Colombia logra un avance hist¨®rico al despenalizar el aborto

Ninguna mujer colombiana podr¨¢ volver a ser juzgada por interrumpir su embarazo hasta la semana 24. La Corte Constitucional del pa¨ªs ha decidido, por cinco votos a favor y cuatro en contra, retirar el delito de aborto del c¨®digo penal, aunque no ha logrado una mayor¨ªa para la despenalizaci¨®n total. El movimiento feminista, a trav¨¦s de la agrupaci¨®n de organizaciones Causa Justa, pidi¨® a la Corte hace un a?o y medio poner fin a la lista de mujeres que son criminalizadas por abortar, unas 400 cada a?o, con penas que van de los 16 a los 54 meses de c¨¢rcel. El fallo coloca a Colombia entre los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina con derechos sexuales y reproductivos m¨¢s amplios. Los grupos feministas que promovieron la sentencia buscan eliminar el delito en todos los casos.

La lucha de las mujeres del continente ha vivido un despertar imparable en los ¨²ltimos a?os. La decisi¨®n de este lunes llen¨® los alrededores de la Corte en Bogot¨¢ con cientos de personas que han celebrado el fallo: ¡°?Am¨¦rica Latina ser¨¢ toda feminista!¡±. Otros pa¨ªses, como Argentina o M¨¦xico, tambi¨¦n rescataron la interrupci¨®n del embarazado del estigma, la condena y el rechazo para convertirlo en un derecho de las mujeres en los ¨²ltimos meses. Pero el delito a¨²n persiste en algunos Estados mexicanos y fuera de las 14 semanas que establece la ley en argentina para el aborto libre. Colombia ha dejado atr¨¢s la criminalizaci¨®n de las mujeres para convertirse en uno de los pa¨ªses del mundo con un plazo para el aborto legal m¨¢s amplio. Pa¨ªses europeos contemplan la interrupci¨®n voluntaria hasta la semana 12, como Francia, o la 14, como Espa?a. La Corte Constitucional inform¨® del fallo en un comunicado en el que ¡°exhort¨®¡± al Congreso y al Gobierno de Colombia a tomar las decisiones legislativas pertinentes en el menor tiempo posible para regular el acceso al aborto seguro.

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COLOMBIA despenaliza el ABORTO | EL PA?S

Hasta ahora en Colombia conviv¨ªa el derecho al aborto en tres causales -violaci¨®n, malformaci¨®n del feto incompatible con la vida o riesgo para la salud f¨ªsica o mental de la mujer-, aprobado en 2006, con el delito en caso de interrupci¨®n del embarazo fuera de estos casos. Pero en la pr¨¢ctica, la posibilidad de una condena ha frenado el acceso al aborto legal y seguro. En especial entre las mujeres m¨¢s vulnerables. El miedo a ser denunciadas separ¨® a lo largo de estos 15 a?os a miles de mujeres de las cl¨ªnicas legales, incluso encontr¨¢ndose dentro de las causales. La mayor¨ªa de las demandas por el delito de aborto han partido del propio sistema de salud -entre el 59 y el 70% de las denuncias son de sanitarios- lo que siempre mand¨® un mensaje que se ley¨® como un ¡°aqu¨ª no vengan¡±, explica Mariana Ardila, abogada de Women¡¯s Link, una de las organizaciones que integran Causa Justa.

El delito incluido hasta hoy en el c¨®digo penal -y que continuar¨¢ para quienes aborten fuera del plazo establecido teniendo en cuenta las tres causales- apuntaba en dos direcciones: a la mujer y al ejecutor del aborto, lo que gener¨® un rechazo generalizado entre los sanitarios a practicar interrupciones. Entre los a?os 2006 y 2019, m¨¢s 5.700 mujeres tuvieron que enfrentarse a la justicia. Las demandantes han defendido a lo largo de estos meses que el delito no protege la vida en ning¨²n caso. Tampoco frena los abortos. Lo que consigue la criminalizaci¨®n es apartar a las mujeres del sistema de salud para buscar m¨¦todos o cl¨ªnicas ilegales que ponen en peligro su vida. Ahora solo ser¨¢ delito despu¨¦s de la semana 24 siempre que no se ajuste a las causales.

Hoy, como hace 15 a?os, ha sido la justicia quien ha dado respuesta a la lucha del movimiento feminista por imponer el derecho al aborto en la agenda del pa¨ªs. ¡°Ganan las mujeres¡±, aseguraron las demandantes tras conocerse la decisi¨®n. Los sucesivos gobiernos colombianos nunca han entrado de lleno a legislar un tema que ni consideran prioritario ni les resulta beneficioso por la controversia que genera en la calle. Colombia es un Estado laico pero profundamente religioso. Una encuesta de 2017 revelaba que el 97% de los ciudadanos creen en Dios. Las diferentes iglesias, especialmente la cat¨®lica y la evang¨¦lica, mantienen todav¨ªa un enorme poder sobre los creyentes, a los que empujan a una lucha sin cuartel contra el aborto. En las manifestaciones de estos meses en contra de la despenalizaci¨®n no era extra?o ver a grupos rezando el rosario.

Pero la sociedad tambi¨¦n ha cambiado desde 2006, cuando los jerarcas de la iglesia amenazaban con la excomuni¨®n a los magistrados de la Corte si votaban a favor del aborto. Hoy apenas un 20% de los colombianos aprueba que las mujeres vayan a la c¨¢rcel por abortar. Y aunque los ataques y las presiones en contra de la despenalizaci¨®n han arreciado estos d¨ªas, incluso para el movimiento feminista ha sido una sorpresa la escasa presencia de los llamados grupos provida. M¨¢s numerosas, m¨¢s festivas y m¨¢s ruidosas han sido las concentraciones a favor que, en muchas ocasiones, como este lunes, ti?eron de verde los alrededores de la Corte. El camino, sin embargo, no ha acabado. ¡°Seguiremos insistiendo hasta que deje de usarse este delito que es injusto, ineficaz y contraproducente¡±, aseguran desde Causa Justa.

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