De un ¡®post¡¯ de Facebook al banquillo de un juicio can¨®nico
El obispo de C¨¢diz, Rafael Zornoza, nombra un tribunal ¡°ad hoc¡± para juzgar a un sacerdote por criticar en redes su pol¨ªtica de despidos y desahucios
No hace tantos a?os que el zagu¨¢n del obispado de C¨¢diz era un ascua de luz, ennegrecido por el calor de tanta vela que los vecinos pon¨ªan al peque?o cuadro de la virgen del Carmen. Era, quiz¨¢s, la ¨²ltima reminiscencia viva que quedaba del pasado del edificio como hospital de mujeres. Ya apenas quedan candelas ni devotos, los gestores pensaron que ser¨ªa mejor poner ¡°m¨¢quinas de echar monedas porque as¨ª sacaban m¨¢s ingresos¡±, resume una trabajadora a la que echaron. La an¨¦cdota resume bien la pol¨ªtica econ¨®mica del ultraconservador obispo Rafael Zornoza, seg¨²n sus cr¨ªticos, sustentada en despidos, desahucios y represalias laborales, tambi¨¦n contra sus propios curas. Uno de ellos, Rafael Vez, se ha sentado este jueves en el banquillo, despu¨¦s de que el prelado hubiera nombrado un tribunal expresamente para juzgar al sacerdote por denunciar en redes sociales ¡°abusos y arbitrariedades¡± econ¨®micas, seg¨²n denuncian fuentes de la defensa.
La puerta donde los vecinos rezaban al cuadro ni siquiera estaba abierta la ma?ana de este jueves. Un grupo de unas 15 personas del Grupo Cristiano de Reflexi¨®n-Acci¨®n de C¨¢diz y Bah¨ªa se congregaban a las puertas del obispado para mostrar su apoyo a Vez, antes de que se enfrentase a la primera de las cinco vistas orales ¡ªuna por semana¡ª ante el Tribunal Eclesi¨¢stico de C¨¢diz. Al sacerdote le imputan dos delitos contra la ley divina, relacionados con el quinto y octavo mandamiento sobre la dignidad de las personas y la mentira, y otros cuatro contra la ley can¨®nica, por desobediencia, falsedad y suscitar odio contra el prelado. El promotor de justicia ¡ªequiparable a la figura del fiscal de los procesos ordinarios¡ª acusa a Vez de ¡°divulgar informaciones (¡) por medio de sus comentarios, opiniones, declaraciones y cartas abiertas que atentan contra la buena fe y dignidad del obispo¡± y que causan ¡°grave esc¨¢ndalo entre los fieles¡±, seg¨²n ha justificado en los hechos de la demanda. Y, como castigo, le piden una suspensi¨®n en el tiempo que dure la pena, que retire ¡°ipso facto¡± sus comentarios y que pida perd¨®n p¨²blicamente.
Pero el juicio es confuso de antemano, dado el riesgo de que se vulnere ¡°la tutela judicial efectiva¡± de Vez, seg¨²n denuncia Xisco Cardona, defensa del sacerdote, doctor en Derecho Can¨®nico y abogado del Tribunal de la Rota. Al ser un proceso que enfrenta a Zornoza con uno de sus subordinados, el caso plantea dudas de si deb¨ªa haberse llevado ante un tribunal independiente, como ocurri¨® con el proceso can¨®nico que enfrent¨® a la orden de los Carmelitas con el obispo de C¨¢diz a cuentas de la titularidad de una iglesia gaditana y que, por cierto, ganaron los primeros. En este caso, la sospecha contra el tribunal se agrava, despu¨¦s de que haya sido el propio Zornoza el que se haya encargado de nombrar ¡°ad hoc¡± ¡ªseg¨²n apunta Cardona¡ª para esta causa tanto a sus tres miembros, procedentes de Sevilla, como al procurador de justicia, Rafael Rabasco, sacerdote de C¨®rdoba, como a?ade Cardona. El obispado de C¨¢diz ha denegado responder a EL PA?S sobre las dudas que suscita el juicio, ya que ¡°el proceso permanece abierto¡±.
