Suplantaci¨®n de perfiles: ¡®¡®Con mis fotos de Instagram crearon una cuenta falsa y pusieron un enlace hacia contenido er¨®tico¡¯¡¯
La suplantaci¨®n de cuentas en las redes sociales puede afectar a cualquier persona, no necesariamente a los personajes p¨²blicos. Esta usuaria de Instagram lo ha sufrido tres veces en menos de un a?o
Era la noche de Halloween cuando Blanca Lozano (Madrid, 1998) se enter¨® de que, por tercera vez, alguien hab¨ªa cogido sus fotos de Instagram y se hab¨ªa hecho pasar por ella. De esto hace menos de tres meses. Esta periodista no pudo sino preguntarse por qu¨¦ le ocurr¨ªa a ella. Dos de las cuentas en las que trataron de suplantarla tomaron varias fotograf¨ªas que ten¨ªa en su perfil real y a?adieron un nombre falso. En la otra, pusieron su nombre real e incluyeron un enlace en la biograf¨ªa. Con esta tercera cuenta el o los suplantadores trataron de dar a entender que ese era el perfil secundario de Lozano: ¡®¡®Pon¨ªa que si quer¨ªan ver el contenido que no me dejaban subir a Instagram, se metieran en el link. Me met¨ª y aparec¨ªa un gif de una chica haciendo un gesto sexual muy expl¨ªcito, como si fuese yo¡¯'. Para acceder a ese supuesto contenido, hab¨ªa que pagar dentro del enlace.
Lozano cree que esa cuenta sigue activa. La joven asegura que, tras pedir a sus casi 2.000 seguidores que denunciaran la cuenta falsa, le lleg¨® una notificaci¨®n de Instagram diciendo que la cuenta no infring¨ªa las normas de la plataforma. ¡®¡¯?Qu¨¦ m¨¢s hace falta? ?Qu¨¦ pasar¨¢ con una chica de la que suban un v¨ªdeo y est¨¦ ah¨ª durante varias horas? Me sent¨ª vulnerable y cansada, y me planteaba qui¨¦n podr¨ªa ser. No entend¨ªa por qu¨¦ me lo hac¨ªan a m¨ª. Cualquiera que hace eso sabe que est¨¢ perjudicando a la otra persona¡¯', se lamenta.
Lozano decidi¨® acudir a la Polic¨ªa Nacional para denunciarlo. Cuando un agente le pregunt¨® qu¨¦ iba a denunciar y se lo cont¨®, le dijo, seg¨²n relata: ¡°Hombre¡ yo que t¨² no lo denunciar¨ªa porque si la persona que se est¨¢ haciendo pasar por ti no ha utilizado ni tu direcci¨®n, ni tu n¨²mero de tel¨¦fono, ni tu nombre completo, no es que est¨¦ incurriendo en un delito de mayor gravedad. A no ser que sea algo grave, estas cosas no suelen salir a tr¨¢mite¡±. Por eso no lleg¨® a denunciarlo. Ni tampoco la vez siguiente. ¡°Pens¨¦ que no me iban a hacer caso¡±, admite Lozano. Lo denunci¨® ante Instagram, eso s¨ª.
Fue una decisi¨®n correcta. La denuncia ante la propia red social es el primer paso que debe seguir el usuario que se enfrenta a una situaci¨®n as¨ª, seg¨²n explica el comandante Alberto Redondo, jefe del Grupo de Delitos Tecnol¨®gicos (GDT) de la Unidad T¨¦cnica de Polic¨ªa Judicial de la Guardia Civil.
Seg¨²n Redondo, despu¨¦s de eso, la v¨ªctima debe ¡®¡®pasarse por el cuartel m¨¢s cercano de la Guardia Civil¡¯' para denunciarlo. Considera, eso s¨ª, que ¡¯'muchas veces la denuncia tiene m¨¢s ¨¦xito en el plano administrativo, como en la Agencia Espa?ola de Protecci¨®n de Datos, que, adem¨¢s, suele imponer sanciones m¨¢s elevadas y los tr¨¢mites son m¨¢s r¨¢pidos¡¯¡¯.
Resulta muy complicado saber si un caso como el de Lozano habr¨ªa acabado en condena. Al tener un perfil p¨²blico, las fotos no fueron robadas como lo habr¨ªan sido a trav¨¦s del hackeo de una cuenta privada. Adem¨¢s, todo depender¨ªa de la consideraci¨®n del juez y de si se produjo un delito de usurpaci¨®n del estado civil o suplantaci¨®n de identidad, de si lleg¨® a producirse una estafa o no, de los perjuicios a los que se enfrent¨® la v¨ªctima, etc. Aunque, eso s¨ª, normalmente en este tipo de acciones no se incurre en un solo delito, sino que se trata de un concurso de infracciones, como insiste el comandante.
