La guerra cultural incendia las escuelas de Estados Unidos
Amenazas de muerte, insultos y acoso son algunas de las reacciones de padres enfadados contra miembros de las juntas escolares debido a los mandatos sanitarios por la covid o los nuevos enfoques de equidad racial en la ense?anza
La guerra cultural que se libra hoy en Estados Unidos tiene un nuevo frente: las juntas escolares de los colegios p¨²blicos. Son reuniones en las que un pu?ado de vecinos de un distrito discuten asuntos como el salario de los profesores o los servicios de aseo. Sin e...
La guerra cultural que se libra hoy en Estados Unidos tiene un nuevo frente: las juntas escolares de los colegios p¨²blicos. Son reuniones en las que un pu?ado de vecinos de un distrito discuten asuntos como el salario de los profesores o los servicios de aseo. Sin embargo, hace un a?o que, en distintos rincones del pa¨ªs, se han convertido en el escenario de protestas, a veces violentas, lideradas por padres en contra de la ¡°agenda pol¨ªtica t¨®xica¡± que incluye el uso obligatorio de la mascarilla en las aulas, los nuevos enfoques de equidad racial en la ense?anza o las pol¨ªticas para integrar a las personas transg¨¦nero.
Varios miembros de juntas escolares han recibido en los ¨²ltimos meses amenazas de muerte, de violaci¨®n, insultos y acoso dentro y fuera de las sesiones escolares que, desde octubre, son monitorizadas por agentes de seguridad por orden del Departamento de Justicia. Entre los propios miembros de las juntas se han producido bandos y es com¨²n ver a la mitad llevando mascarilla y a la otra no, para dejar claro a cu¨¢l pertenecen. Es tal el nivel de politizaci¨®n del debate que grupos conservadores y progresistas han desembolsado grandes sumas de dinero en las contiendas de las juntas para asegurar que su posici¨®n consiga la mayor representatividad posible.
En este ins¨®lito escenario, varios pol¨ªticos de derechas se han apropiado del mensaje de los ¡°derechos de los padres¡± para sacar r¨¦dito electoral. Hace apenas unas semanas el republicano Glenn Youngkin se alz¨® como gobernador de Virginia agitando la bandera del ¡°adoctrinamiento izquierdista¡± en las aulas. Fue la primera vez en 12 a?os que los dem¨®cratas perd¨ªan en un Estado que result¨® decisivo en el triunfo de Joe Biden en 2020 . Los republicanos han descubierto una grieta que cruza todo el mapa nacional para conquistar el voto de los padres indignados de cara a las elecciones legislativas del pr¨®ximo noviembre, cuando los conservadores intentar¨¢n recuperar el control de la C¨¢mara de Representantes y del Senado.
El d¨ªa en que el ingeniero y profesor universitario Sami Al-Abdrabbuh sali¨® reelecto como miembro de la junta escolar de Corvallis (Oreg¨®n), en mayo, un individuo se acerc¨® hasta su barrio para advertir a sus vecinos de que lo iba a asesinar. Ese mismo d¨ªa, apareci¨® un cartel de campa?a del candidato perforado por varias balas en un campo de tiro. ¡°Eso me perturb¨®¡±, comenta por tel¨¦fono Al-Abdrabbuh. El profesor acudi¨® a la polic¨ªa y cambi¨® su rutina de regreso a casa por miedo. Despu¨¦s de contar su historia a The New York Times, donde explicaba cu¨¢nto le gustaba ser parte de la comunidad escolar, pero que no quer¨ªa ¡°morir por ello¡±, el acoso aument¨® y decidi¨® instalar c¨¢maras de seguridad fuera de su casa. Hay padres que tambi¨¦n aseguran haber recibido amenazas de muerte, aunque son un grupo minoritario en este complejo panorama.
Al-Abdrabbuh explica que ¡°lo que est¨¢ ocurriendo¡± se le hace ¡°muy raro¡± porque normalmente ¡°la gente que est¨¢ en desacuerdo lo expone c¨ªvicamente¡±. Sin embargo, ¡°lo que est¨¢ ocurriendo¡± lleva cocin¨¢ndose un tiempo. Para empezar, la decisi¨®n de mantener las escuelas cerradas durante el pasado verano-oto?o en las localidades dem¨®cratas ¡ªmientras Trump presionaba para que volvieran las clases presenciales¡ª indign¨® a muchos padres. A finales de 2020 los padres comenzaron a participar m¨¢s activamente en las juntas escolares para pedir explicaciones sobre las medidas sanitarias y se unieron a grupos de Facebook donde compart¨ªan sus frustraciones. La presi¨®n que ejercieron algunos en las juntas fueron fruct¨ªferas, lo que anim¨® a los padres a involucrarse m¨¢s y las reuniones se empezaron a extender hasta la una o dos de la ma?ana, debido a que cientos de ellos hac¨ªan uso de la palabra.
