Mar¨ªa Sevilla, expresidenta de Infancia Libre, cumple ya condena en un centro de inserci¨®n social por sustracci¨®n de menores

Mar¨ªa Sevilla, quien fuera la presidenta de la asociaci¨®n Infancia Libre, ingres¨® este lunes en un centro de inserci¨®n social para cumplir su condena, seg¨²n confirman fuentes del Tribunal Superior de Justicia madrile?o. Est¨¢ sentenciada a dos a?os y cuatro meses de c¨¢rcel por sustracci¨®n de menores y a la retirada de cuatro a?os de la patria potestad de su hijo, que actualmente tiene 14. Sevilla retuvo al ni?o durante m¨¢s de un a?o y mantuvo oculto su paradero para evitar entregarlo a su padre, quien ten¨ªa la custodia desde final de 2017 y al que ella acusa de abusos sexuales al ni?o. La justicia no ha considerado probados dichos abusos y su expareja, Rafael Marcos, los ha negado en todo momento. Sevilla, que asegura haber actuado para proteger a su hijo, fue detenida en marzo de 2019. Actualmente est¨¢ pendiente de la decisi¨®n del Gobierno sobre el indulto que pidi¨® el pasado diciembre y que apoyan 181 colectivos sociales, entre ellos conocidas organizaciones feministas.

La citaci¨®n para entrar voluntariamente en prisi¨®n lleg¨® unos meses despu¨¦s de que el Tribunal Supremo desestimara su recurso de casaci¨®n, y de que un juzgado rechazara su petici¨®n de esperar a que el Ejecutivo decida sobre su indulto antes de su entrada en la c¨¢rcel. Los centros de inserci¨®n social son establecimientos penitenciarios para reclusos que cumplen la pena en r¨¦gimen abierto o que est¨¢n en procesos de reinserci¨®n. Fuentes penitenciarias se?alan que Sevilla est¨¢ pendiente de clasificaci¨®n para determinar si empieza a cumplir la condena en segundo grado (r¨¦gimen cerrado) o tercer grado (semilibertad). Mientras tanto, est¨¢ en r¨¦gimen cerrado en un centro de Madrid, seg¨²n explica Consuelo ?lvarez, de la Federaci¨®n de Asociaciones de Mujeres y Menores Resilientes de la Violencia de G¨¦nero, una de las organizaciones que pide la medida de gracia. El Ministerio de Justicia est¨¢ tramitando su petici¨®n de indulto, que se registr¨® el pasado diciembre.

Los inicios del caso se remontan a 2012, cuando la Fiscal¨ªa inici¨® actuaciones despu¨¦s de que Sevilla, durante el proceso de familia en el que deb¨ªa decidirse la custodia, dijera que su madre le hab¨ªa contado que el ni?o hab¨ªa relatado abusos por parte del padre. Comenz¨® as¨ª un largu¨ªsimo recorrido judicial que dura hasta hoy. Los procedimientos por abusos han sido sobrese¨ªdos. Sevilla est¨¢ a¨²n pendiente del Tribunal Constitucional, al que recurri¨® despu¨¦s del archivo de una denuncia por abusos que present¨® en 2020, ¡°tras recibir informes m¨¦dicos¡±, porque considera que la declaraci¨®n de su hijo no cont¨® con las suficientes garant¨ªas.

Arresto en Cuenca

Respecto al procedimiento de familia, en noviembre de 2016, sobrese¨ªdas las actuaciones penales, la custodia le hab¨ªa sido adjudicada a Sevilla, con un r¨¦gimen de visitas para el padre los fines de semana alternos que no lleg¨® a hacerse efectivo. En diciembre de 2017, despu¨¦s de que la madre se hubiera llevado al ni?o de Madrid a Granada y no hubiera respetado las visitas, se le otorg¨® a Marcos.

El juzgado que en 2020 la conden¨® en primera instancia por sustracci¨®n considera probado que no entreg¨® al menor a su padre, ¡°manteniendo oculto su paradero, tanto a ¨¦l, como al propio juzgado, lo que consigui¨® mudando su residencia y la del menor por diferentes puntos de Espa?a¡±. Acabaron en una finca de Villar de Ca?as, en la provincia de Cuenca. La madrugada del 30 de marzo de 2019, la polic¨ªa entr¨® en la vivienda, la detuvo y se llev¨® al ni?o, que desde entonces vive con su padre. Marcos no le ve¨ªa desde 2016.

