Con la televisi¨®n a cuestas
La televisi¨®n en el m¨®vil busca su hueco en Espa?a
"Yo veo las noticias mientras como y dejo a mis hijos el m¨®vil para que miren un rato el canal de dibujos animados". Juan Carlos Galindo, responsable de comunicaci¨®n externa de Telef¨®nica M¨®viles explica, con la telenovela Pasi¨®n de Gavilanes emiti¨¦ndose de fondo encima de la mesa, la nueva revoluci¨®n de la peque?a pantalla: la televisi¨®n en el m¨®vil.
Desde finales de octubre, medio millar de personas en Madrid y Barcelona participan en una experiencia piloto: ver 14 canales de televisi¨®n en su m¨®vil. Los resultados del estudio se har¨¢n p¨²blicos en febrero aunque tras este periodo de prueba las primeras impresiones apuntan hacia un nuevo concepto de televisi¨®n: programas de corta duraci¨®n e interactividad.
La idea no es nueva, ya existen operadores que ofrecen ver la televisi¨®n desde m¨®viles 3g, de tercera generaci¨®n, aunque la tecnolog¨ªa si. El medio millar de personas que participan en esta experiencia piloto utilizan la tecnolog¨ªa Digital Video Broadcasting-Handheld (DVB-H), que adapta al m¨®vil la se?al de la televisi¨®n digital terrestre.
"La diferencia es que cuando utilizas un m¨®vil de 3g, tercera generaci¨®n, para ver determinados programas los pides y pagas por ellos pero esta tecnolog¨ªa consume mucho espectro, est¨¢ limitada por la concesi¨®n y no es un chicle que se estira. Se puede terminar colapsando. Si se utiliza DVH-B se reciben, por ejemplo en Madrid, todos los canales gracias a un transmisor y tres repetidores instalados en distintos puntos de la ciudad. Y la tecnolog¨ªa permite ver hasta 40 canales de telefon¨ªa m¨®vil", explica Mar¨ªa Dolores Hern¨¢ndez, directora de An¨¢lisis y Evaluaci¨®n de Telef¨®nica M¨®viles.
La existencia de estos repetidores en Madrid colocados por Abertis Telecom, empresa de telecomunicaci¨®n que junto al fabricante de tel¨¦fonos finlandesa Nokia y la operadora espa?ola que participan en la experiencia, permite ver la televisi¨®n desde la pantalla del m¨®vil mientras se pasea por el ¨¢rea metropolitana. Una experiencia que intenta, indica Hern¨¢ndez "evaluar la viabilidad t¨¦cnica y comercial".
Porque aunque la idea parece interesante para operadoras y fabricantes, los problemas son muchos. El m¨¢s problem¨¢tico es la difusi¨®n de la se?al. Los tres repetidores de telefon¨ªa m¨®vil con insuficientes y ¨²nicamente permiten recibir la televisi¨®n en determinadas zonas. Los recientemente instalados para ver la TDT, por ejemplo, no valen "porque no est¨¢n adaptados", explica la directora. "El ¨¦xito de la telefon¨ªa m¨®vil no va a depender de las operadoras, es necesario un desarrollo t¨¦cnico, las antenas actuales est¨¢ muy altas y el m¨®vil lo utilizamos a pie de calle, no andamos por el tejado, por eso hay muchos huecos sin cobertura", a?ade.
Otro de los problemas es que el nuevo servicio que se prueba no est¨¢ a¨²n regulado ni se sabe lo que puede costar. Los representantes citados no se atreven a aventurar cu¨¢nto puede llegar a costar un m¨®vil con tecnolog¨ªa DVB-H ni lo que van a tener que pagar las operadoras a las diferentes televisiones por emitir sus programas.
Lo que s¨ª parece claro tras estos primeros meses de prueba es que, seg¨²n Paloma Castellano, responsable de contenidos de Telef¨®nica M¨®viles, "el prime time ha cambiado. Ya no es a las diez e la noche, es antes". Tambi¨¦n, avanza, "los usuarios de la prueba se conectan una media aproximada de entre seis minutos y 15 minutos. En peque?os intervalos".
Un tiempo de conexi¨®n que va a revolucionar los contenidos televisivos. "Las diferentes televisiones har¨¢n programas m¨¢s cortos, series muy cortas y se tendr¨¢n que adaptar. Tambi¨¦n que potenciar¨¢ la interactividad", se?ala Hern¨¢ndez que a?ade: "el gran reto es que, aunque la experiencia est¨¢ dirigida a personas entre 15 y 40 a?os, la gente mayor tambi¨¦n se enganche porque el concepto de televisi¨®n lo tienen tambi¨¦n los mayores a diferencia, por ejemplo, de Internet". Para los m¨¢s j¨®venes, concluye Hern¨¢ndez, el objetivo es "que la televisi¨®n vuelva a ocupar el mismo protagonismo que ten¨ªa antes de Internet". Y que sea desde el m¨®vil.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.