendo, de hecho, con el pico de la tercera ola, los decesos a causa del virus han bajado dram¨¢ticamente. El efecto de la vacunaci¨®n, que protege de la enfermedad grave y la muerte, y la ca¨ªda de la transmisi¨®n por las limitaciones sociales impuestas, han acelerado el descenso del n¨²mero de fallecidos. Desde finales de enero, las muertes semanales por covid han ca¨ªdo un 90%.
Espa?a encaraba la tercera ola cuando llegaron las primeras vacunas aquel 27 de diciembre de 2020. La primera avanzadilla era anecd¨®tica, apenas unas 10.000 dosis que se distribuyeron por las residencias de ancianos, los centros m¨¢s castigados por el virus y los primeros en la lista de colectivos prioritarios a los que proteger. Aquellas vacunas requer¨ªan dos dosis y el primer pinchazo no empezaba a hacer efecto hasta 15 d¨ªas despu¨¦s de administrado, as¨ª que el mes de enero pas¨® entre dos aguas, sorteando el envite de la nueva ola y vacunando a cuentagotas con las escasas dosis que iban llegando. A finales de ese mes, justo cuando la tercera onda epid¨¦mica alcanzaba su pico ¡ª900 casos por 100.000 habitantes el 27 de enero¡ª, las primeras inyecciones empezaron a surtir efecto y las muertes, sobre todo en residencias, iniciaron un descenso.
Seg¨²n los datos del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), en la ¨²ltima semana de enero fallecieron 778 ancianos en las residencias a causa de la covid. Pero en los ¨²ltimos meses y con las residencias ya completamente protegidas, la cifra de muertes en estos centros se ha desplomado: seis decesos entre el 26 de abril y el 2 de mayo, la ¨²ltima semana con datos consolidados. ¡°Los casos que la tercera ola hab¨ªa generado se vieron en enero y febrero y eso ya no se pod¨ªa parar porque los contagios ya se hab¨ªan producido. No es hasta que empezamos a vacunar y pasa el tiempo para generar inmunidad, que caen los contagios y los casos en picado¡±, reflexiona Daniel L¨®pez-Acu?a, exdirector de Emergencias de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud.
La vacunaci¨®n en la poblaci¨®n general va m¨¢s lenta, pero los efectos de la protecci¨®n a los grupos de edad m¨¢s vulnerables ¡ªel 89% de los mayores de 60 tienen, al menos, una dosis puesta¡ª ya influyen en la curva global. Adem¨¢s de las residencias, los mayores de 80 ya han completado la pauta vacunal, y la cobertura con dos dosis en el grupo de 70 a 79 roza el 50%. Todo ello, unido a la ca¨ªda de la transmisi¨®n por las restricciones sociales impuestas ¡ªse producen menos contagios¡ª, ha impactado en el descenso del n¨²mero de muertes globales en Espa?a a causa de la covid: de 3.722 en la ¨²ltima semana de enero a 366 del 26 de abril al 2 de mayo, seg¨²n los datos consolidados de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiol¨®gica.
¡°En la poblaci¨®n general no tenemos coberturas vacunales suficientes para romper la transmisi¨®n, pero como la mortalidad global ven¨ªa muy vinculada a la edad, cuando cubrimos a los grupos etarios m¨¢s vulnerables, el impacto se va consolidando¡±, apunta Am¨®s Garc¨ªa, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Vacunolog¨ªa. En Espa?a se han inyectado 20,6 millones de dosis: el 30% de la poblaci¨®n ha recibido, al menos, un pinchazo, y el 13,7% (seis millones y medio de personas) ha completado la pauta vacunal.
Los expertos consultados aseguran que la campa?a de inmunizaci¨®n ha sido capital para bajar la mortalidad, pero no es el ¨²nico factor que ha contribuido a esta ca¨ªda. ¡°Adem¨¢s de la vacunaci¨®n, influyen las restricciones, que hacen caer los casos y, por tanto, las hospitalizaciones y las muertes¡±, valora Salvador Peir¨®, epidemi¨®logo de la Fundaci¨®n para el Fomento de la Investigaci¨®n Sanitaria y Biom¨¦dica de la Comunitat Valenciana (Fisabio). Tras la relajaci¨®n de medidas durante la Navidad, las comunidades volvieron a tomar medidas de control severas, como la limitaci¨®n de reuniones, horarios reducidos en la hosteler¨ªa y confinamientos auton¨®micos, entre otras. ¡°En las residencias, a partir de febrero, lo que vemos claramente es el efecto de las vacunas. En el resto de la poblaci¨®n es m¨¢s lento y vemos los dos factores mezclados: restricciones y vacunas. Pero a medida que avanza la vacunaci¨®n, cada vez hay menos gente mayor que sufre enfermedad grave. El 95% de los fallecidos en esta pandemia tienen m¨¢s de 60 a?os. Si los protegemos y nos libramos de esto, el patio cambia completamente¡±, sostiene Peir¨®.
