L¨ªderes republicanos tachan de ¡°inconstitucional¡± el plan de Biden que fuerza la vacunaci¨®n contra la covid
Los conservadores amenazan con demandar a la Administraci¨®n por obligar a los empleados federales a inocularse y a las grandes empresas a realizar test semanales
Un pu?ado de l¨ªderes republicanos han calificado este viernes de ¡°inconstitucional¡± la orden ejecutiva firmada por el presidente Joe Biden que obliga a los empleados federales y a los contratistas que negocien con el Gobierno a vacunarse. Los conservadores ya han amenazado con demandar a la Administraci¨®n por lo que consideran un atentado contra las libertades individuales. ¡°Adelante¡±, respondi¨® esta ma?ana el mandatario en un tono desafiante. El mayor malestar entre los cr¨ªticos de la nueva estrategia de vacunaci¨®n para atajar los brotes de covid debido a la variante delta lo ha provocado la instrucci¨®n que exige a las empresas con m¨¢s de 100 trabajadores a inmunizar a la plantilla o someterla a test semanales. Las medidas afectar¨ªan a 100 millones de personas.
La resaca del agresivo plan anunciado este jueves por Biden ha estado marcada por el alud de cr¨ªticas del n¨²cleo republicano. El gobernador de Texas, Greg Abbott, asegur¨® que su Estado ¡°est¨¢ trabajando para detener esta toma de poder¡± que supone ¡°un asalto a las empresas privadas¡±. El gobernador de Wyoming, Mark Gordon, advirti¨® al fiscal general estatal de que se prepare ¡°para tomar todas las medidas¡± necesarias para bloquear la ¡°extralimitaci¨®n inconstitucional del poder ejecutivo de esta Administraci¨®n¡±. En la misma l¨ªnea, el gobernador Brian Kemp, de Georgia, se comprometi¨® a poner en pr¨¢ctica ¡°todas las opciones legales disponibles¡± para frenar ¡°esta extralimitaci¨®n descaradamente ilegal¡±.
En una visita de Biden este viernes a un instituto en el centro de Washington, el mandatario asegur¨® estar ¡°decepcionado¡± con varios gobernadores republicanos por sus actitudes ¡°tan arrogantes¡±, relacionadas con la salud de los estudiantes. Al menos nueve Estados conservadores, entre ellos Florida, Texas y Arizona, han emitido ¨®rdenes ejecutivas para prohibir el uso de la mascarilla dentro de la sala de clase de cara al retorno presencial a las aulas, a pesar de que los Centros para el Control de Enfermedades y Prevenciones (CDC, por sus siglas en ingl¨¦s) recomiendan lo contrario.
De la bater¨ªa de medidas anunciadas por la Administraci¨®n Biden, la que ha generado mayor malestar entre los republicanos es la que obliga a las empresas con m¨¢s de 100 empleados a realizar test de covid semanalmente a sus trabajadores, una orden que afectar¨¢ a 80 millones de personas. La normativa se promulgar¨¢ a trav¨¦s de la Administraci¨®n de Seguridad y Salud Ocupacional y conlleva multas de hasta 14.000 d¨®lares en caso de incumplimiento, seg¨²n un empleado de la Administraci¨®n citado por AP. La presidenta del Comit¨¦ Nacional Republicano, Ronna McDaniel, tambi¨¦n tild¨® de ¡°inconstitucionales¡± las nuevas directrices y adelant¨® que su comit¨¦ va a demandar al Gobierno ¡°para proteger a los estadounidenses y sus libertades¡±.
Entre los trabajadores, la nueva exigencia sanitaria que ata?e a las grandes empresas ha provocado respuestas dispares. Becky Pringle, presidenta de la Asociaci¨®n Nacional de Educaci¨®n (NEA, por sus siglas en ingl¨¦s), la organizaci¨®n de empleados profesionales m¨¢s grande de EE UU, dijo en un comunicado que ¡°apoya firmemente los requisitos de vacunaci¨®n o pruebas de covid¡± en las plantillas superiores al centenar de empleados e hizo un llamamiento a que los Estados exijan que los educadores est¨¦n inoculados. Por su parte, Everett Kelley, presidente de la mayor federaci¨®n sindical de trabajadores federales (AFGE, por sus siglas en ingl¨¦s), se mostr¨® receloso: ¡°Esperamos negociar este cambio antes de la implementaci¨®n¡±.
Obligados a vacunarse
Los empleados del poder ejecutivo, incluida la Casa Blanca, y los de todas las agencias federales tienen 75 d¨ªas de plazo para vacunarse o arriesgan sanciones disciplinarias, incluido el despido, inform¨® la Casa Blanca. Los cerca de 17 millones de trabajadores de centros de salud que reciben fondos federales para financiar el Medicare o Medicaid tambi¨¦n est¨¢n obligados a vacunarse. Otros departamentos del Gobierno han establecido por su cuenta que todos los empleados deben estar inmunizados, como es el caso del Pent¨¢gono, que desde finales de agosto ha forzado a los militares a recibir las dosis.
Los brotes por la variante delta han cambiado completamente el escenario en la potencia mundial. El 4 de julio, el D¨ªa de la Independencia, Biden afirmaba que Estados Unidos estaba ¡°m¨¢s cerca que nunca¡± de independizarse del virus, pero este jueves reconoci¨® que el pa¨ªs est¨¢ atravesando un ¡°tramo dif¨ªcil, y podr¨ªa durar un tiempo¡±. En comparaci¨®n con la misma fecha del a?o anterior, los nuevos contagios diarios se han disparado un 300% y las muertes son casi el doble. Todav¨ªa hay cerca de 80 millones d estadounidenses que no se quieren vacunar. M¨¢s de 208 millones han recibido al menos una dosis y 177 millones est¨¢n completamente vacunados, un poco m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n elegible.
Para hacer frente a la nueva ola, la Administraci¨®n dem¨®crata estableci¨® este jueves una hoja de ruta para atajar la propagaci¨®n de la variante delta: aumentar las pruebas del virus en las escuelas; vacunar a los no vacunados; ofrecer una dosis de refuerzo a los ya inmunizados; proteger la recuperaci¨®n econ¨®mica; mejorar la atenci¨®n de las personas con covid-19; e inventar a las empresas privadas para que promulguen pol¨ªticas de vacunaci¨®n y medidas sanitarias m¨¢s estrictas.
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