Vacaciones, ola de covid y saturaci¨®n en urgencias: la sanidad se enfrenta a un verano ¡°desastroso y desalentador¡±
Una primaria mermada, las urgencias con m¨¢s atenciones que nunca en estas fechas y una ola de covid creciente preocupan a los sanitarios
Los sanitarios miran los dos pr¨®ximos meses con una mezcla de alegr¨ªa y miedo. Alegr¨ªa porque se ir¨¢n de vacaciones durante parte del verano. Miedo porque cuando les toque trabajar deber¨¢n cubrir a sus compa?eros en un sistema sanitario cada vez m¨¢s mermado ¡ªespecialmente en primaria¡ª, con unos niveles de atenci¨®n nunca vistos en estas fechas ¡ª...
Los sanitarios miran los dos pr¨®ximos meses con una mezcla de alegr¨ªa y miedo. Alegr¨ªa porque se ir¨¢n de vacaciones durante parte del verano. Miedo porque cuando les toque trabajar deber¨¢n cubrir a sus compa?eros en un sistema sanitario cada vez m¨¢s mermado ¡ªespecialmente en primaria¡ª, con unos niveles de atenci¨®n nunca vistos en estas fechas ¡ªen urgencias¡ª y una ola de covid que no solo aportar¨¢ un extra a la presi¨®n asistencial en todos los niveles, sino que causar¨¢ ¡ªya lo hace¡ª bajas entre el personal.
Cuando se pregunta c¨®mo se presenta el verano a media docena de m¨¦dicos de primaria, de urgencias, representantes de enfermer¨ªa y de sindicatos del sector responden as¨ª: ¡°Mal¡±. ¡°Las perspectivas son muy malas¡±. ¡°Desastroso y desalentador¡±. ¡°Peor a¨²n que los otros veranos de la pandemia¡±. ¡°Lo vemos mal¡±. ¡°Muy mal, francamente mal¡±.
En el centro de salud de Jos¨¦ Polo, en C¨¢ceres, han estado esta semana cuadrando turnos para intentar que nunca haya m¨¢s de un 30% de la plantilla de vacaciones. Tienen un problema con las guardias. A Polo, que es adem¨¢s presidente de la Sociedad Espa?ola de M¨¦dicos de Atenci¨®n Primaria (Semergen), le sal¨ªan en principio tres (de 24 horas) a la semana. Y en Extremadura no libran al d¨ªa siguiente: son niveles de trabajo inasumibles. El consejero de Sanidad de esta comunidad, Jos¨¦ Mar¨ªa Vergeles, ha pedido esta semana ¡°comprensi¨®n¡± a los ciudadanos de cara a las vacaciones de los sanitarios. ¡°Se merecen un descanso¡±, ha dicho.
A las agendas ya repletas con 50 pacientes diarios programados, se suman los que llegan sin cita y los derivados de otros compa?eros de plazas que quedan vacantes, que cada vez son m¨¢s. Lorenzo Armenteros, portavoz de la Sociedad Espa?ola de M¨¦dicos Generales y de Familia (SEMG), lamenta no poder dar la mejor atenci¨®n en estas circunstancias: ¡°Por mucho que queramos y por muy atentos que estemos, con el estr¨¦s se reduce mucho la calidad de asistencia. No me gustar¨ªa que el m¨¦dico que me haya visto antes a 100 pacientes. Por mucha voluntad que pongamos, estamos l¨®gicamente cansados. Y es muy diferente ser el primero al n¨²mero 100¡å.
Y este fr¨¢gil equilibrio se puede romper en cualquier momento si alguno de los que se queda trabajando se contagia de covid, algo nada infrecuente en una ola con una fuerte tendencia al alza.
Aunque las vacaciones de verano merman todos los servicios, la primaria ha sido tradicionalmente la m¨¢s afectada, algo que se viene agravando en los ¨²ltimos a?os, en los que el n¨²mero de m¨¦dicos de familia no ha parado de caer. A finales de 2021 hab¨ªa mil menos que antes de la pandemia: muchos se han jubilado, otros se van a urgencias o a la privada en busca de mejores condiciones.
A falta de cifras m¨¢s recientes, es probable que la merma sea a¨²n mayor. Cada mes que pasa, m¨¢s m¨¦dicos se jubilan y no son cubiertos, cada vez son m¨¢s los que rechazan prorrogar sus servicios m¨¢s all¨¢ de los 70 a?os y m¨¢s los que renuncian cuando ya hab¨ªan comenzado a hacerlo. ¡°Son muchos los que no han querido renovar. Dicen: ¡®Con ese estr¨¦s no aguanto¡¯. Si no lo quieren j¨®venes [esta convocatoria de MIR ha dejado 200 plazas vacantes en primaria], alguien con 65 que hab¨ªa prorrogado hasta 70 se va a casa. No est¨¢ a gusto trabajando¡±, dice Armenteros.
Mar¨ªa Fern¨¢ndez, presidenta de la Sociedad Espa?ola de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) teme especialmente a los lunes: ¡°Son horribles. Vienen todas las bajas, las patolog¨ªas no atendidas los fines de semana, muchos m¨¢s pacientes sin citas. Y si no se cubren a los que se van de vacaciones, sus agendas pasan a los compa?eros, con la consecuente demora en la atenci¨®n de los pacientes¡±.
