Un exempleado subcontratado por Apple reclama a la UE controles sobre el uso de la informaci¨®n de usuarios

Un extrabajador subcontratado por Apple reclama a las autoridades europeas que se investigue a la firma de Cupertino por el uso que hace de la informaci¨®n privada de clientes. Para ello, uno de sus antiguos empleados ha enviado este mi¨¦rcoles a las autoridades de protecci¨®n de datos de la Uni¨®n Europea un comunicado para reclamar que se verifique que respeta la privacidad de sus usuarios. Y se pone a disposici¨®n para contar los procesos y forma de trabajar que ten¨ªa en la compa?¨ªa cuando se dedicaba a la escucha de audios privados. ¡°Escribo esta declaraci¨®n para informarle de una violaci¨®n masiva de la privacidad de millones de ciudadanos de la que he sido testigo¡±, escribe en la nota enviada Thomas Le Bonniec.

Esta petici¨®n se debe a los programas de escuchas de grabaciones y datos que realizaba Apple, tambi¨¦n en Espa?a, como adelant¨® EL PA?S el pasado verano. Entonces, la firma de Cupertino aseguraba que esta informaci¨®n se transmit¨ªa de forma anonimizada y no se pod¨ªa saber qui¨¦n era el usuario. M¨¢s de una decena de transcriptores consultados por este peri¨®dico confirman que ten¨ªan acceso en aquella aquel momento a informaci¨®n privada como la localizaci¨®n exacta, agenda de contactos, compras realizadas y aplicaciones instaladas, entre otros. Desde octubre del a?o pasado, la firma modific¨® las condiciones de estos proyectos y esta informaci¨®n ya no la gestionan empresas terceras y solo se recoge de los usuarios que den su consentimiento. En la nota, el antiguo empleado asegura que mientras ¨¦l trabajaba para Apple (dej¨® de trabajar para la empresa subcontratada por la firma de Cupertino en julio del a?o pasado): ¡°Todo se recopil¨® en grandes conjuntos de datos, listos para ser explotado por Apple para otros proyectos¡±. Y a?ade: ¡°Todo esto debe ser investigado con urgencia por las autoridades de protecci¨®n de datos y los vigilantes de privacidad¡±.

En el caso de Le Bonniec, que con esta denuncia incumple el acuerdo de confidencialidad firmado con la empresa, realiz¨® estas funciones desde Irlanda. ¡°Escuchaba cientos de grabaciones recibidas de dispositivos Apple en Francia todos los d¨ªas y correg¨ªa las transcripciones del asistente de Apple (Siri). Estas grabaciones a menudo se realizaron sin que se activase Siri de forma voluntaria¡±, explica el exempleado de una empresa que subcontrataba Apple. El mismo procedimiento que se segu¨ªa en Espa?a y con el mismo problema para la privacidad de las personas: la grabaci¨®n se activaba en multitud de ocasiones por error y los revisores acababan escuchando desde discusiones de pareja hasta conversaciones m¨¦dicas, por ejemplo.

En este caso se apunta solo a Apple. Aunque estos programas de escucha lo realizaban todas las grandes tecnol¨®gicas (Google, Microsoft, Apple, Amazon). Sin embargo, esto no supone una justificaci¨®n para estas firmas. De hecho, el pasado verano vivieron todas un punto de inflexi¨®n en su forma de mejorar la inteligencia artificial de sus dispositivos inteligentes, ya que desde entonces tuvieron que cambiar su pol¨ªtica de actuaci¨®n y, dicen, ahora solo utilizan las grabaciones de los usuarios que permiten usar su informaci¨®n para la mejora de estos sistemas.

En el caso de Apple, por ejemplo, la compa?¨ªa tuvo que emitir un comunicado para anunciar, primero, la paralizaci¨®n de estos programas de escucha. Y segundo, para realizar cambios cuando se retomaran. ¡°No hemos estado a la altura de nuestros elevados ideales y pedimos disculpas por ello. Como anunciamos anteriormente, hemos interrumpido el programa de evaluaci¨®n de Siri¡±, explicaba entonces la firma en su web. Y dijo que cuando se retomasen estas pr¨¢cticas (fue en octubre) se har¨ªa ¡°sin conservar las grabaciones¡± y solo cuando ¡°los usuarios activen la opci¨®n de ayudar a mejorar Siri¡±. Adem¨¢s, ¡°solo empleados de Apple podr¨¢n escuchar las muestras de audio¡±. Sin embargo, el comunicado enviado por Le Bonniec denuncia: ¡°No se ha hecho nada para verificar si Apple realmente detuvo el programa¡±.

