Roland Moreno, creador de la tarjeta inteligente
El inventor franc¨¦s us¨® el ¡®microchip' como medio de pago y de identificaci¨®n
Roland Moreno, muerto el 29 de abril a los 66 a?os, se jact¨® en una ocasi¨®n de que pod¨ªa parar a cualquiera por Par¨ªs y que ese alguien llevar¨ªa encima al menos tres de las tarjetas inteligentes que ¨¦l invent¨® entre tarjetas de cr¨¦dito, tarjetas de compra y tarjetas de telefon¨ªa. Hoy en d¨ªa, el producto se ha expandido a tarjetas de transporte, carn¨¦s de identidad, permisos de conducir y la tarjeta SIM del m¨®vil.
?Aunque el ¨¦xito de su producto le hizo un hombre rico ¡ªsu empresa, Innovatron, ha ganado 150 millones de d¨®lares en derechos de autor¡ª, no consigui¨® el reconocimiento mundial como otros empresarios. Sin embargo, se convirti¨® en uno de los h¨¦roes nacionales de Francia y fue distinguido por el Gobierno con la Legi¨®n de Honor.
En los sesenta, Moreno, por aquel entonces un joven de pelo gre?udo nacido en El Cairo en 1945, hijo de padre ap¨¢trida de origen espa?ol, y madre francesa, trabaj¨® como oficinista, reportero en la revista Detective, chico de los recados en L¡¯Express y como editor en una publicaci¨®n sobre qu¨ªmica entre 1970 y 1972. Posteriormente fund¨® la empresa Innovatron. Su primer ¨¦xito fue un sistema de software para crear marcas comerciales combinando palabras del diccionario previamente seleccionadas.
Su idea consisti¨® en usar un microchip para llevar datos encima. La patente original se registr¨® en 1974. El dispositivo estaba pensado para colocarse sobre un anillo boca abajo con unas patillas para hacer contacto sobre la superficie correspondiente. En 1975 Moreno simplific¨® el sistema insertando el microchip en una tarjeta. En 1976, demostr¨® su efectividad haciendo un pago por sistema electr¨®nico.
La tarjeta inteligente de Moreno era mucho m¨¢s cara que las de banda magn¨¦tica por lo que cost¨® que sus cifras de venta despegaran inmediatamente. No obstante, el invento acab¨® por convertirse en un ¨¦xito en su pa¨ªs. France Tel¨¦com us¨® el prototipo de las tarjetas inteligentes para los tel¨¦fonos de pago a partir de 1983. Los bancos galos pusieron en funcionamiento un sistema de tarjeta nacional de d¨¦bito, la Tarjeta Azul, en 1992. Por aquellos a?os la Academia Francesa hab¨ªa incluido la palabra telecarte en su diccionario con esta definici¨®n: ¡°Tarjeta provista de un dispositivo electr¨®nico concebida para permitir el pago de telecomunicaciones¡±. Moreno declar¨® en 1990: ¡°En Francia se acabaron los actos de vandalismo en las cabinas. Nadie puede robar monedas. No existen¡±.
Hay, sin embargo, quienes ve¨ªan inconvenientes. Algunos estaban preocupados por la seguridad. Moreno respondi¨® ofreciendo en 2001 un mill¨®n de francos a cualquiera que viera vulnerada la seguridad de su tarjeta en un plazo de 90 d¨ªas. Nadie consigui¨® hacerse con el dinero. Otras preocupaciones estaban relacionadas con el derecho a la intimidad. El franc¨¦s admiti¨® que su invento podr¨ªa facilitar la labor de un Gran Hermano. La tarjeta inteligente hac¨ªa m¨¢s f¨¢cil seguir la pista de alguien: se pod¨ªa saber d¨®nde se utilizan las tarjetas de cr¨¦dito, en qu¨¦ punto se sube o se baja un pasajero o donde se encontraba el propietario de un m¨®vil.
Aparte de crear sus tarjetas, Moreno fue escritor y vividor. Bajo el seud¨®nimo de Laure Dynateur, public¨® L¡¯aide m¨¦moire du nouveau cordon bleu [Cuaderno de notas del nuevo cordon-bleu], un libro de cocina que promet¨ªa ¡°2.000 nuevas maneras de sorprender a sus invitados¡±. Con su apariencia de profesor chiflado, logr¨® inventar extra?os artilugios, como una calculadora de bolsillo capaz de emitir m¨²sica.
En una entrevista a France Soir, dijo que le gustar¨ªa que le hubieran homenajeado con un mu?eco de cera con su cara, a?adiendo: ¡°Se dice que Dios debe mucho a Johann Sebastian Bach. Me gustar¨ªa que se dijera que Francia debe mucho a Moreno¡±.
? Guardian News & Media
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