A todo eso se suma que, seg¨²n explica Redondo, la investigaci¨®n de estos delitos resulta muy compleja para las autoridades: ¡®¡®Ya no es solo que quien est¨¢ detr¨¢s de esas cuentas no aparezca con su identidad real, sino que utiliza determinadas t¨¦cnicas complicadas de detectar, como anonimizadores o VPN (red privada virtual, por sus siglas en ingl¨¦s)¡¯'.
De hecho, el jefe del GDT asegura que el modelo criminal ha evolucionado hasta el punto de que los ciberdelincuentes se subcontratan y ¡®¡®hay que olvidarse del cl¨¢sico t¨ªo, o t¨ªa, que est¨¢ solo y encapuchado delante del ordenador. Ahora mismo son organizaciones criminales con los papeles definidos; unos se dedican a buscar v¨ªctimas, otros, al desarrollo tecnol¨®gico, otros, a blanquear el dinero¡ El delito se toma como una empresa¡¯', detalla.
Situaciones habituales
Aunque a ojos de muchos podr¨ªa parecer sorprendente, este tipo de situaciones son m¨¢s habituales en las redes sociales de lo que se puede creer. Seg¨²n Redondo, los delitos relacionados con el robo de datos ¡®¡®son el negocio m¨¢s lucrativo que tienen los ciberdelincuentes ahora mismo¡¯'. Desde el robo de una contrase?a de Twitter o del n¨²mero de tarjeta de cr¨¦dito hasta las estafas como la que se trat¨® de materializar a ra¨ªz del perfil falso de Lozano.
Lo que llama la atenci¨®n de esta pr¨¢ctica es, sobre todo, que afecta a personas corrientes y no solo a personajes p¨²blicos, que adem¨¢s est¨¢n acostumbrados a la exposici¨®n y en muchas ocasiones tienen asumido que su cargo o profesi¨®n lleva aparejados problemas como ese. Es decir, cualquier usuario, sobre todo si tiene un perfil p¨²blico, puede ser v¨ªctima de un intento de suplantaci¨®n.
Las fotograf¨ªas son la materia prima b¨¢sica para los objetivos que buscan los suplantadores. Por eso, resulta l¨®gico que acudan a Instagram. Aun as¨ª, tambi¨¦n se producen suplantaciones en otras redes, como Twitter. Precisamente en esta plataforma, la cantante manchega Rozal¨¦n denunci¨® hace unos d¨ªas que hab¨ªa una cuenta falsa que ped¨ªa fotos y dinero a menores de edad con el pretexto de que podr¨ªan conocerla. El tuit de la artista gener¨® un debate entre los usuarios sobre la posibilidad de pedir el DNI para crear cuentas en las redes sociales, sobre la edad que deben tener los ni?os cuando se les da un m¨®vil y sobre la impunidad que algunos usuarios creen que suele producirse en estos casos.
POR FAVOR!!!! ?????
— Rozal¨¦n (@RozalenMusic) January 8, 2022
Tened cuidado y s¨®lo haced caso a cuentas oficiales!!!!!
Un ejemplo: Esta cuenta falsa se hace pasar por mi y pide fotos y dinero a menores¡. ?
En cuanto os escriban cosas raras ni caso y a denunciar ?
Qu¨¦ repugnante¡ Qu¨¦ asco de pe?a!!!!
???????????? pic.twitter.com/69PBmcyGWE
Twitter establece en sus pol¨ªticas que no revisa activamente los perfiles, sino que analiza el supuesto caso de suplantaci¨®n cuando recibe una denuncia v¨¢lida. Si un usuario quiere denunciarlo, puede hacerlo en el centro de ayuda. En el caso de Instagram, la empresa advierte que solo admite las denuncias de los afectados o de sus representantes, aunque eso no tiene nada que ver con la denuncia que puede hacer cualquier usuario de un perfil dentro de la plataforma cuando cree que el contenido que sube es inadecuado o viola alguna norma o, como en estos casos, ni siquiera son perfiles reales.
En Instagram, que es propiedad de Meta, adem¨¢s de ofrecer el recurso de la denuncia y algunos consejos en su centro de ayuda, para evitar las estafas lanzaron el pasado mes de julio una comprobaci¨®n de seguridad orientada sobre todo a las v¨ªctimas de hackeo de sus cuentas para que puedan hacer sus perfiles m¨¢s seguros, a trav¨¦s del doble factor de autenticaci¨®n, por ejemplo. Aunque no hay cifras exactas sobre Instagram, en Facebook, de julio a septiembre de 2021, se desactivaron 1.800 millones de cuentas falsas, 500 millones m¨¢s que en el primer trimestre del a?o. La ¨²ltima cifra es la m¨¢s elevada desde los primeros meses de 2019.
En un a?o caracterizado por el aumento de esta actividad delictiva y despu¨¦s de enfrentarse al tercer perfil que trataba de suplantarla, Blanca Lozano se sinti¨® obligada a privatizar su cuenta. Asegura que nunca hab¨ªa querido hacerlo, pero, desde que cambi¨® la configuraci¨®n, no se ha vuelto a encontrar una cuenta que haya robado sus im¨¢genes.
Puedes seguir a EL PA?S TECNOLOG?A en Facebook y Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.