A partir del arresto de Sevilla hubo un estallido medi¨¢tico. En cuesti¨®n de meses trascendieron los casos de otras tres madres relacionadas con Infancia Libre ¡ªasociaci¨®n de defensa de los derechos de los menores¡ª, que fueron detenidas o llamadas a declarar en el marco de una investigaci¨®n tras las denuncias de los padres, que aseguraban que hab¨ªan retenido a sus hijos y que los hab¨ªan acusado falsamente de abusos sexuales vali¨¦ndose de informes elaborados por los mismos profesionales, que avalaban dichos abusos. La unidad de la Polic¨ªa Nacional adscrita a los juzgados de la Plaza de Castilla lleg¨® a acusar a esta entidad de ¡°organizaci¨®n criminal¡±, pero la Fiscal¨ªa Provincial de Madrid archiv¨® la causa, al no apreciar datos objetivos que asegurasen que funcionaba como organizaci¨®n il¨ªcita.

Sevilla afirma que en todo momento ha defendido el bienestar de su hijo. El 1 de febrero, en una rueda de prensa junto a organizaciones feministas que reclamaban su indulto, esta mujer criticaba la actuaci¨®n de la justicia. ¡°Lo cierto es que cada vez que hemos pedido que se proteja a mi hijo y que hemos pedido ayuda o auxilio judicial se nos ha denegado y se nos ha castigado y machacado por pedirla¡±, explic¨®. Dijo que no ten¨ªa miedo de entrar en prisi¨®n, sino de que su hijo ¡°se queda en una situaci¨®n de riesgo y en una desprotecci¨®n absoluta¡±.

Marcos, el padre del ni?o, recalca que ¡°los informes oficiales¡± le avalan y que el menor se encuentra bien. ¡°Tiene 14 a?os y puede contar lo que le pasa. Y con todas las veces que hemos pasado por servicios sociales o el instituto, su psic¨®logo¡­ alguien hubiera visto algo. Nadie ha denunciado nada¡±, afirmaba hace unos d¨ªas por tel¨¦fono desde la provincia de M¨¢laga, adonde se mudaron durante la pandemia, un traslado avalado por la justicia el a?o pasado. Sevilla ha recurrido ese auto, en el que tambi¨¦n se deneg¨® que la custodia del ni?o pasara a asumirla su abuela materna, como ella hab¨ªa pedido al considerar que el menor sigue en riesgo. El ni?o declar¨® durante este proceso que quer¨ªa vivir con su padre, seg¨²n consta en el auto. Hasta ahora, Sevilla ha visto a su hijo los fines de semana alternos en un punto de encuentro, primero en Madrid y despu¨¦s en M¨¢laga.

Marcos, que ha presentado una denuncia en contra de Sevilla por falsedad documental, se opone a la medida de gracia: ¡°Todos los actos judiciales a los que hemos asistido me dan la raz¨®n. Que se pida un indulto me parece totalmente injusto¡±.

Hay 181 organizaciones que lo defienden, y de manera ¡°urgente¡±. Entre ellas, colectivos feministas como la Asociaci¨®n Mujeres Juristas Themis y la Federaci¨®n de Mujeres Progresistas. En la rueda de prensa de principios de mes, las portavoces comentaron que el caso de Sevilla no es aislado y criticaron que en los juzgados se siga aplicando ¡ªpese a que la ley de protecci¨®n de la infancia mandata evitarlo¡ª el s¨ªndrome de alienaci¨®n parental, la creencia seg¨²n la cual un progenitor manipula a un ni?o en contra del otro, poni¨¦ndole en su contra. Las entidades cargan contra la falta de credibilidad que se da a quienes denuncian y contra la ¡°criminalizaci¨®n de las madres protectoras¡±. Apoyan sus argumentos con el duro reproche lanzado a Espa?a recientemente por un grupo de expertos independientes de la ONU, que considera que el sistema judicial no protege lo suficiente a los menores de ¡°padres abusivos¡±. La respuesta oficial de Espa?a a este procedimiento es que ¡°no puede admitirse¡± que ¡°errores aislados¡± puedan derivar en una ¡°conclusi¨®n general¡±.