Esa combinaci¨®n de vacunaci¨®n y medidas restrictivas para bajar la incidencia tambi¨¦n ha hecho caer las hospitalizaciones globales un 77%, aunque en cuidados intensivos, el ritmo es diferente. ¡°En las hospitalizaciones de UCI no tienen el mismo efecto porque ha existido un desplazamiento a edades m¨¢s j¨®venes y estancias m¨¢s largas¡±, avisa L¨®pez-Acu?a. Con la vacunaci¨®n, la edad de contagiados y hospitalizados se ha reducido: de 42 a 40 a?os los infectados y de 63 a 60 los pacientes de las UCI, seg¨²n Sanidad. ¡°Puede que est¨¦ ligado a que los j¨®venes suelen acudir m¨¢s tarde a los servicios sanitarios y llegan m¨¢s debilitados. Y la agresividad de las variantes tambi¨¦n es un elemento que hay que vigilar¡±, apunta Garc¨ªa. Coincide Peir¨®: ¡°Tenemos cierta percepci¨®n de que los casos que llegan a la UCI son ahora m¨¢s graves que antes y discutimos si puede ser por la variante brit¨¢nica, pero no se ha estudiado a¨²n¡±.
A menor edad de los contagios, menor riesgo de entrar en cuidados intensivos, pero las estancias de los grupos m¨¢s j¨®venes, matizan los intensivistas, est¨¢n siendo m¨¢s largas. Algunos, m¨¢s de 100 d¨ªas. Y ser¨¢ dif¨ªcil, agregan, vaciar las UCI. ¡°Est¨¢n m¨¢s tiempo porque son candidatos a todo: son muy j¨®venes y hay que luchar por ellos hasta el final. Las estancias m¨¢s largas son un efecto colateral de haber disminuido la mortalidad¡±, se?alaba hace unos d¨ªas a EL PA?S el jefe de UCI del Hospital Vall d¡¯Hebron de Barcelona, Ricard Ferrer.
Contador a cero
Seg¨²n el informe de datos del Ministerio de Sanidad, en los ¨²ltimos siete d¨ªas han fallecido 261 personas. Esto es, una media de 37 decesos al d¨ªa, pero estas cifras, aunque m¨¢s inmediatas, no son definitivas porque puede haber retrasos de notificaci¨®n que desvirt¨²en el c¨®mputo real. De hecho, solo los datos que recoge el Instituto de Salud Carlos III recopilados a trav¨¦s de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiol¨®gica y que llevan un ligero retraso en la actualizaci¨®n, contemplan informaci¨®n m¨¢s consolidada y fiable. Seg¨²n su ¨²ltimo dato, entre el 26 de abril y el 2 de mayo, hubo 366 muertes, unas 52 por d¨ªa. La tendencia, en cualquier caso, es descendente, pero falta recorrido para llegar a cero. ¡°Todav¨ªa no tenemos a las personas mayores de 60 totalmente cubiertas y la vacuna no funciona al 100%. Reduce el riesgo, pero no lo elimina¡±, justifica L¨®pez-Acu?a. Ejemplo de ello ha sido el caso de una anciana de 84 a?os vacunada en enero en la residencia San Prudencio de Vitoria, donde viv¨ªa, que ha fallecido a causa de la covid, seg¨²n inform¨® el lunes el Ayuntamiento de la ciudad. Un estudio de Sanidad revel¨® que la efectividad de la vacunaci¨®n en las residencias se sit¨²a entre el 81% y el 88%: los pinchazos han evitado un 71% de hospitalizaciones y un 82% de fallecimientos.
Bajar el contador de muertos a cero, apuntan los expertos, es, por ahora, una empresa imposible. M¨¢xime con la transmisi¨®n actual de casos. ¡°Los fallecidos que aparecen ahora son personas que se han muerto hace tiempo y se notifican ahora, o casos que vienen arrastrando un mes o dos en cuidados intensivos. Si los miras por fecha de contagio, la curva seguro que cambia¡±, se?ala Peir¨®. De hecho, los casos nuevos de muertes que notifica Sanidad cada d¨ªa ¡ª108, ayer¡ª no suelen ser con fecha de fallecimiento 24 horas antes, sino de d¨ªas o semanas anteriores y que las comunidades tardan en reportar.
¡°No podemos aceptar 80 o 50 muertes diarias. Hemos convertido la cifra en un par¨¢metro y no vemos las personas que hay detr¨¢s. Nos hemos anestesiado. En la medida en que tengamos la incidencia alta, tendremos un grado de mortalidad: necesitamos ver caer la incidencia por debajo de 25 casos por 100.000 habitantes para que se reduzcan m¨¢s las muertes¡±, alerta L¨®pez-Acu?a. Desde el inicio de la crisis sanitaria, el Ministerio de Sanidad ha contabilizado m¨¢s de 79.000 fallecidos con un diagn¨®stico confirmado de covid. Pero la cifra previsiblemente ser¨¢ mayor, ya que, al inicio de la pandemia, el acceso a las pruebas de detecci¨®n era muy limitado y muchas personas fallecieron sin un diagn¨®stico.
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