Lo que se sabe de la transmisi¨®n de la mpox: ?por qu¨¦ se est¨¢ contagiando sobre todo en ni?os?
A falta de conocer m¨¢s detalles sobre c¨®mo se comporta la nueva variante, los expertos creen que la mayor diferencia no se produce en la gen¨¦tica del virus, sino en el contexto
Una de las grandes diferencias entre el brote de mpox que se expande por ?frica y el de 2022 en Europa es c¨®mo se est¨¢ transmitiendo. Mientras que el de hace dos a?os se contagi¨® casi exclusivamente a trav¨¦s de relaciones sexuales, ahora las v¨ªctimas son sobre todo los ni?os, que suponen el 70% de los casos. Parece que algo ha cambiado en la forma de contagio en esta nueva variante (el clado 1b), y todav¨ªa habr¨¢ que esclarecer hasta qu¨¦ punto lo ha hecho. Pero quiz¨¢s el virus no ha variado sustancialmente, y hay que fijarse m¨¢s bien en el contexto.
Cada vez son m¨¢s las voces que ponen en duda algunas de las asunciones que se hicieron sobre esta nueva variante de la viruela del mono (rebautizada a mpox): que es m¨¢s peligrosa, que es m¨¢s transmisible, que genera enfermedad m¨¢s grave. Todo esto es posible, pero habr¨¢ que confirmarlo, algo para lo que ser¨¢ imprescindible una informaci¨®n m¨¢s precisa que la que llega de un contexto tan complicado como es el de Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo (RDC), donde se est¨¢ expandiendo: con muy pocos medios diagn¨®sticos y cl¨ªnicos, en mitad de un conflicto militar, con enormes tasas de pobreza, hacinamientos...
La semana pasada fue el Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en ingl¨¦s) el que advirti¨® de estas inc¨®gnitas ante el creciente n¨²mero de mensajes, algunos de expertos, que advert¨ªan sobre la mayor virulencia y letalidad de la nueva variante: ¡°Si bien en el pasado se ha informado que la morbilidad y la tasa de letalidad del clado 1 son mayores que las del clado 2, los datos preliminares actuales de ?frica no muestran una mayor gravedad cl¨ªnica en los casos confirmados¡±. Es algo sobre lo que tambi¨¦n incid¨ªa el vir¨®logo Jos¨¦ Antonio L¨®pez Guerrero en una entrevista en EL PA?S.
La letalidad se calcula dividiendo el n¨²mero de casos por el de fallecimientos. Cuanto menos preciso sea el diagn¨®stico, m¨¢s sesgada (y alta) ser¨¢ esa cifra. ¡°Hay infradiagn¨®stico en todas las enfermedades, incluso aqu¨ª, con una cobertura sanitaria mucho mejor, as¨ª que la letalidad ahora mismo es una inc¨®gnita¡±, razona Adri¨¢n H. Aginagalde, coordinador de la Secci¨®n de Salud P¨²blica de la Academia de Ciencias M¨¦dicas de Bilbao.
Mientras se despejan estas dudas, lo que resulta incuestionable es que la transmisi¨®n se est¨¢ comportando de forma distinta. Pero esto tampoco debe sorprender, en opini¨®n de Aginagalde: ¡°Los poxvirus (como el de la viruela, y ahora el mpox) siempre se han propagado m¨¢s entre ni?os que en adultos, y m¨¢s en mujeres que en hombres, porque son ellas las que suelen cuidar de los ni?os. Eso no es nuevo, y ya hab¨ªa pasado con la propia mpox en ?frica¡±.
Son muchas las infecciones que se expanden m¨¢s en los menores, porque su forma de interactuar es mucho m¨¢s cercana que la de los adultos: juegan, se pelean y se tocan m¨¢s. En pat¨®genos cuya propagaci¨®n requiere mucha cercan¨ªa o contacto muy directo, no es raro que sean ellos los m¨¢s afectados. El contexto ha cambiado con respecto a 2022, en el que se transmiti¨® sobre todo en encuentros sexuales, fiestas, saunas, y el mayor n¨²mero de casos se produjo entre personas bisexuales, gays y hombres que ten¨ªan sexo con hombres sin protecci¨®n.
Aginagalde se?ala que los poxvirus tienen una gran ¡°flexibilidad¡± para adaptarse a la poblaci¨®n, por lo que los cambios en el perfil sociodemogr¨¢fico de los afectados ¡°no necesariamente indican, aunque tampoco excluyen¡± variaciones en la transmisi¨®n del virus producidas por cambios en su gen¨¦tica.
