La Euroc¨¢mara retrasa tres semanas la votaci¨®n de la directiva sobre patentes de 'software'
El Parlamento Europeo ha acordado posponer hasta las sesiones plenarias de la semana del 22 de septiembre la votaci¨®n sobre la pol¨¦mica norma que extiende la propiedad intelectual a las invenciones implementadas en ordenador
El Parlamento Europeo ha acordado retrasar hasta las sesiones plenarias de la semana del 22 de septiembre la votaci¨®n sobre la pol¨¦mica norma que extiende la propiedad intelectual a las invenciones implementadas en ordenador. Este proyecto ha levantado las propuestas de la industria del software que asegura ver amenazada su supervivencia.
La directiva sobre las patentes de software se retrasa. Los grupos Socialista y Verde, con el apoyo de los liberales, han conseguido que el texto no llegue al pleno del Parlamento Europeo el d¨ªa 1 de septiembre como estaba previsto, sino tres semanas m¨¢s tarde. Con ello, se pretende tener m¨¢s tiempo para incorporar las enmiendas necesarias para clarificar en qu¨¦ consisten las contribuciones t¨¦cnicas que la Comisi¨®n Europea quiere hacer patentables.
Seg¨²n ha explicado la portavoz del presidente de la Comisi¨®n de Industria de la Euroc¨¢mara, Luis Berenguer, esta dilaci¨®n pretende hacer que la directiva sea "coherente". Efectivamente, pol¨ªticos y juristas consultados por este peri¨®dico critican la vaguedad del texto propuesto por el Ejecutivo comunitario y temen que una interpretaci¨®n laxa permita patentar los programas de ordenador, lo cuales ya est¨¢n protegidos por los derechos de autor.
El proyecto de directiva ha puesto en pi¨¦ de guerra a la industria vinculada al software libre. Aseguran que si el texto se aprueba su futuro se ver¨¢ en entredicho ante la complejidad del derecho de patentes: conocer si un modelo est¨¢ o no patentado es un proceso largo y costoso y lo mismo ocurre para registrar una invenci¨®n. En cambio, la Comisi¨®n Europea argumenta que la protecci¨®n por medio del derecho de propiedad industrial genera riqueza y, con ello, liquidez para realizar nuevas inversiones. De hecho, la Oficina Europea de Patentes (un organismo externo a la UE, pero del que forman parte todos sus miembros) ya ha otorgado unas 30.000 patentes en este campo.
En los ¨²ltimos d¨ªas se ha producido una ola de protestas tanto en Internet como en Bruselas. El pasado mi¨¦rcoles "miles de p¨¢ginas web", seg¨²n aseguran los organizadores, cerraron para mostrar su oposici¨®n a la directiva. Adem¨¢s, ese mismo d¨ªa se celebr¨® una manifestaci¨®n ante la sede del Parlamento Europeo a la que acudieron entre 500 y 1.500 personas, seg¨²n calculan estas mismas fuentes.
Cambiar la definici¨®n
El principal aspecto a limar durante esta pr¨®rroga de tres semanas es el art¨ªculo 2 del proyecto. En su formulaci¨®n actual, se indica que ser¨¢ patentable "toda invenci¨®n para cuya ejecuci¨®n se requiera la utilizaci¨®n de un ordenador, una red inform¨¢tica u otro aparato programable y que tenga una o m¨¢s caracter¨ªsticas nuevas prima facie que se realicen total o parcialmente mediante un programa o programas de ordenador". Tambi¨¦n recoge que se podr¨¢ registrar cualquier "contribuci¨®n t¨¦cnica", a condici¨®n de que "no sea evidente para un experto en la materia".
Las Comisiones de Industria y de Cultura del Parlamento Europeo ya propusieron antes del receso estival una serie de enmiendas que intentaban definir con mayor exactitud los t¨¦rminos de lo patentable. Esas propuestas han sido recogidas parcialmente por la ponente del proyecto, la brit¨¢nica Arlene McCarthy, que no han satisfecho a muchos eurodiputados por lo que el resultado de la votaci¨®n, prevista para el d¨ªa 1, era una inc¨®gnita. Ahora se trata de pactar una reforma que, efectivamente, permita la aprobaci¨®n de la directiva.
Pero el camino hasta su entrada en vigor no termina ah¨ª. Tras el visto bueno del Parlamento debe recibir el del Consejo de Ministros. En el caso de que incluyeran alguna modificaci¨®n deber¨ªa volver otra vez a la Euroc¨¢mara para su ratificaci¨®n. De no recibirla, se abrir¨ªa un largo proceso de consultas entre ambas instituciones encaminado a conseguir una posici¨®n com¨²n o, si ¨¦sta no llegara, su rechazo definitivo.
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