Adem¨¢s, en los ¨²ltimos a?os, varios distritos, en su mayor¨ªa progresistas, han aprobado normativas para proteger los derechos de los alumnos transg¨¦nero y han incluido actividades para educar en la ¡°diversidad, igualdad e inclusi¨®n¡± en temas de raza y g¨¦nero. Algunas de estas iniciativas han provocado el rechazo de los conservadores de cada localidad, que hasta ahora no hab¨ªan unificado su discurso. Sin embargo, el ¨²ltimo a?o se han creado un centenar de grupos en defensa del ¡°derecho de los padres¡±, donde comparten sus temores y rabia. Han llegado a tildar de ¡°marxistas¡±, ¡°ped¨®filos¡± y ¡°traidores¡± a los miembros de las juntas que piensan distinto, como se puede ver en los v¨ªdeos que se han viralizado en las redes.
Action 1776 es una de esas nuevas organizaciones. Su objetivo es restablecer la Comisi¨®n 1776, creada durante la Administraci¨®n de Donald Trump para promover una ¡°educaci¨®n patri¨®tica¡±. Joe Biden la disolvi¨® en su primer d¨ªa en la Casa Blanca. La comisi¨®n fue una respuesta al ¡°Proyecto 1619¡å de The New York Times, un an¨¢lisis hist¨®rico sobre c¨®mo la esclavitud molde¨® las instituciones americanas en todos los ¨¢mbitos con motivo del 400? aniversario de la llegada de los primeros africanos esclavizados a EE UU.
¡°No es exacto decir que los padres est¨¢n protestando contra la ense?anza sobre estos temas. Est¨¢n en contra de la promoci¨®n descarada de una agenda ideol¨®gica radical que va en contra de sus valores y los valores sobre los que se construy¨® esta naci¨®n¡±, apunta Adam Waldeck, presidente de Action 1776. A su juicio, lo que encendi¨® esta batalla fue que, durante la pandemia, los padres pudieron ver en casa lo que le estaban ense?ando a sus hijos y quedaron ¡°horrorizados¡±.
En distritos de estados conservadores como Texas, Kansas y Carolina del Sur han eliminado temporalmente de los programas escolares decenas de biograf¨ªas de personajes LGTBIQ, o ejemplares como El cuento de la criada, de Margaret Atwood, y Ojos azules, de la Premio Nobel de Literatura Toni Morrison, protagonista involuntaria de las elecciones de Virginia por la cruzada del republicano contra su literatura. ¡°Creo que deber¨ªamos arrojar esos libros al fuego¡±, afirmaron dos miembros de una junta escolar de Spotsylvania (Virginia), sobre unos ejemplares con contenidos ¡°sexualmente expl¨ªcitos¡±.
El pasado oto?o Scott Mineo, un analista de seguridad blanco de 49 a?os, fund¨® Padres Contra la Teor¨ªa Cr¨ªtica de la Raza (PACT, por sus siglas en ingl¨¦s), un grupo que se enfrenta a la doctrina acad¨¦mica que plantea que el esclavismo en EE UU es el origen del racismo sist¨¦mico a¨²n presente en la sociedad. No se ense?a en las escuelas, sino en el ¨¢mbito universitario, pero los colegios de todo el pa¨ªs, especialmente desde el asesinato de George Floyd en mayo de 2020, se han embarcado en iniciativas para promover la justicia racial, adoptando medidas como una mayor contrataci¨®n de personal ¨¦tnicamente m¨¢s diverso, capacitaciones a los profesores sobre los prejuicios raciales y la inclusi¨®n de libros de autores afroamericanos.
Mineo, y las decenas de miles de seguidores de este tipo de grupos, cree que las escuelas p¨²blicas le est¨¢n ense?ando a los ni?os que ¡°los blancos son impl¨ªcitamente sesgados e inherentemente racistas, incluso si no se dan cuenta¡±. ¡°Nadie tiene derecho a meternos esta basura por la garganta y decirnos que lo creamos o seremos cancelados. La discusi¨®n honesta sobre este tema es bienvenida, la aceptaci¨®n forzosa no lo es¡±, defiende Mineo. Al-Abdrabbuh dice comprender a los padres enfadados porque los curr¨ªculos de ahora son distintos a lo que ellos sol¨ªan aprender. ¡°Pero tambi¨¦n entiendo que tienen que ser conscientes de que es inaceptable que la educaci¨®n p¨²blica sea para la comunidad o la raza privilegiada, y no para todas las culturas¡±.
El Departamento de Justicia calific¨® en octubre los hechos de los ¨²ltimos meses como ¡°un alarmante pico de acoso, intimidaci¨®n y amenazas de violencia¡± contra miembros de juntas escolares. El fiscal general de Estados Unidos, Merrick B. Garland, orden¨® al FBI y a fiscales federales que trabajaran con los agentes de la ley locales para monitorear las amenazas contra las personas que trabajan en los 14.000 distritos escolares p¨²blicos del pa¨ªs. La Asociaci¨®n Nacional de Juntas Escolares compararon algunos de los incidentes con el terrorismo dom¨¦stico, aunque se retractaron despu¨¦s de que el mensaje desencadenara una reacci¨®n violenta en algunas de sus miembros.