En principio, las v¨ªas de contagio se consideran que siguen siendo el contacto directo y continuado. En las relaciones sexuales, evidentemente, lo hay, pero no solamente. Tocar las secreciones de una persona infectada, su ropa o incluso estar hablando muy cerca de una persona durante un tiempo, con la posibilidad de que haya intercambio de gotitas de saliva, son las v¨ªas que la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) considera posibles. Cuanto m¨¢s contacto y m¨¢s tiempo, m¨¢s probabilidades de transmisi¨®n.
¡°No es el nuevo covid¡±
Esto es muy distinto de la transmisi¨®n a¨¦rea por aerosoles que se produjo con el SARS-CoV-2. Y es una de las razones que hacen prever que la evoluci¨®n de la epidemia sea muy distinta y m¨¢s lenta que aquella. ¡°La mpox no es el nuevo covid¡±, ha dicho este martes Hans Kluge, director general de la OMS en Europa.
Rafael Toledo, catedr¨¢tico de Inmunoparasitolog¨ªa de la Universidad de Valencia, afirma que el de mpox tiene muchas diferencias con el que caus¨® la pandemia en 2020. ¡°Lo m¨¢s obvio es el tama?o. Este es el doble que el SARS-CoV-2. Eso hace pr¨¢cticamente imposible que mute de forma que pueda llegar a permanecer mucho tiempo en el aire¡±, se?ala. Y pone un ejemplo: ¡°Si vas en un autob¨²s y est¨¢s 20 minutos al lado de una persona, quiz¨¢s te puedes infectar porque te llegan exhalaciones a trav¨¦s de su respiraci¨®n, o por contacto, pero no va a contagiar al conductor¡±.
Si hubiera esta transmisi¨®n a¨¦rea por aerosoles, sostiene Toledo, habr¨ªa mucha m¨¢s diversidad etaria en los casos. Aunque son fen¨®menos muy distintos, el catedr¨¢tico hace una analog¨ªa con los piojos: ¡°Podr¨ªamos decir que se transmiten por el aire, porque saltan de una persona a otra. Pero para esto tiene que haber cercan¨ªa. Y, normalmente, son los ni?os los m¨¢s afectados, porque entre ellos es m¨¢s frecuente este tipo de contacto. Pero si cambiamos de contexto, por ejemplo, en una guerra, puede cambiar la poblaci¨®n afectada: muchas personas hacinadas, durmiendo agolpadas...¡±.
En opini¨®n de este experto, la transmisi¨®n m¨¢s frecuente sigue siendo el intercambio de fluidos, y cree que es muy dif¨ªcil equiparar c¨®mo se podr¨ªa comportar en Europa esta nueva variante. El ECDC calific¨® la semana pasada de ¡°bajo¡± el riesgo entre la poblaci¨®n europea, y es algo con lo que Toledo est¨¢ de acuerdo. ¡°Es un escenario diferente, una enfermedad diferente, con una trazabilidad mucho m¨¢s sencilla, en la que la migraci¨®n influye poco, porque tiene un periodo de incubaci¨®n de dos semanas, y el que viene de Congo a Espa?a no hace el viaje en cuatro horas, le cuesta mucho tiempo, y en ese caso la enfermedad ya se ha manifestado, porque es muy visible¡±, a?ade.
El anterior brote de mpox en Europa consigui¨® controlarse precisamente potenciando la trazabilidad de los casos, dando informaci¨®n a las personas con comportamientos de riesgo y facilitando la vacunaci¨®n. De los 7.521 infectados que Espa?a registr¨® en 2022, se pas¨® a 264 este a?o, ninguno de ellos, hasta donde se sabe, de la nueva variante.
Por todo esto, los expertos, la OMS, el ECDC y el Ministerio de Sanidad est¨¢n empezando a ser m¨¢s vigilantes. En Espa?a, la Comisi¨®n de Salud P¨²blica emitir¨¢ este mi¨¦rcoles recomendaciones, tras la reuni¨®n que mantuvo el martes la Ponencia de alertas, en la que se descartaron medidas como el control de fronteras o la vacunaci¨®n masiva, que no recomiendan los organismos internacionales. Pero, adem¨¢s, piden poner el foco en el lugar donde realmente hay un problema: la RDC y los pa¨ªses vecinos donde se ha empezado a detectar por primera vez el virus.
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