Los talleres de barrio se adaptan con dificultades al coche el¨¦ctrico
Los estudios calculan que las reparaciones y tareas de mantenimiento descender¨¢n entre un 38% y un 70%
Los motores de los coches el¨¦ctricos tienen menos piezas que los de combusti¨®n interna. Desaparecen filtros, buj¨ªas, inyectores o correa de distribuci¨®n. Las aver¨ªas son menos frecuentes, por tanto, y los veh¨ªculos necesitar¨¢n menos mantenimiento.
La consultora MSI, especializada en el sector automovil¨ªstico, estima que con el coche el¨¦ctrico las reparaciones de electromec¨¢nica, mec¨¢nica y mantenimiento descender¨¢n un 70%. En este c¨¢lculo se dejan al margen las intervenciones en carrocer¨ªa. La tambi¨¦n especialista en el mercado del motor, Solera, apunt¨® un escenario hipot¨¦tico en 2050, donde el parque entero fuera el¨¦ctrico. En ese caso la facturaci¨®n total de los talleres en Espa?a caer¨ªa de 13.639 millones de euros a 8.472 millones, un 38%.
Como sucede con todos los grandes cambios, los peque?os negocios son los que m¨¢s sufren. Se necesita m¨²sculo para aguantar el tir¨®n y, m¨¢s importante, inversi¨®n para adaptarse a las novedades. Dos cualidades que no derrochan las peque?as empresas. En el taller de Chus, Motor Cebis, ya han empezado a prepararse para ese hipot¨¦tico futuro. Una parte del suelo es de nylon, aislante el¨¦ctrico, sobre el que luce un Nissan Leaf con el cap¨® levantado.
La principal diferencia para trabajar con coches el¨¦ctricos est¨¢ en las medidas de seguridad, pues sus bater¨ªas funcionan a 1.000 voltios. Chus nos ense?a unos guantes de goma, de un aspecto similar a los de fregar platos, explica que se necesitan zapatillas con una suela m¨¢s gruesa y muestra una p¨¦rtiga rematada por un gancho: por si un mec¨¢nico se queda pegado a la corriente y hay que tirar de ¨¦l. As¨ª de sencillo. Tambi¨¦n hay m¨¢scaras, para evitar que salten chispazos a la cara, y un controlador de voltaje, que mide la salud de la bater¨ªa.
Ponerse las pilas
Motor Cebis, ubicado en la parte trasera de un bloque de pisos de Alcorc¨®n, es uno de los primeros talleres de barrio en adaptarse a los veh¨ªculos h¨ªbridos y el¨¦ctricos. Chus y Antonio, su socio, pusieron en marcha el negocio hace 19 a?os y hace tres hicieron reforma y decidieron ¡°ponerse las pilas¡±. Nunca mejor dicho. ¡°Fue por no quedarnos fuera. Te pones a ver c¨®mo vienen las cosas y parece que de un d¨ªa para otro todo se va a transformar¡±, dice Chus, con la iron¨ªa de quien sabe sus preocupaciones exageradas pero tampoco las ignora. ¡°Te da v¨¦rtigo pensar que te vas a quedar descolgado¡±.
A Chus siempre le interesaron los nuevos motores, casi desde que empez¨® a trabajar con 15 a?os mientras estudiaba su Formaci¨®n Profesional de electromec¨¢nica. Pero cree que el coche el¨¦ctrico 100% va a tardar en llegar. A ellos de momento no les ha llegado ninguna aver¨ªa. ¡°Solo mantenimientos. Por ejemplo, estos coches llevan anticongelante. El sistema el¨¦ctrico va refrigerado por agua, igual que un motor tradicional. Tenemos l¨ªquido de freno, por lo tanto tenemos latiguillos y pastillas de freno¡±.
Pero ser¨¢ la acumulaci¨®n energ¨¦tica lo que m¨¢s dinero deje en los talleres. ¡°Las bater¨ªas requieren un mantenimiento, como por ejemplo un equilibrado constante. En cuanto la tensi¨®n modular nos var¨ªe 0,3 amperios la centralita bloquea el sistema¡±, Chus indica que estas tareas hay que realizarlas con cierta frecuencia. Tambi¨¦n habla de otras posibles aver¨ªas, como el deterioro de una parte de la instalaci¨®n, cuando la tensi¨®n derrite los cables.
