Ocho maneras de vivir el 8M: ¡°Cuando abogas por un feminismo inclusivo, no puedes dejar fuera a nadie¡±
Generaci¨®n Z, abolicionistas o transinclusivas: varios perfiles se manifiestan en las calles de toda Espa?a en el D¨ªa Internacional de la Mujer
Alrededor de 100.000 personas se han manifestado en las marchas convocadas en distintas ciudades espa?olas este 8 de marzo, con motivo del D¨ªa Internacional de la Mujer. Desde j¨®venes que corroboran el rechazo de parte de sus amigos hacia los avances igualitarios hasta feministas inclusivas con las mujeres trans o abolicionistas de la prostituci¨®n. Esbozamos ocho perfiles de las mujeres que se han lanzado a las calles para reivindicar la importancia del feminismo.
J¨²lia Real (19 a?os): ¡°En mi entorno, la gente es feminista o muy respetuosa, pero conozco j¨®venes que piensan como hace 40 a?os¡±
La estudiante de Bellas Artes J¨²lia Real, de 19 a?os, ha sido una de las 5.000 personas concentradas en la plaza de San Agust¨ªn de Valencia, en la primera manifestaci¨®n del 8M de la ciudad. Real comenta que en su entorno ¡°la gente es feminista o muy respetuosa¡±, pero conoce tambi¨¦n gente joven que piensa de manera muy diferente. ¡°Tienen actitudes muy retr¨®gradas, como de hace 40 a?os, y lo he visto de un tiempo a esta parte. Es un problema¡±, comenta Real, que no duda en incluir a las mujeres trans en el colectivo feminista, aunque ha elegido unirse a esta marcha de la Asamblea y no a la otra de la Coordinadora porque ha visto muchas banderas palestinas.
Bel¨¦n Cebri¨¢n (58 a?os): ¡°He sufrido en mis carnes el escarnio por quedarte embarazada¡±
Una de las primeras en llegar a la cuesta de Moyano en Atocha, punto de partida de una de las marchas del 8M en Madrid, ha sido Bel¨¦n Cebri¨¢n, de 58 a?os, madre de tres hijas y administradora de empresas. ¡°He sufrido en mis carnes el escarnio por quedarte embarazada¡±, confiesa esta mujer, cuyo primer embarazo deriv¨® en la p¨¦rdida de su trabajo.
Cebri¨¢n se ha pintado los labios de morado y se ha reunido pasadas las 17.00 con la Batucada que entiende, una de las agrupaciones que ha acompasado la marcha feminista y de la que es percusionista. Tiene claras sus reivindicaciones: ¡°Nos faltan sueldos iguales, funciones iguales y, desde luego, much¨ªsima conciencia¡±, y a?ade que les hace ¡°much¨ªsimo da?o la extrema derecha que est¨¢ intentando tapar algo que no se puede tapar: los derechos de la mujer¡±.
Para ella, ¡°no hay violencia feminista¡±, as¨ª que no cree en la queja cada vez m¨¢s com¨²n entre algunos hombres, que confiesan sentirse discriminados tras el auge de la lucha de las mujeres. ¡°Est¨¢n acojonados porque las mujeres est¨¢n empoderadas¡±, resume, aunque reconoce que ¡°hay un feminismo extremo al que se le va un poco la pinza¡±. Remarca que ¡°ni de co?a¡± la lucha por los derechos de la mujer debe repercutir en la p¨¦rdida de derechos para los hombres. ¡°El feminismo es igualdad y en la igualdad tenemos que estar todos¡±, sentencia, antes de recoger su tambor, al que le tapa con un pa?uelo morado el logo de su agrupaci¨®n, porque, en sus palabras: ¡°Hoy todas somos una¡±.
Merche P¨¦rez (51 a?os): ¡°Cuando abogas por un feminismo inclusivo, no puedes dejar fuera a nadie seg¨²n tu esquema moral¡±
Merche P¨¦rez, de 51 a?os, es profesora de secundaria en Sevilla y no ha tenido dudas en participar en la manifestaci¨®n transinclusiva de Sevilla. ¡°Cuando abogas por un feminismo inclusivo, no puedes dejar fuera a nadie seg¨²n tu esquema moral¡±, explica con dos cors¨¦s y una pancarta al ristre en la que se lee ¡°estallemos el cors¨¦ de g¨¦nero¡±. P¨¦rez participa todos los a?os en el 8M, pero este es el primero que acude a Sevilla, tras mudarse desde Barcelona. ¡°Queremos dar visibilidad a un feminismo integrador que defienda la justicia social. Por eso, nuestro feminismo es trans-formador¡±, ha a?adido P¨¦rez, que aboga por superar ¡°el binarismo que se ci?e al hombre y a la mujer e invisibiliza otras realidades¡±.
Laura Alonso (20 a?os): ¡°Creo y espero que el movimiento se una, debemos luchar juntas¡±
La sevillana Laura Alonso, de 20 a?os, se ha animado a participar en la manifestaci¨®n hist¨®rica que arranca a las 20.00 desde la plaza Nueva de Sevilla. La estudiante de Dise?o gr¨¢fico asegura que nota en su generaci¨®n, la Z, la polarizaci¨®n entre chicos m¨¢s machistas y mujeres m¨¢s feministas. ¡°Me choca que los chicos piensen as¨ª¡±. La joven cuenta que hace por rodearse de amigos feministas, porque ¡°es defender los derechos humanos¡±. Alonso se ha sumado a esta marcha porque se considera ¡°abolicionista¡± de la prostituci¨®n. ¡°Eso no quiere decir que sea transexcluyente¡±, precisa la estudiante. Alonso dice vivir ¡°con mucho dolor¡± la divisi¨®n del movimiento. ¡°Creo y espero que el movimiento se una, debemos luchar juntas¡±, explica la sevillana.
