La misi¨®n imposible de la terapia psicol¨®gica en la sanidad p¨²blica: ¡°Con citas cada mes y medio no estableces v¨ªnculo con el paciente¡±
La psic¨®loga Bel¨¦n Hern¨¢ndez denunci¨® en una carta a la directora de EL PA?S que el sistema lanza el mensaje de que el suicidio se convierte en ¡°una alternativa aceptable¡± para los que no se pueden pagar una consulta
A la consulta de Bel¨¦n Hern¨¢ndez, una psic¨®loga cl¨ªnica de 59 a?os que ejerce en un centro privado de Madrid, cada vez llega m¨¢s gente joven. ¡°Est¨¢n asustados por los vaticinios de un futuro negro que hace una generaci¨®n anterior a la suya, que no sabe nada de su mundo ni del que les tocar¨¢ vivir¡±, relata. Uno de estos j¨®venes que lleg¨® a su consulta lo hizo de la mano de una amiga que lo col¨® en la sesi¨®n que ella ten¨ªa agendada. ?l no la pod¨ªa pagar, estaba al borde del suicidio y en la sanidad p¨²blica madrile?a ten¨ªa cita con un psic¨®logo a un a?o vista, como contaba Hern¨¢ndez este fin de semana en una carta a la directora en este peri¨®dico.
¡°Esta semana un joven de 23 a?os sin recursos econ¨®micos ha acudido a un servicio de urgencias en un hospital p¨²blico de la Comunidad de Madrid, absolutamente desesperado y con un alt¨ªsimo riesgo de suicidio. Sale con la receta de un ansiol¨ªtico, de un antidepresivo que tardar¨¢ unas tres semanas en empezar a hacer efecto y con la derivaci¨®n al Servicio de Psicolog¨ªa. A las 48 horas recibe una llamada para informarle de la fecha de su primera cita en Psicolog¨ªa: 15 de enero de 2024. Todo un mensaje desde la sanidad p¨²blica a sus usuarios: si no dispones del dinero suficiente para pagar a un psic¨®logo privado, el suicidio se convierte en una alternativa aceptable. ?Alguien piensa hacer algo?¡±, se preguntaba.
La carta, escrita como una llamada de auxilio para hacer ver la ¡°dur¨ªsima realidad¡± por la que pasan muchas personas, ha tocado muchas fibras en una sociedad que cada vez tiene m¨¢s presente el problema de la salud mental. La falta de psic¨®logos cl¨ªnicos en el sistema hace que conseguir una cita con uno no est¨¦ al alcance de muchos pacientes que lo necesitar¨ªan. Una vez que los tratan, las sesiones son de tan solo media hora y a menudo est¨¢n espaciadas en un mes y medio. ¡°As¨ª es imposible establecer un v¨ªnculo de intimidad. Si citas a una persona y te cuenta algo muy importante de su vida y no lo vuelves a ver hasta 45 d¨ªas despu¨¦s, no puedes establecer ese v¨ªnculo. Al final la gente no se engancha, siente que no se soluciona el problema y no va a cita¡±, explica Hern¨¢ndez.
Espa?a est¨¢ muy lejos de los est¨¢ndares europeos en atenci¨®n a la salud mental. Hay seis psic¨®logos cl¨ªnicos por 100.000 habitantes en la red p¨²blica, tres veces menos que la media europea. Cada a?o salen algo m¨¢s de 200 plazas de psic¨®logos internos residentes (PIR), y para llegar a estos est¨¢ndares har¨ªan falta m¨¢s del doble. Tambi¨¦n escasean los psiquiatras: 11 por cada 100.000 personas, casi cinco veces menos que en Suiza (52) y la mitad que en Francia (23), Alemania (27) o Pa¨ªses Bajos (24).
Los m¨¦dicos de primaria, ya de por s¨ª desbordados, no tienen los recursos ni el tiempo para tratar problemas de ¨ªndole psicol¨®gica. Ante la imposibilidad de derivarlos a terapia, a menudo acaban recetando ansiol¨ªticos, como contaba Vicente Baos, especialista en medicina Familiar, en un podcast en EL PA?S.
La pastilla se convierte as¨ª en la ¨²nica soluci¨®n que reciben muchos pacientes que necesitar¨ªan terapia, pero no la obtienen en la sanidad p¨²blica y no se la pueden costear en la privada, donde cada sesi¨®n de una hora ronda los 50 euros. Y eso se refleja en cifras. El consumo de tranquilizantes no para de crecer: uno de cada 10 espa?oles de entre 15 y 64 a?os los toma, seg¨²n la ¨²ltima encuesta sobre alcohol y otras drogas (Edades), que ha publicado este mismo mes el Ministerio de Sanidad.
Estos crecientes problemas de salud mental tambi¨¦n se reflejan en la cifra de suicidios, que es la primera causa de muerte externa (no natural) en Espa?a: en 2021 se quitaron la vida 4.003 personas, seg¨²n los datos del INE. Y la tendencia empeoraba en la primera mitad del 2022 (¨²ltimas cifras disponibles): 2.015, lo que de repetirse en los siguientes seis meses dar¨ªa una cifra de 4.030 en el a?o.