El panorama var¨ªa en funci¨®n de cada territorio (no es lo mismo en las receptoras de turismo que en las dem¨¢s), incluso dentro de centros de salud de una misma ciudad hay algunos que dan cita para el d¨ªa siguiente y otros que tienen varias jornadas de espera. Pero el verano preocupa a todos los consejeros de salud, seg¨²n una fuente del Consejo Interterritorial, y fue uno de los temas de conversaci¨®n en el ¨²ltimo, celebrado la semana pasada. Cada autonom¨ªa est¨¢ tratando de reforzar como puede los servicios con inversi¨®n y personal, pero el problema es que no hay m¨¦dicos para reemplazar a todos los que se van. ¡°Las sustituciones son m¨ªnimas¡±, dice Gabriel del Pozo, de la Confederaci¨®n Estatal de Sindicatos M¨¦dicos (CESM). ¡°Si ya nos cuesta que haya m¨¦dicos suficientes, sobre todo en niveles extrahospitalarios, durante todo el a?o, en verano no es una excepci¨®n¡±, a?ade.
Un ejemplo que se puede extrapolar a otros muchos territorios, especialmente en la Espa?a vaciada, es el de Arag¨®n. Fuentes de su consejer¨ªa de Sanidad reconocen que el verano va a ser ¡°muy dif¨ªcil¡±. ¡°Todas las plazas vacantes de primaria que quedaron sin due?o tras resolverse una oferta p¨²blica de empleo se ofrecieron en un llamamiento ¨²nico a todos los m¨¦dicos que est¨¢n en bolsa y aun as¨ª se quedaron vacantes porque no las quiso ninguno. Esto est¨¢ provocando que se tenga que reorganizar la asistencia, sobre todo en las zonas del Pirineo¡±, explican estas fuentes. Para paliarlo, el Gobierno de Arag¨®n est¨¢ ofreciendo un aumento del 20% en la retribuci¨®n de las guardias para que las cubran enfermeros y m¨¦dicos de toda la comunidad. Es algo que en mayor o menor medida intentan hacer otras autonom¨ªas.
Pero Del Pozo cree que no es suficiente: ¡°Las ofertas en muchas comunidades son precarias. Entramos en un mercado persa en el que cada una intenta pagar un poco m¨¢s a ver si le quita profesionales a las otras. Pero hacen falta unas condiciones b¨¢sicas equiparables. Es una carencia estructural que no se puede solucionar en unos meses, no podemos hacer la multiplicaci¨®n de los panes y los peces¡±.
Las urgencias, como nunca en verano
En Urgencias las cosas no est¨¢n mucho mejor que en la primaria. Aunque es uno de los destinos donde van muchos m¨¦dicos de familia, Pascual Pi?era, vicepresidente del Sociedad Espa?ola Medicina Urgencias (SEMES), asegura que no siempre sucede, ya que los que acaban de terminar el MIR ¡°prefieren una interinidad de un a?o a un contrato de dos meses¡±. La peculiaridad este verano es que est¨¢n recibiendo m¨¢s pacientes que nunca en estas fechas. Representantes de la sociedad de todas las comunidades as¨ª lo atestiguan, con subidas de alrededor de un 30%.
Lo achacan a una mezcla de factores: la saturaci¨®n de la primaria hace que muchos pacientes acudan directamente a urgencias para recibir atenci¨®n inmediata; la covid ha alterado el nicho ecol¨®gico de otros virus respiratorios, que est¨¢n manifest¨¢ndose en esta ¨¦poca del a?o, cuando lo normal era que lo hicieran en el invierno.
Es el caso de la madre de Pilar Garc¨ªa. Es una se?ora de 84 a?os que ha dado positivo y, junto a unos mareos, hicieron que su hija decidiera llevarla al hospital. Pilar aguarda sentada en la sala de espera del 12 de Octubre, en Madrid, donde este aumento de atenciones no se percibe a simple vista: el trasiego es el habitual.
Una fila m¨¢s atr¨¢s est¨¢ Jos¨¦ Luis Escribano esperando a que salga su mujer. Despu¨¦s de una operaci¨®n por un c¨¢ncer de colon, sent¨ªa tremendos dolores al defecar. Llamaron a su m¨¦dico, pero tardaba una semana en atenderles. ¡°No pod¨ªamos esperar tanto, cada vez que iba al ba?o era como un parto, as¨ª que hemos venido a urgencias¡±, cuenta.
Lo que temen los profesionales de urgencias es que, por uno u otro motivo, el ritmo asistencial contin¨²e en los meses que entran, cuando habr¨¢ menos m¨¦dicos por las vacaciones. ¡°Intentaremos que no repercuta en el paciente, pero a costa de un sobreesfuerzo del personal¡±, lamenta Pi?era.
Y a todo esto se suma la que se podr¨ªa considerar s¨¦ptima ola de covid. Aunque en la mayor¨ªa de los hospitales la situaci¨®n es de momento manejable, tanto los contagios como los ingresos llevan una decidida tendencia al alza. Seg¨²n los ¨²ltimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad, la incidencia acumulada en mayores de 60 a?os (la ¨²nica que se mide) est¨¢ en 996 casos por 100.000 habitantes y los pacientes de covid ocupan un 8,3% de las camas hospitalarias y un 5% de las UCI. Algunas comunidades, como Catalu?a, ya han alertado que la previsible subida que todav¨ªa queda puede obligar a reajustar servicios este verano. Los m¨¦dicos all¨ª ya han pedido agilizar las bajas por covid para evitar un colapso de la primaria como el que sucedi¨® el pasado invierno en la sexta ola.
Cuando echa la vista atr¨¢s, Mar¨ªa Jos¨¦ Garc¨ªa, portavoz del sindicato de enfermer¨ªa Satse, recuerda c¨®mo hace dos a?os todos los pol¨ªticos hablaban de reforzar la sanidad, las plantillas, la primaria, los hospitales. ¡°La situaci¨®n ahora es la misma o peor, con profesionales totalmente agotados, en muchos casos tambi¨¦n sufriendo consecuencias de secuelas de la covid persistente. Y nadie pone ni herramientas ni medios ni intenci¨®n para solucionar el problema¡±, zanja.