Silvia Herrero (46 a?os): ¡°Los cuidados de la casa, la agenda del cole y la carga mental recae en las mujeres solo por tradici¨®n¡±
Silvia Herrero, madrile?a de 46 a?os, se dedica al sector comercial. Ha tra¨ªdo a la marcha del 8M un l¨¢piz morado para dibujar el s¨ªmbolo femenino en el rostro de algunas asistentes que se congregaban sobre las 18.30 en la plaza del Museo Reina Sof¨ªa, lugar habitual para la previa de la marcha. Tiene una petici¨®n para los hombres: ¡°Que se pongan las gafas moradas para que demuestren que se consideran iguales o que nos consideran iguales¡±. Esta lucha, puntualiza, es especialmente necesaria en el ¨¢mbito familiar, concretamente en ¡°los cuidados de la casa, las responsabilidades, la agenda del cole y la carga mental de las cosas que recaen en las mujeres solo por tradici¨®n¡±.
Sobre los comentarios de algunos hombres que se sienten atacados por la lucha feminista, opina que es ¡°una mala lectura¡±. ¡°Podr¨ªan sentirse discriminados si hubiese una lucha por la superioridad de la mujer, pero si es por la igualdad no hay motivo para sentirse discriminado¡±. Considera que vivimos ¡°en una ¨¦poca en la que peligran ciertos derechos sociales ya conquistados¡± y por eso recuerda a las mujeres que ¡°no es tiempo para relajarse¡±.
Herrero aclara que prefiere unirse a la marcha de la Comisi¨®n 8M y no a la del Movimiento Feminista de Madrid porque la primera es transinclusiva. Lamenta que este a?o, una vez m¨¢s, salgan dos marchas separadas. ¡°Me parece que hay muchos puntos en com¨²n que se pueden defender juntas como para separarnos¡±, sentencia.
Mirta Vergaray (48 a?os): ¡°La prostituci¨®n no es un trabajo porque no existe una libertad de decisi¨®n¡±
Mirta Vergaray, peruana de 48 a?os, reside en Madrid desde hace 18. Pertenece al colectivo Acci¨®n Feminista y tambi¨¦n al movimiento feminista de Parla. Acude a la marcha abolicionista y contraria a la ley trans porque quiere reivindicar que los verdaderos sujetos pol¨ªticos del movimiento sean las mujeres. ¡°Hay una opresi¨®n hist¨®rica sobre la base del g¨¦nero, que es un constructo social, donde se nos han asignado roles y estereotipos por ser mujeres. Esto se perpet¨²a si se acude a una manifestaci¨®n que defiende una ley trans que nos oprime¡±. Vergaray defiende que la prostituci¨®n no es trabajo porque no existe una libertad de decisi¨®n. No percibe que haya una divisi¨®n en el movimiento feminista. ¡°Siempre ha sido uno, el que lucha contra la opresi¨®n¡±.
Elena Herranz (22 a?os): ¡°Mi c¨ªrculo de amigos no es cr¨ªtico con la violencia que sufren las mujeres e incluso se hacen bromas¡±
Elena Herranz naci¨® en Molina de Arag¨®n, un pueblo de Guadalajara, y tiene 22 a?os. Estudia Comunicaci¨®n Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos y ha optado por acudir a la manifestaci¨®n abolicionista de Madrid. ¡°La verdadera agenda feminista tiene que ser abolicionista porque es la que recoge todas las violencias que sufrimos las mujeres, incluidas la prostituci¨®n, la pornograf¨ªa, los vientres de alquiler y el g¨¦nero¡±. Respecto a la encuesta publicada por EL PA?S, en la que se refleja la divisi¨®n entre chicos y chicas de la generaci¨®n Z respecto al feminismo, dice que en su c¨ªrculo de amigos, de la misma edad, no son cr¨ªticos con la violencia que sufren las mujeres. ¡°Hacen bromas, tienen esa violencia muy normalizada¡±. No piensa que el feminismo est¨¦ dividido, simplemente opina que hay un movimiento que es feminista y otro que no. ¡°Cada vez somos m¨¢s en la manifestaci¨®n abolicionista¡±.
Blanca Monterrubio (42 a?os): ¡°El ruido es necesario para que nos consideren iguales a nivel laboral y social¡±
Blanca Monterrubio, de 42 a?os, es miembro del conjunto de mujeres percusionistas de batucada que cada 8 de marzo se re¨²ne en Barcelona para que ¡°se oiga m¨¢s el feminismo¡±. Forma un grupo de entorno a 100 mujeres que se mantiene a?o tras a?o y, unos meses antes del D¨ªa de la Mujer, se organizan para preparar los ritmos de la manifestaci¨®n. Monterrubio afirma que el ruido es necesario para que ¡°nos consideren iguales a nivel laboral y social¡±. Para ella, el movimiento no deber¨ªa dividirse en distintas corrientes. ¡°No ganamos nada por separado¡±, se?ala, antes de marcharse corriendo para atender la llamada de sus compa?eras.
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