Christopher Mims: ¡°Amazon sabe c¨®mo bajar el ritmo de trabajo para prevenir lesiones. Pero quiz¨¢ dejar¨ªa de ganar dinero¡±
Un libro del periodista estadounidense analiza la incre¨ªble sofisticaci¨®n alcanzada por la industria log¨ªstica, donde esta empresa es l¨ªder y a menudo el m¨¢s perjudicado es el trabajador de almacenes
Los trabajadores de almacenes se lesionan el doble que el resto de la industria privada. Casi uno de cada 20 estadounidenses de los que trabajan en la ocupaci¨®n m¨¢s com¨²n en Amazon se lesionar¨¢ o caer¨¢ enfermo cada a?o. ¡°Amazon sabe c¨®mo bajar el ritmo de trabajo para prevenir lesiones¡±, dice el periodista Christopher Mims. ¡°Pero quiz¨¢ dejar¨ªa de ganar dinero¡±, a?ade. Hay almacenes de Amazon donde todos y cada uno de los empleados son renovados cada a?o. La presi¨®n es enorme.
Mims, de 43 a?os (San Antonio, Texas) y que escribe de tecnolog¨ªa en el Wall Street Journal, explica en su libro Arriving Today [Llega hoy], sin traducci¨®n a¨²n al espa?ol, c¨®mo afecta a los trabajadores la automatizaci¨®n creciente de una industria que es la columna vertebral de la globalizaci¨®n. Amazon es una de las mayores expresiones de ese ¨¦xito: lograr que el tiempo entre la recepci¨®n de un pedido y que el producto sea cargado en un cami¨®n en un almac¨¦n sea solo de ¡°entre 45 minutos y 2 horas¡± es, seg¨²n Mims, ¡°un triunfo de la computaci¨®n, ingenier¨ªa de software e inteligencia artificial¡± que lo convierte en ¡°uno de los problemas m¨¢s dif¨ªciles y m¨¢s complicados nunca resueltos por la humanidad¡±.
El libro de Mims sigue el recorrido de un cargador USB desde la f¨¢brica en Vietnam hasta un hogar en el interior de EE UU por r¨ªo, oc¨¦ano, puertos llenos de contenedores sin empleados en Los ?ngeles, camiones y sobre todo almacenes de Amazon. Es un recorrido por la industria log¨ªstica global, que mueve cada d¨ªa tantos contenedores como caben en un tren de dos pisos, lo suficientemente largo como para cubrir m¨¢s de la mitad del ecuador de la Tierra.
¡±Un lugar en el que te obligan a trabajar al l¨ªmite de tu capacidad y tienes poco o ning¨²n contacto humano es la definici¨®n de trabajo penitenciario, es muy alienante¡±
Esta proeza del ingenio humano implica un nivel de robotizaci¨®n que a¨²n convive con cientos de miles de humanos. Hay detalles que los robots no pueden hacer y a¨²n queda un espacio para personas: ¡°Son el pegamento que une todas esas islas de automatizaci¨®n¡±, dice Mims a EL PA?S en una entrevista por videoconferencia desde Baltimore, donde vive. Ser el pegamento consiste en repetir una y otra vez la misma operaci¨®n de mover un producto entre dos cintas o cargar el tr¨¢iler de un cami¨®n.
El algoritmo es el rey
Esas operaciones est¨¢n intensamente reguladas por algoritmos y los humanos las ejecutan solo porque la coordinaci¨®n entre nuestro cerebro y nuestra mano es por ahora imposible de replicar por un robot. El libro cita la paradoja de Moravec, que dice que es mucho m¨¢s dif¨ªcil ense?ar a un ordenador a que mueva una pieza en un tablero de ajedrez que hacer que nos gane al ajedrez.
Este dominio del algoritmo en los almacenes es uno de los principios de Amazon. Su objetivo es eliminar toda la disfunci¨®n y retraso del proceso de trabajo en la compa?¨ªa. Amazon recibe 115 pedidos por segundo, 10 millones cada d¨ªa en total. En solo un segundo la compa?¨ªa asume tantos pedidos como caben en un cami¨®n de reparto de UPS. La repetici¨®n sin errores y cotidiana de esta proeza es la base del ¨¦xito de Amazon. Los humanos en ese proceso son solo una pieza y sus lesiones, por ahora, han sido secundarias. Los robots podr¨ªan ya casi gestionar un almac¨¦n, pero ser¨ªa m¨¢s lento que su combinaci¨®n con humanos. Amazon no puede permitirse lentitud.
¡°En Amazon la velocidad es la expresi¨®n m¨¢s pura de los objetivos y de qui¨¦n est¨¢ a cargo de definirlos¡±, escribe Mims.¡±[Los l¨ªderes de Amazon] no parecen dispuestos a aceptar la idea de que usar rebanadas cada vez m¨¢s finas de las capacidades cognitivas y f¨ªsicas de los trabajadores, quit¨¢ndoles la opci¨®n de usar sus talentos, crea problema nuevos¡±, a?ade. El algoritmo de Amazon sabe c¨®mo va de r¨¢pido cada uno de los trabajadores de un almac¨¦n. A los m¨¢s eficientes les da un premio: m¨¢s trabajo.
