Las claves de una ley m¨¢s all¨¢ del aborto: un permiso para el ¨²ltimo mes de embarazo y hasta cinco d¨ªas de baja por reglas dolorosas

El borrador de la nueva ley del aborto que maneja Igualdad, de casi medio centenar de p¨¢ginas y al que ha tenido acceso este diario, incluye por primera vez en la normativa la menstruaci¨®n, con bajas de hasta cinco d¨ªas para reglas dolorosas, que pueden llevar incluso a la incapacidad temporal. Tambi¨¦n se prev¨¦ ese plazo para ejercer el derecho a la interrupci¨®n voluntaria del embarazo. El texto establece adem¨¢s un permiso retribuido en el ¨²ltimo mes de gestaci¨®n. Esos tres son solo algunos de los art¨ªculos que, de aprobarse, cambiar¨ªan la vida, el d¨ªa a d¨ªa, de millones de mujeres. Sin embargo, esas propuestas est¨¢n sujetas todav¨ªa a la posibilidad de cambios antes de llegar al Consejo de Ministros el pr¨®ximo martes, ya que el texto a¨²n no es definitivo.

Para todo ello queda todav¨ªa un largo camino. Primero de debate y acuerdo con los ministerios implicados en la elaboraci¨®n de la norma como Sanidad, Hacienda o Seguridad Social; y despu¨¦s con el resto de los grupos parlamentarios de la C¨¢mara baja, porque esta normativa ¡ªllamada Ley Org¨¢nica para la Protecci¨®n de los Derechos Sexuales y Reproductivos y la Garant¨ªa de la Interrupci¨®n Voluntaria del Embarazo¡ª no es una reforma de la anterior. Igualdad ha incluido una disposici¨®n derogatoria de la previa, la conocida como ley del aborto de 2010, por lo que esta dejar¨ªa de estar en vigor y se necesitar¨ªa la mayor¨ªa absoluta del Congreso para aprobar el nuevo texto, tal como requieren las leyes org¨¢nicas.

Este es un resumen de las claves de ese borrador:

Salud menstrual

El documento recoge la salud menstrual como parte del derecho a la salud, que debe ser igualitaria para todas en todos los niveles sanitarios y sin distinci¨®n en funci¨®n del lugar de residencia; y especifica que se combatir¨¢n los estereotipos y mitos sobre la regla que a¨²n existen y que dificultan la vida de las mujeres. Algunos de los art¨ªculos dentro de este ¨¢mbito son:

• Bajas de tres d¨ªas bajo supervisi¨®n m¨¦dica, con capacidad de ampliar a cinco, para quienes tengan reglas incapacitantes: dolores intensos, calambres, c¨®licos, n¨¢useas, mareos y v¨®mitos que algunas mujeres sufren cada ciclo.
• Los centros educativos, los que ofrecen servicios sociales para mujeres en riesgo de exclusi¨®n y las prisiones deber¨¢n ofrecer de forma gratuita los productos de higiene necesarios para la menstruaci¨®n. Y, progresivamente, todas las dependencias de los organismos p¨²blicos ir¨¢n incorporando esta medida.
• Esos productos se entregar¨¢n a quienes los necesiten sin mediaci¨®n alguna y ser¨¢n lo m¨¢s sostenibles, ecol¨®gicos y respetuosos con la salud de las mujeres posibles.
• Eliminaci¨®n del IVA para los art¨ªculos espec¨ªficos de higiene femenina.

Salud reproductiva

• Permiso remunerado antes del parto, desde la semana 36 y hasta el momento del nacimiento.
• Enfoque de la salud reproductiva desde la interseccionalidad y la no discriminaci¨®n, es decir, atendiendo a todas las circunstancias de cada mujer: desde la edad hasta la situaci¨®n econ¨®mica o el origen.
• Protocolos frente al aborto, la anticoncepci¨®n y la esterilizaci¨®n forzadas, atendiendo de manera especial a las mujeres con discapacidad.

Interrupci¨®n voluntaria del embarazo

La mayor¨ªa del articulado del borrador en cuanto al aborto viene a confirmar algunos de los avances que ya desgran¨® a finales de febrero la ministra de Igualdad, Irene Montero. Y, como se preve¨ªa, mantiene los plazos. Es decir, que el aborto es libre hasta la semana 14 de gestaci¨®n y, a partir de ah¨ª y hasta la semana 21, podr¨¢ realizarse lo que se conoce como un aborto terap¨¦utico, es decir, una interrupci¨®n por causas m¨¦dicas, como malformaci¨®n del feto o peligro para la vida de la madre. Adem¨¢s, recoge otras cuestiones:

• Acceso al aborto en el sistema p¨²blico: la norma quiere incidir en garantizar este derecho desde los hospitales p¨²blicos, y propone una organizaci¨®n territorial. Es decir, que cada comunidad aut¨®noma, que son las que tienen las competencias en materia sanitaria, organicen sus recursos para asegurar que las mujeres puedan interrumpir su embarazo en un centro p¨²blico, como m¨ªnimo, en las capitales de provincia. En cualquier caso, alude a un acceso igualitario para todas las mujeres, residan donde residan, y especifica que de no ser posible en los servicios de salud [los p¨²blicos], se gestionar¨¢ de forma que el derecho quede garantizado, se ejerza en un hospital p¨²blico o en un centro o cl¨ªnica acreditados.
• Registro de objetores de conciencia: se pondr¨¢ en marcha en cada autonom¨ªa, y los profesionales que quieran inscribirse deber¨¢n hacerlo con antelaci¨®n y por escrito; y, especifica el texto, una vez declarados objetores, estos profesionales lo ser¨¢n tanto para el ¨¢mbito p¨²blico como para el privado.
• A partir de los 16 a?os, las mujeres podr¨¢n abortar sin permiso de sus madres, padres o tutores.
• Eliminaci¨®n de los tres d¨ªas de reflexi¨®n obligatorios actualmente.
• Eliminaci¨®n de la obligatoriedad de entregar informaci¨®n a las mujeres sobre los recursos y ayudas disponibles en caso de continuar el embarazo. Se har¨¢ ¨²nicamente si ellas lo solicitan.

Salud sexual

• Gratuidad de los anticonceptivos hormonales, incluidos los de larga duraci¨®n, y la p¨ªldora del d¨ªa despu¨¦s, que ser¨¢n financiados por el sistema p¨²blico.
• Distribuci¨®n de los anteriores m¨¦todos anticonceptivos en institutos en el marco de campa?as de educaci¨®n sexual.
• Dispensaci¨®n de anticonceptivos de barrera en centros educativos, los que ofrecen servicios sociales y en los centros penitenciarios, en el plazo de un a?o.

Vientres de alquiler

El borrador de la nueva norma alude a los vientres de alquiler como una de las formas de violencia contra la mujer. ?Qu¨¦ incluye en este apartado?

• La prohibici¨®n de la publicidad de las agencias que ofrecen este tipo de servicios, con sanciones para los medios de comunicaci¨®n que incluyan sus anuncios.
• La potestad de los tribunales espa?oles para perseguir a las parejas que recurran al extranjero para encontrar a una mujer que alquile su vientre (estas quedan excluidas de esa persecuci¨®n), si son espa?oles o residen habitualmente en Espa?a.