El proveedor de Chus en lo que respecta al coche el¨¦ctrico es RecOficial, una red de talleres y distribuci¨®n de recambios que se ha lanzado anticipadamente al nuevo motor. Empezaron hace siete a?os con los el¨¦ctricos y ahora preparan a los talleres para la transici¨®n que est¨¢ por llegar. Proporcionan herramientas aisladas, equipamiento y hasta puntos de carga.
Rub¨¦n ?lvarez, responsable de desarrollo de red de RecOficial, asume los retos que afrontan los talleres: ¡°Un veh¨ªculo el¨¦ctrico no tiene aceite, no tiene inyectores, gesti¨®n de motor, filtro, kit de distribuci¨®n, escape. Algunos de estos elementos se cambian anualmente o varias veces al a?o, depende de los kil¨®metros que se hagan. Al final es mucho dinero¡±.
En su escenario de parque el¨¦ctrico al 100%, la consultora Solera estimaba que el n¨²mero de horas empleadas en reparaciones caer¨ªa en un 90%. Los ingresos por veh¨ªculo en este plano pasar¨ªan de los 3.429 euros actuales, a lo largo de diez a?os, a 489 euros.
La mirada de ?lvarez va m¨¢s all¨¢. Advierte que la transici¨®n afectar¨¢ a todo el sector de posventa: ¡°Nosotros vivimos de vender recambio y, si estamos hablando de que los talleres van a consumir un 40% menos de recambio, eso es lo que vamos a dejar de vender. De ah¨ª que se busque la adaptaci¨®n de recambistas y talleres¡±.
El coste de la adaptaci¨®n
Desde su posici¨®n, ?lvarez admite que los talleres peque?os son quienes m¨¢s complicado lo tienen. La adaptaci¨®n no ser¨¢ barata. ¡°Puede ir desde los 7.000 u 8.000 euros, para empezar a adaptar el taller, a m¨¢s de 30.000 euros¡±, apunta.
Hasta la fecha Chus calcula que han gastado unos 15.000 euros en la actualizaci¨®n del taller, entre maquinaria, equipos de control de voltaje, de diagn¨®stico y suelo. A¨²n les queda poner un punto de carga y completar su equipamiento, m¨¢s caro que el tradicional. ¡°Una herramienta de mano preparada para coches el¨¦ctricos, aislada, forrada de goma, cuesta cuatro veces m¨¢s¡±, comenta.
Desde la consultora MSI prefieren templar los ¨¢nimos. A la ca¨ªda de facturaci¨®n por los coches el¨¦ctricos le a?aden otros ingredientes, como el aumento del car sharing o la llegada del coche aut¨®nomo. ¡°Llegamos a la conclusi¨®n de que unas cosas compensar¨¢n las otras y, al final, la facturaci¨®n de posventa no caer¨¢ tanto¡±, indica Jos¨¦ Manuel L¨®pez, director comercial de MSI Iberia.
¡°Habr¨ªa otro tipo de mantenimientos o de posventa preventiva. Y estos arreglos ser¨ªan m¨¢s caros, ya que la tecnolog¨ªa es m¨¢s sofisticada¡±, incide L¨®pez. ¡°Ya no ser¨ªa un mec¨¢nico como antes el que te arreglar¨ªa el coche. A lo mejor ya tendr¨ªa que entender m¨¢s de qu¨¦ software lleva ese veh¨ªculo¡±.
Para Chus los coches aut¨®nomos quedan a¨²n muy lejos, aunque admite que las reparaciones de un el¨¦ctrico podr¨¢n ser m¨¢s caras. Sin embargo, el margen de beneficio no ser¨¢ tan elevado, como ocurre en un cambio de bater¨ªa. ¡°El d¨ªa a d¨ªa de los talleres ha sido el mantenimiento de los motores. Correas, filtros; lo que es el motor de combusti¨®n¡±, recuerda Chus. ¡°?Qu¨¦ nos relaja un poco? Que seguimos teniendo el sistema de tracci¨®n, el sistema de frenado, el de refrigeraci¨®n y seguimos teniendo algo de engrase. Al final seguimos teniendo una m¨¢quina que requiere un mantenimiento, que es de lo que viven los talleres¡±.
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