Escuchas y datos privados

?Para qu¨¦ se hac¨ªan estas escuchas y qu¨¦ supon¨ªan? Las grandes firmas tecnol¨®gicas aseguran que las audiciones se realizaban para mejorar lo que el asistente virtual era capaz de entender mediante la inteligencia artificial. Pero esto, en la pr¨¢ctica, implicaba que los revisores tuvieran acceso a conversaciones ¨ªntimas e incluso a datos personales sensibles. ¡°La gente habla con Siri a diario, enga?ada al pensar que solo le escucha una m¨¢quina, pero no es as¨ª. Siri puede actuar como esp¨ªa, y su capacidad de ¡°responder¡± e ¡°interactuar¡± con el usuario depende de millones de grabaciones revisadas y corregidas por humanos al contrario de lo que la mayor¨ªa pueda pensar¡±, a?ade la nota.

Con Apple, as¨ª como con otras grandes tecnol¨®gicas, exist¨ªan diferentes proyectos: en los que los empleados escuchaban cientos de audios por hora era muy complicado que se pudieran relacionar diferentes grabaciones con una misma persona, pero hab¨ªa otros casos en los que el sistema ya ofrec¨ªa una recopilaci¨®n de los mensajes de un solo usuario. "Hab¨ªa proyectos en los que el sistema te facilitaba un historial de audios y b¨²squedas escritas con peticiones anteriores del usuario, te dejaba ver su agenda de contactos, la ubicaci¨®n casi exacta en el momento de la grabaci¨®n y la lista de apps instaladas¡±, aseguran a EL PA?S empleados que fueron subcontratados por Apple.

Este acceso a una ingente cantidad de informaci¨®n privada se le daba a estos transcriptores para que pudieran mejorar las respuestas de Siri, en el caso de Apple, o de otros sistemas de inteligencia artificial con los que trabajaban firmas como Microsoft, Google o Amazon. ¡°Ten¨ªamos que comprobar que si ped¨ªa hablar con el contacto Mam¨¢, que no llamase a otro con el nombre Man¨¢, por ejemplo. Lo mismo con las apps y direcciones. Y el hist¨®rico de audios o las diferentes grabaciones en cadena las ten¨ªamos que usar para entender el contexto y comprobar si hab¨ªa peticiones recurrentes¡±, explican antiguos empleados.

Y sobre la localizaci¨®n de los clientes, en las grabaciones y peticiones a Siri para ir a un lugar espec¨ªfico (se puede hacer de forma oral o escrita), el sistema les se?alaba en la parte superior la ciudad desde la que se hac¨ªa la b¨²squeda y la zona. ¡°Por ejemplo: Madrid, Puerta del Sol¡±, relatan los extrabajadores, "que es desde donde ped¨ªa ir a un sitio para comer, a una tienda o a un lugar en concreto¡±. Y en los casos en que hab¨ªa varias opciones a elegir, los revisores ve¨ªan las diferentes opciones con la distancia exacta hasta el lugar de destino. De esta forma, se podr¨ªa triangular el punto casi exacto donde estaba el usuario.

A esto hay que a?adir que los micr¨®fonos de los dispositivos, que en principio solo se activan por un comando espec¨ªfico (¡°Hola Siri¡±, ¡°Ok Google¡±, ¡°Alexa¡±¡­), comenzaban la grabaci¨®n en multitud de ocasiones de forma err¨®nea, lo que provocaba que se registrasen audios con charlas ¨ªntimas. ¡°He escuchado decenas de discusiones privadas, conversaciones con el m¨¦dico o redacci¨®n de contratos confidenciales. Incluso personas teniendo sexo sin saber que se les estaba grabando¡±, repiten diferentes revisores de Apple.