Un estudio de la Fundaci¨®n Anar alertaba el pasado diciembre sobre el hecho de que solo el 44% de los menores entre 13 y 17 a?os que han contactado con ellos en los ¨²ltimos tres a?os por ideaci¨®n suicida o por intento de suicidio ha recibido atenci¨®n psicol¨®gica, bien dentro del sistema p¨²blico de salud o de forma privada.
Como han se?alado varios estudios, la pandemia ha venido a agravar la situaci¨®n. Hern¨¢ndez nota en su cl¨ªnica que las secuelas contin¨²an y cree que todav¨ªa durar¨¢n. ¡°Ha sido muy complicado porque es una edad en la que es important¨ªsimo el contacto social con tus iguales y menos con la familia; estar encerrado ha pasado factura¡±, asegura.
Las administraciones p¨²blicas han comenzado a moverse ante esta realidad, pero no parece que lo hagan con la suficiente velocidad. La Consejer¨ªa de Sanidad de la Comunidad de Madrid, donde ocurri¨® el caso que relataba Hern¨¢ndez en su carta, explica que no sabe qu¨¦ ha podido fallar, porque no conoce el caso concreto, pero asegura que cuando se detecta una conducta suicida se da cita psiqui¨¢trica en menos de siete d¨ªas.
¡°Hay psiquiatras de guardia en las urgencias de todos los hospitales con Servicio de Psiquiatr¨ªa las 24 horas para atender cualquier situaci¨®n de riesgo que pueda producirse, incluida la tentativa suicida. Adem¨¢s, los profesionales de los centros de salud pueden derivar a la red de Salud Mental a trav¨¦s de una consulta con car¨¢cter preferente¡±, explica un portavoz.
En el Ministerio de Sanidad, que no tiene competencias asistenciales, explican que pesar de ello se est¨¢n sumando iniciativas como la Estrategia de Salud Mental, que no se actualizaba desde el a?o 2009. Paralelamente, se aprob¨® en mayo un Plan de Acci¨®n de Salud Mental 2022-2024 cofinanciado entre las comunidades y el Gobierno, que aportar¨¢ 100 millones de euros. Una de sus medidas estrellas es un tel¨¦fono de atenci¨®n al suicidio (024) que se estren¨® ese mismo mes y que cerr¨® diciembre con 79.975 llamadas atendidas, 2.987 derivadas al 112 y la atenci¨®n a 2.129 suicidios en curso o con riesgo inminente.
Faltan psic¨®logos
Habr¨¢ que comprobar cuando se publiquen las nuevas estad¨ªsticas del INE si tuvo repercusi¨®n en las cifras de suicidios del segundo semestre de 2022. En opini¨®n de Hern¨¢ndez, medidas como estas son buenas, pero representan ¡°una tirita¡± en un sistema al que le faltan psic¨®logos cl¨ªnicos. ¡°Nos llegan pacientes que acaban abandonando el circuito p¨²blico porque no se sienten suficientemente atendidos, cuando pasan mes y medio sin verlos, en media hora apenas les da tiempo a contarles lo nuevo que ha sucedido en sus vidas. Hoy mismo me lo dec¨ªa un paciente: ¡®Tienes que ir a toda velocidad y se te quitan las ganas de contar nada¡¯. El colmo es que ahora hay listas de espera hasta en la privada¡±, relata la psic¨®loga, que asegura que en 29 a?os de profesi¨®n nunca hab¨ªa trabajado tantas horas semanales.
Las administraciones suelen justificar esta falta de psic¨®logos cl¨ªnicos con una realidad: aunque cada vez hay m¨¢s licenciados, faltan especialistas cl¨ªnicos para cubrir las plazas que ser¨ªan necesarias. La estrategia que est¨¢n adoptando algunas comunidades es incluir psic¨®logos no cl¨ªnicos en los centros de salud para atender de forma temprana problemas emocionales y tratar de evitar que se conviertan en situaciones m¨¢s graves.
Es algo que est¨¢ haciendo Catalu?a y que Madrid estudia. La Comunidad anunci¨® la incorporaci¨®n de psic¨®logos en los centros de salud, y est¨¢ estudiando qu¨¦ perfil han de tener. Su Plan Estrat¨¦gico de Salud Mental 2022-2024 incluye una inversi¨®n de m¨¢s de 43 millones de euros y supone la contrataci¨®n de 370 profesionales especialistas.
Mientras estos se incorporan, y a falta de m¨¢s cl¨ªnicos, pagar una consulta se convierte en la ¨²nica soluci¨®n para muchos pacientes. Entre los que no se lo pueden permitir, hay profesionales como Hern¨¢ndez que no cobran a algunos, o adaptan las tarifas. ¡°Pero esta no puede ser la soluci¨®n, tiene que venir desde la sanidad p¨²blica¡±, subraya.
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