¡°Abuso de poder¡±
¡°Se han conculcado los m¨¢s b¨¢sicos derechos de Rafael Vez. Venimos a este tribunal buscando la verdad y la justicia. Esto no va contra la Iglesia, sino todo lo contrario, queremos defender a la Iglesia del abuso de poder y de arbitrariedad¡±, ha a?adido el abogado del cl¨¦rigo. Por si el proceso no plantease suficientes dudas, a la defensa le han denegado de antemano la mayor¨ªa de las preguntas que puede hacer a los testigos ¡ªen los procesos can¨®nicos se tienen que entregar previamente¡ª. En la primera vista del juicio ha declarado el propio acusado. Vez sostiene que las cr¨ªticas que ha vertido contra la gesti¨®n de su superior no afectan ni al magisterio, ni a la fe ¡ªprotegidos en el derecho can¨®nico¡ª, sino a cuestiones temporales sobre c¨®mo se administran los bienes econ¨®micos. ¡°Se ha empe?ado en que eso es delito¡±, explica el sacerdote a EL PA?S. Adem¨¢s, asegura que esas disconformidades ¡ªrelatadas a trav¨¦s de su perfil de Facebook¡ª se produjeron como respuesta a informaciones publicadas en medios previamente, relativas a los despidos de trabajadores y desahucios que acumula Zornoza.
La relaci¨®n entre Zornoza y Vez se termin¨® de torcer a partir de junio de 2019, despu¨¦s de que el entonces ec¨®nomo, Antonio Diufa¨ªn, se vanagloriase de sanear las cuentas de la Di¨®cesis y de que el obispo diese ¡°un trato inhumano¡± a un sacerdote acusado de robar en su iglesia, seg¨²n explica Vez. El entonces p¨¢rroco de Conil de la Frontera lanz¨® una bater¨ªa de preguntas en su perfil, relativas al destino de diversas partidas econ¨®micas del Obispado, ante la indignaci¨®n que le produjo que, de forma simult¨¢nea, la instituci¨®n estuviese despidiendo a diversos trabajadores.
Airado por estas cr¨ªticas, el prelado destituy¨® a Vez de sus cargos ¡ªera tambi¨¦n formador del Seminario y maestro de ceremonias de la Catedral¡ª y le nombr¨® capell¨¢n del hospital Universitario de Puerto Real, pese a las dolencias cr¨®nicas que Vez acredit¨® sufrir y que pon¨ªan en riesgo su salud, en caso de enfermar por coronavirus. Con el inicio de la denuncia penal can¨®nica, en noviembre de 2020, Zornoza suspendi¨® adem¨¢s a Vez cautelarmente como sacerdote, lo que le impide celebrar misas o impartir los sacramentos. Adem¨¢s, eso ha llevado a que el cura vea mermado su salario al m¨ªnimo interprofesional, unos 600 euros menos de lo que cobraba, justo en unos meses en los que ya lleva gastados ¡°unos 30.000 euros¡± en su defensa jur¨ªdica.
No es la primera vez que la pol¨ªtica econ¨®mica de Zornoza acaba, indirectamente, en los tribunales, en este caso ordinarios, desde que lleg¨® a la di¨®cesis de C¨¢diz y Ceuta en 2011. De los m¨¢s de 20 despidos ¡ªsolo de las oficinas centrales del Obispado¡ª que suma el prelado, buena parte de ellos han acabado en procesos judiciales que han acabado por dar la raz¨®n a los trabajadores, otros a¨²n siguen enredados en recursos a instancias superiores. Fue el caso de Lola Mac¨ªas, bibliotecaria del Seminario, a la que el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa dio la raz¨®n. A eso se suman otras denuncias por desahucios de locales y viviendas. O la veintena de sacerdotes que han acabado march¨¢ndose de C¨¢diz o seculariz¨¢ndose, seg¨²n apunta un cura que asegura haber sufrido estas pr¨¢cticas.
Adem¨¢s de este proceso can¨®nico, Vez se querell¨® contra el obispo en un juzgado ordinario de C¨¢diz ¡ªel 3 de Instrucci¨®n¡ª por presuntos delitos de injurias y calumnias. El caso ha acabado archivado hasta en dos ocasiones y est¨¢ a la espera de que se resuelva un nuevo recurso presentado por el abogado del sacerdote. Ahora, el cl¨¦rigo no tiene grandes esperanzas en que el juicio can¨®nico que le sienta en el banquillo acabe muy bien, pero s¨ª conf¨ªa en que acabe ¡°anulado¡±, por instancias superiores eclesi¨¢sticas ante las supuestas irregularidades. De momento, Rafael Vez tiene claro que lo suyo ya es mucho m¨¢s que un proceso contra ¨¦l: ¡°Est¨¢ en juego el derecho a la libertad de disentir en lo que se puede opinar¡±.
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