Empleos sin entrevistas
Este tipo de empleos no requieren apenas formaci¨®n de ning¨²n tipo. Amazon ya no hace entrevistas para esos puestos de almac¨¦n. Contrata a todo el que llega y pasa un test de drogas. Ese proceso se llama ¡°de-skilling¡± o ¡°des-cualificar¡±. ¡°La p¨¦rdida de habilidades es un factor enorme porque comenz¨® con la manufacturaci¨®n, pero se ha extendido a todo tipo de trabajo manual¡±, dice Mims. Esto tiene consecuencias reales para toda la sociedad: ¡°Vemos una polarizaci¨®n. Por un lado, tienes personas con trabajos exigentes altamente calificados y se les paga en consecuencia. Y por otro, en los trabajos manuales, que sol¨ªan requerir m¨¢s habilidades, se vuelven menos calificados. No importa si se trata de f¨¢bricas, supermercados, centrales de llamadas, servicio al cliente o log¨ªstica. Todos esos trabajos se han vuelto poco cualificados. Lo que sucede es que la clase media era mayor¨ªa; ahora se convierte en una distribuci¨®n en forma de barra con pesas, donde hay m¨¢s en los extremos¡±, a?ade.
Tanto las lesiones, que suelen aparecer al cabo de a?os, como la dispar distribuci¨®n de renta tiene consecuencias obvias en la desigualdad social.
Mims defiende que esta organizaci¨®n empresarial perfecta donde cada peque?a disfunci¨®n o falta de ritmo o competitividad se ha trasladado a nuestras vidas y ocio. Los consumidores formamos parte de esa cadena log¨ªstica sofisticada: consumimos m¨¢s porque es m¨¢s f¨¢cil. ¡°Esto ha ocurrido siempre: la automatizaci¨®n eleva nuestro nivel de expectativas. Oh, ahora que puedes lavar tu ropa inmediatamente, necesitas tener una casa m¨¢s bonita, o ahora que la comida est¨¢ m¨¢s disponible, necesitas cocinar en casa como si fueras un chef con estrella Michelin¡±, a?ade. ¡°Hubo un tiempo en que la gente abr¨ªa algunos alimentos enlatados y los calentaba y pensaban, oh, esto es una comodidad incre¨ªble. Pero la gente ya no se sirve a s¨ª misma ni a sus invitados as¨ª. As¨ª, cada vez que obtenemos una nueva optimizaci¨®n, aumenta nuestra expectativa de nuestro nivel de vida y terminamos con m¨¢s trabajo en lugar de m¨¢s ocio¡±, cuenta.
La consecuencia puede parecer triste, pero es as¨ª, tanto para el consumidor como para el trabajador de Amazon: m¨¢s tecnolog¨ªa no relaja tus expectativas o facilita tu trabajo, sino que crea nuevas aspiraciones o retos que conllevan m¨¢s esfuerzo. Es una gran paradoja: ¡°He llegado a la conclusi¨®n de que es una ideolog¨ªa y que las ideolog¨ªas se pueden combatir con otras ideolog¨ªas¡±, dice Mims. ¡°Una parte de este ritmo de vida proviene de nuestro ecosistema de informaci¨®n, las redes sociales y el resto de medios. Simplemente, se sigue acelerando el ritmo de vida. S¨ª, hay un movimiento donde la gente se pregunta: ?c¨®mo puedo ralentizar mi vida? ?C¨®mo puedo absorber menos informaci¨®n y tener m¨¢s tiempo para m¨ª? Pero es peque?o. As¨ª que creo que esa es la experiencia humana predeterminada¡±, a?ade.
Un sindicato en Amazon
Tras una larga lucha, un almac¨¦n de Nueva York de Amazon logr¨® crear un sindicato de trabajadores. Fue una noticia enorme en EE UU. La empresa contribuye a evitar las pausas y las conversaciones entre compa?eros para que no se creen amistades y relaciones que acaben en asociaciones como sindicatos: ¡°Somos animales sociales y es una necesidad para nosotros tener conversaciones con otros, as¨ª es como creamos significado y soportamos las cosas dif¨ªciles¡±, dice Mims. ¡±Un lugar en el que te obligan a trabajar al l¨ªmite de tu capacidad y tienes poco o ning¨²n contacto humano es la definici¨®n de trabajo penitenciario, es muy alienante. Y sin mencionar el hecho de que puede conducir a niveles m¨¢s altos de lesiones f¨ªsicas por la repetici¨®n de las tareas¡±, a?ade.
Mims advierte de que ha encontrado a empleados que defienden el tipo de trabajo y los beneficios que obtienen en EE UU, pero cree que ambas cosas son posibles: hay gente satisfecha y trabajar en un almac¨¦n de Amazon es un reto complicado. El problema para la compa?¨ªa es que hay lugares, mientras sigue creciendo, donde pronto no habr¨¢ gente que quiera o pueda trabajar en sus almacenes: ¡°Cuando hablo con los trabajadores, no quieren que dejes de comprar en Amazon. No est¨¢n descontentos con los salarios y beneficios, sino que quieren m¨¢s protagonismo y m¨¢s control sobre el ritmo de trabajo, las horas y la naturaleza del trabajo. Por eso se sindicalizan¡±, dice.
¡°Amazon niega todo esto. Dicen que no necesitan sindicatos porque pueden hablar directamente con los empleados y hacen cosas para hacerles felices. Pero es una relaci¨®n totalmente patriarcal, condescendiente, jer¨¢rquica, donde dicen saber qu¨¦ es lo mejor para ti. Y si te est¨¢s quejando, solo eres un quejica, deber¨ªas ir a trabajar a otro lado¡±, dice Mims.
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